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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD DEL ZULIA


FACULTAD DE INGENIERIA
DIVISION DE POSTGRADO
PROGRAMA DE POSTGRADO EN GEOLOGÍA PETROLERA

GEOQUÍMICA DE CRUDOS CRETÁCEOS DEL LAGO DE MARACAIBO

Trabajo de Grado presentado ante la


Ilustre Universidad del Zulia
para optar al grado académico de:

MAGISTER SCIENTIARUM EN GEOLOGÍA PETROLERA

Autor: Ing. Edeberto E. Bracho P.


Tutor: Dr. Marcos E. Escobar N.

Maracaibo, julio de 2010


Bracho Pérez Edeberto Enrique. Geoquímica de Crudos Cretáceos del Lago de Maracaibo.
(2010) Trabajo de Grado. Universidad del Zulia. Facultad de Ingeniería. División de Postgrado.
Maracaibo, Venezuela, 187 p, Tutor: Dr. Marcos Escobar N.

RESUMEN

El objetivo principal de esta investigación fue llevar a cabo el análisis geoquímico de


hidrocarburos en yacimientos del Cretáceo de la Cuenca del Lago de Maracaibo, a partir de la
consolidación de datos preexistente de estudios anteriores, así como de la integración de datos
recientes y de análisis más completos llevados a cabo en este estudio. El universo de muestras
analizadas fue de 76 pozos, haciendo énfasis en crudos de los bloques I (U.E Lagomar) y VIII (U.E
Centro y U.E Centro Lago), en ellos se logró realizar un mayor número de ensayos. Por medio
del análisis SARA, el estudio de la fracción liviana (C15-) con la técnica de cromatografía de gases
acoplada a espectrometría de masas (GC-MS), además de la determinación de biomarcadores
apropiados (por ejemplo; relaciones Prístano/Fitano, Pr/n-C17 y Fi/n-C18, esteranos, terpanos,
metildibenzotiofenos, entre otros), se logro definir las condiciones fisicoquímicas bajo la cuales
fueron generados estos crudos y la influencia de las diferentes características paleoambientales
de sedimentación en la roca madre (Formación la Luna), presentando la misma, diferencia de
facies. En tal sentido, fue posible establecer la predominancia de ambientes calcáreos (marinos)
hacia el norte y noreste de la cuenca e influencia siliciclástica (continental) hacia el suroeste, la
existencia de rocas fuentes con diferentes niveles de madurez térmica e indicios de diferentes
tiempos de generación y expulsión, se logro identificar y definir el origen genético de los
crudos, que para su mayoría el kerógeno es de tipo II, con la casi total ausencia de alteración o
biodegradación en su composición. Se probaron parámetros conocidos de correlación crudo-
crudo (Ejemplo: relaciones V/Ni) en este estudio, lo cual ha arrojado la existencia de rocas
madres comunes dentro de la Cuenca del Lago, Esto ha permitido establecer un modelo
geoquímico actualizado, reconociendo la distribución general de hidrocarburos en los
yacimientos cretácicos.

Palabras claves: Crudos cretácicos, Cuenca del Lago de Maracaibo, Biomarcadores, Fracción
liviana (C15-), Geoquímica de crudos, correlaciones crudo-crudo.

E-mail del autor: brachoewt@pdvsa.com, brachoewt@cantv.net, brachoewt@gmail.com


Bracho Pérez Edeberto Enrique. Crude Oil Geochemistry of Cretaceous of Lake Maracaibo.
(2010) Trabajo de Grado. Universidad del Zulia. Facultad de Ingeniería. División de Postgrado.
Maracaibo, Venezuela, 187 p, Tutor: Dr. Marcos Escobar N.

ABSTRACT

The main objective of this research was to conduct geochemical analysis of hydrocarbons in the
Cretaceous deposits of the Maracaibo Lake basin through the consolidation of existing data
from previous studies and the integration of recent data and more comprehensive analysis
conducted in this study. The universe of analyzed samples was 76 wells, with emphasis on
crude oils from block I (U.E. Lagomar) and VIII (U.E Centro y U.E Centro Lago), in which it was
possible to conduct more tests. By means of SARA analysis, the study of light fraction (C 15-) with
the technique of gas chromatography-mass spectrometry (GC-MS), and the identification of
appropriate biomarkers (eg, pristane/phytane, Pr/n-C17 and Fi/n-C18 ratios, steranes, terpanes,
methyldibenzotiophenes, among others), was achieved to define the physicochemical
conditions under which these oils were generated and the influence of different
palaeoenvironmental characteristics of sedimentation in their source rock (Formación la Luna),
unit on which it was established the presence of two sedimentary facies. In that sense, it was
possible to establish on this unit the predominance of calcareous depositional environments
(marine) to the north and northeast of the basin and clastic influence (terrestrial) to the
southwest, among with the existence of the same source rocks with different levels of thermal
maturity and the evidence of different pulses of generation and expulsion. It was possible to
identify and define the genetic origin of the crude oils, derived from type II kerogen, with the
almost total absence of alteration or biodegradation in its composition. Known oil-oil
correlation parameters were tested (Example: V/Ni ratios) establishing the presence of a single
crude oil type in the Maracaibo Lake Basin in this study. All of this had led to the definition of
an updated geochemical model, allowing the recognition of the general distribution of
hydrocarbons in the Cretaceous deposits.

