Dólmenes y poblados de Artajona

En la mitad del viejo reino de Navarra, existe una localidad que muestra orgullosa en el cerro (498m.) que le guarda su espalda, uno de los conjuntos amurallados medievales mejor conservados de toda Navarra, esta población es Artajona y estas murallas son conocidas como El Cerco de Artajona.
Si su solo visita ya merece conocer este lugar, más al N. en una pequeña alineación de lomas a varios Km existen dos magníficos dólmenes de estructura única en estas tierras y a su izquierda hacia poniente los restos de un poblado de la edad de Hierro que hacen casi obligatorio viajar y conocer estos lugares.
Dólmenes y poblados de Artajona
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Frente al cementerio de Artajona que esta junto a la ermita de Nuestra Señora de Jerusalén, sale una pista de grava con indicaciones que nos guían hacia los dólmenes con rumbo N. entre huertas, por el camino de Enéoiz.
La pista apta para vehículos en poco menos de 4Km nos conduce hacia un pequeño portillo (528m.) que da paso a las tierras de Añorbe pero unos metros antes, paramos en un pequeño aparcamiento (518m.).

El primer dolmen, se sitúa subiendo por unas escaleras unos 70m., es el conocido como dolmen del Portillo de Enériz (525m.). Es un dolmen de época neolítica del tipo de corredor con grandes piedras en los lados. Desde su ubicación se divisa hacia el S. el imponente Cerco.

Continuamos subiendo por la pendiente loma por un sendero marcado de un recorrido de bici que nos conduce hacia unos árboles.
Merece la pena tomarse un respiro y observar los valles de alrededor y del canal de Navarra que circula a nuestros pies.
Continuamos SE por el sendero y llegamos a un Menhir que nos sale al paso, atravesándolo continuamos E por entre los cipreses.
Las alturas cercanas de Agastiaga (594m.) están dominadas por los aerogeneradores de un parque eólico. A lo largo de este paseo hay paneles informativos que nos harán más enriquecedora la visita.
A 680 m desde el primer dolmen, 270m desde el menhir encontramos el dolmen La Mina de Farangortea (566m.).
De iguales características que el anterior y que guarda similitudes a otros de La Rioja y Álava, se compone de corredor, puerta y cámara. En este dolmen se encontraron a parte de restos humanos, diversos objetos como herramientas, armas, adornos y recipientes de cerámica.

Giramos bruscamente hacia la derecha entre los cipreses, y bajamos por una escalera que sujeta el terreno y que desciende hacia una pista.
Recorremos unos 480m hacia la derecha y llegamos de nuevo al pequeño aparcamiento.

Podemos aprovechar para almorzar y si nos hemos quedado con ganas de más, hacia el O. ascendiendo por una pendiente senda unos 140 exigentes m. entre monte bajo, subiendo hacia el cerro contiguo.
En este cerro se ubicó el poblado de Ferrangortea, pero para llegar a nuestro destino debemos seguir caminando recorriendo casi todo el cordal del monte Larrabeltz (566m.) y pasando el portillo del Ingeniero, volviendo a subir primero a una elevación de 567m y más adelante volver a subir hasta otra de 565m rodeada de pinos. En esta última por los indicios parece que se ubicó una torre de piedra.
En la ladera S. hay evidencias de la existencia de un poblado de la Edad de Hierro, varias terrazas, restos de alguna construcción y sobre todo una alineación rocosa utilizada como muralla (hay grandes rocas superpuestas algunas calzadas) y en la que sobresale un gran monolito, de ahí quizás venga su nombre El Dorre (en euskera torres).

Seguimos la muralla en bajada por un sendero entre monte bajo que desemboca en una pista (algún hito).
Esta pista hacia la izquierda nos deja en un camino que con rumbo E (izquierda), nos conduce entre pinos y fincas de cereal en ascenso ,de nuevo a la loma que se sitúa sobre el aparcamiento, ¡y bajando con cuidado este cuento se ha acabado!.

Elegir un día que no haga mucho calor, llevar agua y algo de comida, es una ruta muy interesante para realizarla con niños (fácil+).
A la vuelta siguiendo hacia la derecha desde el cementerio, está el acceso para visitar el Cerco de Artajona.
Este poblado medieval ahora en reconstrucción cuenta con 9 torres pero debió contar con 14 y resulta un conjunto muy interesante de ver tranquilamente. Aquí se ubica la iglesia gótica de San Saturnino (s. XIII), en este lugar parece que existió un asentamiento romano. Las vistas de Artajona y la panorámica de los alrededores es imponente.