Three Wonders es un título de CAPCOM lanzado en el glorioso 1991 para CPS1, la máquina arcade de la misma compañía, y dirigido por Yoshiki Okamoto, uno de los tantos empleados prolíficos de la compañía de Osaka. Este juego guarda bastantes peculiaridades, y es un juego que recuerda mucha gente con cariño aunque muchos sólo jugaron al título más destacable y reconocible de los tres que podías jugar en el mismo mueble.

Ivelias Zero

En el mismo salón en el que solía jugar a Thunder Hoop, Neo Bomberman o el último juego del que hablamos de forma conjunta (Sunset Riders), solía cambiar rápidamente de máquinas a lo largo del mes, aunque no acudía a este de manera asidua por que se encontraba en el barrio de al lado y por entonces mi madre era muy celosa de que pasase de un barrio a otro así como así. Sin contar con los peligros que uno debía sortear de vez en cuando en los arcades.

En este salón del que os hablo durante un largo tiempo pude jugar a Three Wonders, la maravillosa máquina que tenía 3 juegos a la vez: el prescindible Don’t Pull, el mágnifico shoot em up Chariot: Adventure through the Sky, y el mítico e impresionante Midnight Wanderers: Quest for the Chariot.

Una de sus primeras bazas para que te llamase la atención era esta variedad inusitada en una misma máquina, además que los videos de demo que tenía el juego te embaucaban de manera irremediable a insertar tu moneda de cinco duros en este título de CAPCOM. Eso sí, si hablamos de la calidad de los 3 de ellos, es bastante irregular.

Don’t Pull es un videojuego de puzzle en el que debes de ir lanzando bloques contra tus enemigos para ir pasando de pantalla. Tiene cierto parecido a otros juegos de este tipo, pero la verdad que deja mucho que desear y el cooperativo es algo anecdótico pero que se agradece por si te quieres aburrir en compañía. Eso sí, el juego tiene una dificultad ajustada, y pueden acabarse los 31 niveles de forma consecutiva si se te dan bien este tipo de juegos, algo que agradecer en comparación con otros del género y época.

Destacar también que los otros dos juegos comparten estética y personajes puesto que conforman entre los dos una misma historia definida, mientras que este Don’t Pull no se asemeja en nada a los otros dos, dando que pensar las motivaciones de CAPCOM de añadir este título desigual y para mi entender, poco inspirado.

Sin embargo Chariot: Adventure through the Sky es un shoot em up muy válido, con unos gráficos muy bonitos y que a primera vista se identifican con el tipo de diseños que se encontraban en otros juegos para CPS-1: la famosa arcade de CAPCOM. En el encarnamos a Lou y Siva justo cuando termina Midnight Wanderers, en este matamarcianos horizontal en el que deberemos acabar con todo lo que se nos ponga por delante como viene siendo habitual. Como punto favorable y diferenciador en este título es el uso de una especie de cola, que podremos utilizar para esquivar algunos ataques e incluso para defendernos atacando por la parte trasera, además de servirnos de contador de el arma especial algo muy importante si queremos sobrevivir y terminar el juego sin derrochar monedas al tuntún. El juego se puede disfrutar muy bien en solitario, pero como casi siempre, en el terreno arcade jugar en compañía es mucho más divertido y este Chariot no es una excepción, y os insto a que lo juguéis con los dos joysticks a pleno rendimiento. Preparar esos dedos, ¡por que tendréis que machacar los botones sin parar!

Cabesa Freeman

Bueno bueno bueno, esta semana me lo he pasado en grande, eso de que vengan de pronto tres juegos en uno y que encima tenga la obligación de pasarlos completamente para poder contaros mi impresión en el blog, es mucho mas que un placer.

Midnight Wanderers: Quest for the Chariot es un juego que, pese a que me consta que es muy famoso nunca había completado. Alguna vez lo he tocado en la PSP en el magnífico Capcom Classics Collections Remixed, desde el recuerdo de haberlo jugado poco en el salón recreativo donde ya le había dado algún que otro zarandeo al joystick dándole duro, pero completarlo, nunca lo había completado, es más, lo he jugado poco.

Precisamente eso fue lo que más me gustó de meterle mano a Three Wonders, «descubrir» un juego con un buen compañero, siempre es un placer, y si encima es una petición de Danireq, mejor que mejor.

Sus gráficos son impresionantes y su jugabilidad es muy buena, destellos, luces de colores, brillos, armas diferentes, fuegos fatuos como compañeros, árboles malvados como enemigos y cartas con corazones como recompensas son lo que nos acompañará en esta aventura Run and Gun divertidísima.

Tengo que destacar que a medida que vas avanzando en el juego, se va rellenando un mapa con la trayectoria de nuestros héroes. Aunque no es exactamente igual, me recordó mucho al del interludio entre fases de Golden Axe y estos mapas, me encantan.

Si te gustan los juegos de acción, teniendo que disparar a mil sitios y esquivar a los enemigos de todo tipo por la pantalla, esta es tu aventura. Conecta tu segundo mando, parpadea rápido antes de que empiece la fase y ¡dale duro!