Key Words: Cretaceous oil, Maracaibo Lake basin, biomarkers, light fraction (C15-), geochemical
analysis of hydrocarbons, oil-oil correlation

Autor´s e-mail: brachoewt@pdvsa.com, brachoewt@cantv.net, brachoewt@gmail.com


DEDICATORIA

Primeramente a la ¡memoria de Mí Hermano…!


“Pues quiero rendir tributo más que una dedicatoria, a alguien que por siempre será muy
especial. Quien me enseño, que aun en las adversidades más fuertes que afrontamos en
la vida, siempre habrá una razón más por la cual seguir luchando, creciendo y asumiendo
los retos que nos depara la vida, ese fue mi hermano Edelberto Antonio; Aunque hoy no
esté presente entre nosotros, merece todo ¡mi respeto y admiración…! Sobre todo,
porque cada día se fue haciendo más fuerte espiritualmente, a tal punto que le entrego
cuerpo, vida y alma a nuestro padre y creador “Dios”, a él vaya ¡mi triunfo alcanzado…!
Hermanito solo es un hasta luego, espéreme que pronto estaremos contigo, ah y por
favor ¡cuida a mi hijo que debe estar junto a tí...!”

También Dedico este Triunfo, Muy Especialmente a mis Hijos Sebastián Enrique y Victoria Paola

A mi Esposa Heydimar

A mis padres María y Edeberto

Y a todos y cada uno de ustedes, quienes de una u otra manera han tenido que ver con este
trabajo.
AGRADECIMIENTO

A Dios, por darme todo y cuanto tengo y soy y sin el ¡nada pudiese haber logrado..!
A mi Gran Familia y Seres Queridos; A mi madre María por haberme dado el ser, a mi padre
Edeberto por haberme levantado como un varón.
A mi esposa Heydimar por ser guía en momentos difíciles.
A mis hijos Sebastián y Victoria por ser la inspiración y principal razón de vivir.
A mi hermanita Andreina por su ímpetu Juvenil y alegría espontánea.
A mis sobrinos, Miguel, Leander y Danilo por llenar los momentos de soledad.
A mis tíos y tías Maternos: Gerardo, Isabel, Bienvenida, Carmen, Mario, Luís, Víctor, Marina,
María Salome y Luís Grande, Paternos: Manuel, Tirso, Lesbia, Carmen, Jesús, Ida, Mirian, Olga,
porque siempre querían y tenían tiempo para hablar de algo especial.
Primos, primas, cuñados, suegros y demás seres queridos y allegados puesto que compartieron
en algún momento su satisfacción por los logros que pudiera alcanzar.
Al Profesor Marcos Escobar, porque me gane un amigo mas.
Al Profesor Malandrino que siempre consigue desenredar algún inconveniente.
Al Custodio del Post-Grado el Sr. Ari, colaborador y auxiliar de los quehaceres del post.
A mi tutor Edwin Tillero, sabio consejero y amistoso compañero.
A la Señora Esther Flores por creer en mí.
A los compañeros Migdalys M., Laurys D., Eloy de Armas, Luis Atencio por su gran ayuda.
A la Universidad del Zulia, Mi Alma Mater.
A Petróleos de Venezuela, principal empresa nacional y ejemplo mundial.
A la Gerencia de Estudios Integrados, escuela de enseñanza.
TABLA DE CONTENIDO

Página

RESUMEN……………………………………………………………………………………………………………………………………4
ABSTRACT…………………………………………………………………………………………………………………………………..5
DEDICATORIA……………………………………………………………………………………………………………………………..6
AGRADECIMIENTO……………………………………………………………………………………………………………………..7
TABLA DE CONTENIDO……………………………………………………………………….……………………………………….8
LISTA DE FIGURAS .……………………….………………………………………………………………………………………….13
LISTA DE TABLAS……………………………………………………………………………………………………………………….16
INTRODUCCIÓN………….…………………………………………………………………………………………………………….17

CAPÍTULO I……………………………………………………………………………………………………………………………….18
INFORMACION GENERAL……………………………………………………………………………………….…………………18
1.1 Ubicación Geográfica………………………………….………………………………………………………………18
1.2 Antecedentes……………………………………………………………………………………………………………..19
1.3 Justificación y Delimitación de la Investigación….……………………………..………………………..29
1.4 Objetivos de la Investigación………………………………………………………………………………………30
1.4.1. Objetivo General…………….………….…..……………………………………………………….…………30
1.4.2. Objetivos Específicos………….………………..…………………………………………………….………30

CAPÍTULO II….…………………………………………………………………………………………………………………………..31
MARCO GEOLÓGICO..……………………………………………………………………………………………………………….31
2.1 Cuenca Petrolífera del Lago De Maracaibo …………………….………………….………………………31
2.2 Evolución Geológica de la Cuenca del Lago de Maracaibo…………………………….………..….34
2.2.1 Formación Río Negro [Cretácico (Barremiense)].………………………….…………….……..37
2.2.2 Formación Apón Cretácico (Aptiense - Albiense).…………………….…………….………….37
2.2.3 Formación Lisure Cretácico (Albiense Medio).……….…………………………….…….………39
2.2.4 Formación Maraca Cretácico (Albiense Superior).………………………….……….….……..39
2.2.5 Formación La Luna Cretácico (Cenomaniense - Campaniense).….….…..……..……….40
2.2.6 Formación Colón Cretácico (Campaniense-Maestrichtiense).………..…………….…….41
2.2.7 Formación Mito Juan Cretáceo (Maestrichtiense Superior).………….…………….…….41
2.3 Sistemas Petroleros…………………………………………………………………………………………….……...43
2.4 Estilos Estructurales….……………………………………………..………………………………………….……..50
2.5 Estudios de Roca Madre en la Cuenca del Lago de Maracaibo……………….………………….52
2.6 Caso De Roca Madre: Formación la Luna……………………………………………………………….…..54
2.7 Análisis Térmico Sobre la Cuenca del Lago de Maracaibo……………………………..…………...61
2.8 Gradiente de Temperatura Actuales en la Roca Madre………………………….…………………..62
2.9 Madurez Térmica de la Roca Madre………………………………………………………………..…………62
2.10 Otras Rocas Madre en la Cuenca del Lago de Maracaibo.…………………….……………………63
2.11 Principales Periodos de Generación y Expulsión (Cocinas)………………..………………………..64

CAPITULO III……………………………………………………………………………………………………………………………..66
MARCO METODOLOGICO…………………………………………………………………………………………………………66
3.1 Separación del Crudo en Saturados, Aromaticos, Resinas y
Asfaltenos (S.A.R.A.)………………………..……………………....………………………………………………..68
3.2 Cromatografia de Gases Acoplada a Espectrometría de Masa
(GC-EM)..………………..………………………………..………………………………..…….…………….………....68
3.2.1 Cromatografía de Gases………………………………………………….…….…………………………..68
3.2.2 Espectrometría de Masa…………………………………………………….…….……………………….72
3.2.3 Procedimiento de Análisis……………….……………………………….……………………………….73

CAPITULO IV……………………………………………………………………………………………………………………………..74
RESULTADOS Y DISCUSIÓN……………………………………………………………………………………………………….74
4.1 Características Generales de los Crudos…………………………………………………..……………..….74
4.2 Uso de Diagramas Ternarios Para Reconocer Clases Geoquímicas de Crudos
y Posibles Procesos de Alteración…………………………..……………………………….…………….……80
4.3 Nivel de Óxido-Reducción del Paleoambiente Depositacional y Litología de la
Roca Madre (Fm. La Luna)………..……………………………………………..………………………….…..…81
4.4 Relaciones Utilizadas Para Definir Posibles Ambientes de Depositación
de la Roca Madre…………………………….……………………………………………………….…………………83
4.4.1. Relación Vanadio Sobre Níquel (V/Ni)…..……..………...…………………….………..………..83
4.4.2. Relación Pristano Sobre Fitano (Pr/Fi)……..…….…….…………..………….……..……………88
4.4.3. Análisis de Compuestos Aromáticos con Azufre, Metildibenzotiofenos (MDBT) .89
4.5 Madurez Térmica de la Roca Madre (Fm. La Luna)………………………………………..……………93
4.5.1. Relación Entre Pr/N-C17 y F/N-C18…………..……………………………………………….…………94
4.5.2. Estéranos…………………….……………………………………..…………………………………………….98
4.6 Análisis de Madurez con Biomarcadores Saturados y Compuestos Aromáticos
+
en la Fracción C15 ………………………………………………………………………………………….………..101
4.6.1. Relación ααα20s/(ααα20s+ααα20r) ó %20s........................................................102
4.6.2. Relación /(+) ó …………………………………..………....…………..……...........104
4.6.3. Porcentaje de Aromatización de Esteroides
(Monoaromáticos a Triaromáticos) T/(T+M) ó Ta/(Ma+Ta)………………………………105
4.7 Correlación Crudo-Crudo……………………………….……………………………………………….…………107
-
4.7.1. Utilización de la Fracción C15 Para Reconocer Familia de Crudos …….………….107

CONCLUSIONES………………………………………………………………………………………………………………………115
RECOMENDACIONES………………………………………………………………………………………………………………116
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS……………………………………………………………………………………………….117

APÉNDICE A1………………………………………………………………………………………………………………………….127
FUNDAMENTOS TEÓRICO……………………………………………………………………………………………………….127
GEOQUIMICA ORGANICA DEL PETOLEO………………………………………………………………………………….127
Clasificación de los crudos…………………..………………………………………………………………………128
ORIGEN Y GENERACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS…………………………………………………………………130
MATERIA ORGÁNICA...................................................................................................................131
Materia Orgánica Húmica................................................................................................131
Materia Orgánica Acuática o Sapropélica........................................................................132
MEDIO AMBIENTE DE DEPOSITACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA……………………………...…………132
PRESERVACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA………………………….………………………………………………..134
ETAPAS DE TRANSFORMACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA……………………………………………………135
Diagénesis……………………………………………………………………………………………………………………136
Catagénesis………..……………………………………………………………………………………………………….137
Metagénesis…………………..……………………………………………………………………………………………138
KERÓGENO……………………………………………………………………………………………………………………………..138
Kerógeno Tipo I……………………………………………………………………………………………………………138
Kerógeno Tipo II………………………………………………………..………………………………………………..139
Kerógeno Tipo III……………………..………………………………………………………………………………….139
ROCA MADRE………………………………………………………………………………………………………………………….139
MIGRACION DEL PETROLEO……………………………………………………………………………………………………141
Migración Primaria………………………………………………………………………………………………………143
Migración Secundaria ……………….………………………………..…….………………………………………..144
ACUMULACIÓN DEL PETROLEO………………………………………………………………………………………………145
PROCESOS DE ALTERACIÓN DEL PETRÓLEO…………………………………………………………………………….146
Biodegradación……………………………………………………………………..…………………………………….147
Lavado por aguas…………………………………………………………..……………………………………………151
Alteración térmica……………………………………………………………………………………………………….151
Deasfaltación…………………………………………………………………………………………..………………….152
Fraccionamiento evaporativo………………………………………………………………………………………153
BIOMARCARDORES…………………………………………………………………………………………………………………154
n-alcanos o parafinas……………………………………………………………………………..……………………155
Isoprenoides e hidrocarburos ramificados…………………………………………..………………………160
Terpanos………………………………………………………………………..……………………………………………163
Terpanos tricíclicos………………………………………………………………………………..……………………164
Terpanos tetracíclicos………………………………....……………………………………………………………..164
Triterpanos pentacíclicos………………………………………………………………………………………..…..165
Triterpanos pentacíclicos basados en el esqueleto del hopano..………….……….……….……165
Índice de Homohopano....................................................................................................168
Isomerización de Homohopanos (22S/(22S+22R))...........................................................169
Terpanos tricíclicos/17α(H)-hopanos...............................................................................169
Ts/(Ts+Tm)........................................................................................................................170
Ts/C3017α(H)-hopano .....................................................................................................170
Triterpanos pentacíclicos diferentes a los hopanos.........................................................170
Esteranos..........................................................................................................................171
Relación esteranos/triterpanos........................................................................................173
Relación esteranos regulares/17α(H)-hopanos...............................................................173
Isomerización de esteranos..............................................................................................174
Hidrocarburos Aromáticos................................................................................................176
Metil-fenantreno…………………………………………………..………………………..………………………….177
Índice de metil-fenantreno (MPI)…………………………………………..……………………………………177
Distribución de dibenzotiofeno……………………………………………….………………………………….179
Relación dibenzotiofeno/fenantreno………………………..…………………………………………………179

TABLAS DE DATOS Y RESULTADOS A1……………………………………………………………………………………..182


LISTA DE FIGURAS

Figura Página
1 Mapa de ubicación geográfica, de la cuenca del lago de Maracaibo……………………... 18
2 Distribución y tipos de crudos presentes en la cuenca del Lago de Maracaibo……... 32
3 Columna estratigráfica generalizada de la cuenca del lago de Maracaibo……………... 33
4 Corte estructural NO-SE a través de la Cuenca de Maracaibo, desde los andes
merideños hasta la Serranía de Perijá……………………………………………………….…………… 34
5 Mapa de distribución de terrenos alóctonos en el Norte de Suramérica…………..…… 35
6 Relación estratigráfica entre las formaciones Río Negro, Apón, Lisure y Maraca…... 38
7 Relación estratigráfica entre las formaciones La Luna, Colon (Miembro Socuy) y
Mito Juan ..……………………………………………………………………………………………………………. 40
8 Mapa de distribución de facies sedimentarias dominantes Cretácico Tardío…………. 42
9 Sistema petrolero de la Cuenca del Lago de Maracaibo, en su primera fase……….... 43
10 Sistema petrolero definido en la cuenca del Lago de Maracaibo, roca madre
Formación La Luna, en la Fase 1……………………………………………………………………….……. 44
11 Sistema petrolero de la "Fase 2"; Cuenca de Maracaibo………………………………………… 45
12 Sistema petrolero definido en la cuenca de Maracaibo, roca madre
Formación La Luna, al tiempo presente……………………………………………………………….… 46
13 Sistema petrolero definido en la cuenca de Maracaibo, roca madre Grupo
Orocué, al tiempo presente 46
14 Mayores elementos tectono-estructurales del noroeste de Sur América, América
Central y del Caribe……………………………………………………………………………………………….. 47
15 Mapa Estructural tope de Calizas Cretácicas………………………………………………………….. 48
16 Fases de Deformación y estilos estructurales………………………………………………………… 49
17 Etapas de generación principal de crudo, para la Formación La Luna, mostrando
las direcciones principales de migración……………………………………………………………….. 55
18 Época en la cual la Formación La Luna alcanzó la madurez térmica………………………. 56
19 Madurez térmica de la Formación La Luna, tiempo actual……………………………….….... 57
20 Mapa de distribución regional de madurez actual para la Formación La Luna…….… 58
21 Tendencia del tipo de materia Orgánica – La Luna – Capacho – Navay………………..… 60
22 Mapa de Ubicación y Pozos con muestras utilizadas para este estudio…………….…… 67
23 Cromatógrafo de gases. …………………………………………………………….………………......……. 71
24 Ejemplo de cromatograma..…………………………………………………………………………….……. 71
25 Sección de correlación A-A’ a través de la región central de la Cuenca de
Maracaibo. ..…………………………………………………………………………………………………………. 78
26 Sección de correlación B-B’ a través de la región suroeste-noreste de la Cuenca.…. 79
27 Diagrama ternario de composición de las fracciones SARA en los crudos
estudiados…………………………………………………………………………………………………………….. 80
28 Diagrama ternario de las concentraciones de parafinas, naftenos y aromáticos 81
Figura Página
(PNA) en los crudos estudiados de la U.E. Lagomar, Bloques VIII y Centro Lago…..…
29 Mapa de la Paleogeografía del Cenomaniense…………………………………………………….... 82
30 Relación Vanadio / Níquel, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo…………….…. 85
31 Histograma de frecuencias para la Relación Vanadio / Níquel, crudos de la Cuenca
del Lago de Maracaibo…………………………………………………………………………………………... 86
32 Relación Vanadio / (Vanadio mas Níquel), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo. ……………………………………………………………………………………………………………. 87
33 Relación entre Pristano y Fitano (Pr/Fi), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo. …………………………………………………………………………………………………………... 89
34 Diagrama ternario de la familia de los isómeros del metildibenzotiofeno, para los
crudos de U.E. Lagomar, Bloques VIII y Centro Lago. …………………………………………….. 90
35 Fragmentograma representativo de ion m/z 198 del centro del Lago de
Maracaibo correspondientes a los Bloques I y VIII. ………………………………………… ..….. 91
36 Fragmentograma representativo de ion m/z 198 correspondientes al campo
Alturitas, costa Oeste del Lago de Maracaibo ……………………………………………………….. 91
37 Relación dibenzotiofeno (DBT)/fenantreno (F) Vs. relación pristano/gitano………….. 92
38 Madurez actual, de la Formación La Luna ……………………………………………………........... 94
39 Diagrama Pristano/n-C17 Vs. Fitano/n-C18………………………………………………………….… 95
40 Grafico de Fitano/n- C18, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo………………..… 96
41 Grafico de Pristano/n- C17, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo……………... 98
42 Diagrama ternario de estéranos regulares en la fracción saturada de los crudos de
la Cuenca del Lago de Maracaibo. .………………………………………………………………………… 99
43 Fragmentograma de masas y la comparación entre (a) Crudos en ambiente
Marino (ALT-11) Cuenca del Lago de Maracaibo, (b) Campo Oriental (JU-455) y (c)
un Crudo de ambiente Continental al Oriente de Venezuela (QG-295)……………..…… 100
44 Fragmentograma del ión m/z 218, para la muestra de crudo perteneciente al
pozo VLA-0810 de la U.E. Lagomar..…………………………………………………………………….… 100
45 Biomarcadores como parámetros y en diferentes rangos de maduración………….…. 101
46 Mapa de madurez térmica %20S (20S/20S+20R), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo. …………………………………………………………………………………………………….…..…. 103
47 Mapa de madurez térmica con %, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo... 105
48 Mapa de madurez de T/(T+M), crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo……….… 107
49 Diagramas polares para las muestras de crudos captados en Bloque VIII y Centro
Lago. …………………………………………………………………………………………………………………….. 109
50 Línea sísmica cubriendo los pozos sobre los cuales se hizo la caracterización
geoquímica de fluidos, Bloque VIII y Centro Lago. ………………………………………………… 111
51 Diagramas de huellas digitales para las muestras de crudos en la U.E. Lagomar….... 112
52 Línea sísmica en la U.E. Lagomar, con los pozos estudiados (VLA-1402, 0810 y UD-
0779)..……………………………………………………………………………………………………………………. 113
Figura Página
A1.1 Tipos de hidrocarburos encontrados en el petróleo……………………………………………... 128
A1.2 Esquema general de evolución de la materia orgánica, desde su depositación
hasta el comienzo del metamorfismo………………………………………………………………….… 135
A1.3 Migración del petróleo……………………………………………………………………………………….…. 142
A1.4 Procesos de alteración del crudo en el yacimiento…………………………………………..……. 147
A1.5 Tipos de parafinas……………………………………………………………………………………………..….. 156
A1.6 Efecto de la biodegradación en la distribución de parafinas……………………………..…… 159
A1.7 Estructura del isopreno…………………………………………………………………………………………. 159
A1.8 Diterpanos acíclicos……………………………………………………………………………………………..… 160
A1.9 Proceso de transformación del fitol a isoprenoides C19 y C20 en medios
reductores y oxidantes……………………………………………………………………………………….…. 161
A1.10 Gráfico de pristano/n-C17 vs. fitano/n-C18 para clasificación de crudos……………..… 162
A1.11 Estructura de los terpanos tricíclicos……………………………………………………………………... 163
A1.12 Estructura de los terpanos tetracíclicos…………………………………………………………….….. 163
A1.13 Cromatograma correspondiente a los terpanos, m/z 191………………………………….….. 163
A1.14 Estructura de los triterpanos pentacíclicos tipo hopano………………………………........... 166
A1.15 Cromatograma m/z 191 para dos muestras a diferentes niveles de madurez…….…. 167
A1.16 Transformación del hopano en sedimentos……………………………………………………….….. 169
A1.17 Estructura de C30 17α(H),21β(H)-Hopano……………………………………………………….…….. 170
A1.18 Estructura del 18α(H)Oleanano…………………………………………………………………….….……. 171
A1.19 Cambios estereoquímicos que pueden ocurrir en la molécula después de la
formación del esterol precursor………………………………………………………………….….……… 172
A1.20 Distribución de esteranos, m/z 217……………………………………………………………….….…… 173
A1.21 Gráfico de la relación dibenzotiofeno/fenantreno (DBT/F) vs. pristano/fitano
(Pr/F)……………………………………………………………………………………………………………….…….. 180
LISTA DE TABLAS

Tabla Página

1 Principales parámetros usados para analizar la fracción de alcanos policíclicos en


el estudio de Volkman et al. (1983)………………………………………………………………………. 21
2 Parámetros utilizados por Talukdar et al., 1986……………………………………………………. 22
3 C.O.T (Carbono Orgánico Total; expresado en % en peso)……………………………………. 53
4 Comparación entre las reservas de Occidente, en el Cretáceo y en este Estudio…. 74
5 Listado de Pozos con sus propiedades básicas de °API y Análisis SARA………………… 75
6 Zonas definidas por las relaciones de dibentiofeno/fenantreno y pristano/fitano
para ambientes sedimentarios y litología de la roca madre…………………………………. 93
A1.1 Composición elemental de crudos convencionales………………………………………………. 128
A1.2 Contenido de Oxígeno en el Agua en Medio Ambiente Marino y Lacustre………….. 133
A1.3 Diámetro Efectivo de las Moléculas de los Fluidos del Yacimiento……………………….. 143
A1.4 Cambios en las propiedades de los hidrocarburos……………………………………………….. 148
A1.5 Cambios en la composición molecular del petróleo con el incremento de la
biodegradación……………………………………………………………………………………………………. 149
A1.6 Distribución de n-alcanos en bacterias, algas y plantas superiores………………………. 156
A1.7 Muestra un resumen de los parámetros medidos con esteranos y triterpanos……. 175
A1.8 Listado de Pozos con algunas caracteristicas básicas……………………………..…………….. 182
A1.9 Listado de Pozos y elementos organometalicos……………………………………….………….. 183
A1.10 Listado de Pozos con Parámetros Moleculares de biomarcadores hallados…………. 185
A1.11 Listado de Pozos y valores de Dibezotiofenos………………………………………………………. 186
A1.12 Relaciones de compuestos identificados en la fracción de C15- con mayor
desviacion estandar, utilzados en los diagramas polares, para los Bloques VIII y
Centro Lago………………………………………………………………………………………………………….. 186
A1.13 Relaciones de compuestos identificados en la fracción de C15- con mayor
desviacion estandar, utilzados en los diagramas polares, para los Bloques VIII y
Centro Lago………………………………………………………………………………………………………….. 187
INTRODUCCIÓN

La Cuenca del Lago de Maracaibo es una de las cuencas petroleras más prolífica del
mundo; ha producido unos 50 millardos de barriles de crudo liviano y mediano, durante los
últimos 65 años (Libros de reserva de Pdvsa 2009), de yacimientos principalmente del Eoceno y
Mioceno. Se han perforado alrededor de mil pozos en el Cretáceo, mayoritariamente en
yacimientos ubicados en la costa occidental del Lago, y algunos en los campos Tía Juana, Ceuta,
Lama, Lamar, Centro y Urdaneta Oeste, con producción minoritaria de crudo y gas, y en algunos
casos, presencia de H2S (Talukdar y Marcano , 1994). Debido a la necesidad de buscar nuevos
horizontes petrolíferos, en una cuenca cercana a cien años de explotación petrolera, el
presente trabajo se enfoca en la caracterización geoquímica del crudo proveniente de
yacimientos cretáceos en el Lago de Maracaibo, con la finalidad de reconocer (Tissot y Welte,
1984):
 El paleoambiente depositacional; materia orgánica Marina vs. Continental, roca madre
detrítica o carbonática.
 La evolución térmica; historia de soterramiento de la roca madre, gradientes geotérmicos.
 La alteración del crudo en el depósito, biodegradación, fraccionamiento evapórativo, entre
otros.
 La posibilidad que estos crudos provengan de una sola roca madre (correlaciones crudo-
crudo).

Para los hidrocarburos almacenados en estos yacimientos del Cretáceo, se desconocen


las razones por las cuales los crudos presentes hoy en día, tienen características y propiedades
particulares, y por tanto, si han existido procesos de alteración del crudo, estos no se conocen.
Adicionalmente, no se tiene certeza de la madurez térmica de los crudos presentes en el
yacimiento, sus rocas madres y cuanto de ello ha sido almacenado en este yacimiento. Se cree
que estos crudos se han originado de la Formación La Luna del Cretáceo, pero esta unidad
geológica ha tenido dos períodos principales de generación de petróleo, uno durante el Eoceno
y otro de edad Mioceno-Plioceno (Talukdar y Marcano, 1994). Todo ello conlleva a
imprecisiones sobre el manejo y explicaciones para el área, que pudieran ser discernidas con el
análisis y consolidación de información reciente y precisa que se pretende desarrollar en este
estudio.

32
CAPÍTULO I

INFORMACION GENERAL

Ubicación Geográfica

La Cuenca Petrolífera del Lago de Maracaibo está ubicada al noroeste de Venezuela (ver
Figura 1). En sentido estricto y restringida a territorio venezolano, se extiende sobre toda el
área ocupada por las aguas del lago y los terrenos planos o suavemente ondulados que la
circundan.

Figura 1. Mapa de ubicación geográfica, de la cuenca del lago de Maracaibo

33
Antecedentes

Muchos autores han propuesto el análisis molecular de los marcadores biológicos como
un instrumento más asertivo en cuanto a la caracterización de los crudos; debido
esencialmente a que en la actualidad se encuentra disponible la herramienta analítica que
posibilita su estudio preciso. Se plantea en el presente trabajo la necesidad de evaluar
compuestos de las familias de los esteranos, terpanos, esteroides aromáticos, fenantrenos,
naftalenos, benzotiofenos entre otros, en muestras de crudos provenientes de pozos Cretáceos
en el área de interés, con el fin de lograr una caracterización precisa de los crudos en términos
de su origen, ambiente depositacional de su roca fuente, nivel de madurez térmica, posibles
alteraciones posteriores a su acumulación en el yacimiento y rutas de llenado del mismo
(migración secundaria), y generar un modelo geoquímico que pueda ser empleado en otros
yacimientos petrolíferos, con miras a su posible utilización en la optimización del modelo
geológico del área y en la detección de nuevos prospectos para su desarrollo futuro
(Leythaeuser y Welte, 1969; Tissot y Welte, 1984; Philp, 1985; Escobar, 1987; Peters y
Moldowan, 1993; entre otros).
Una vez afinadas las características particulares de este sistema petrolífero, a nivel de los
crudos acumulados en yacimientos de edad Cretáceo, se espera poder proponer y definir
mejores prospectos de áreas contentivas de hidrocarburos con posibilidades de desarrollo
comercial, y futuras perforaciones de pozos en los campos, buscando la optimización de los
recursos y mayor grado de certeza en las predicciones de perforación y a su vez mayor éxito en
la producción.
Varios estudios han sido realizados durante el periodo desde los años 1960 hasta el
presente para distinguir los tipos y el origen de los crudos de la Cuenca de Maracaibo. Entre
estos cabe destacar los siguientes:

Brenneman (1960) definió dos tipos de crudos en los campos Costanero Bolívar
basándose en el contenido de n-alcanos y variaciones en la gravedad API. Bond (1967) hizo un
estudio regional y postuló la existencia de tres tipos de crudos precedentes de distintas fuentes
no especificadas.

34
Boesi (1978) presentó para MARAVEN, S.A. el origen de las acumulaciones petrolíferas en
el Eoceno del área del Lago de Maracaibo, basado en la hidrodinámica o penetración del
petróleo a partir de segregación gravitacional de los fluidos, dejando como resultado
acumulaciones de crudo comercial en la zona crestal de las estructuras y una extensa zona de
petróleo residual hacia los flancos de las estructuras. La perenne presencia de una zona de
hidrocarburos residuales alrededor de los yacimientos tiene una tercera explicación, se
considera que el tectonismo ocurrido después de la retención del petróleo causó compresión o
descompresión con pérdida del gas de los fluidos, dejando siempre a su alrededor una aureola
de saturaciones intermedias. Por lo tanto, en caso de que el presente estudio arroje resultados
de propiedades de diversos crudos en el mismo yacimiento, este análisis previo sería un
soporte para la generación de posibles hipótesis y propuestas de próximos estudios
geoquímicos en el área.

Barker et al. (1979) fueron los primeros en reconocer el efecto producido por la actividad
bacteriana y el lavado de aguas (“water washing”) en la composición de los Campos Costaneros
del Distrito Bolívar y clasificaron los crudos, aunque no de manera genética, en cuatro grupos
basados en las variaciones composicionales de los mismos.

Bockmeulen et al. (1983) repiten las conclusiones de Barker et al. (1979) pero además
sugieren en base a consideraciones geológicas que los crudos acumulados en los Campos
Costanero Bolívar fueron derivados principalmente de la gruesa secuencia lutítica del Eoceno,
aunque no descartan que parte de los mismos también puedan haber sido generados por la
Formación la Luna.

Flory et al. (1983) sugieren en base a análisis de las fracciones de hidrocarburos saturados
de los crudos por cromatografía de gases acoplada con espectrometría de masas, y a un
algoritmo de correlación de los esteranos y terpanos (biomarcadores) a nivel molecular, que los
crudos alterados y no alterados del área oriental del Lago tienen un origen común y
posiblemente derivan de la Formación la Luna.

35
Volkmar et al. (1983) realizaron una reconstrucción geoquímica de la generación de
crudos en una cuenca australina a través de biomarcadores, con el fin de caracterizar origen,
madurez, migración y biodegradación, para ello determinó diferentes relaciones en los alcanos
policíclicos, acíclicos, bicíclicos y de bajo peso molecular. La Tabla 1 presenta los principales
parámetros usados para analizar la fracción de alcanos policíclicos.

Tabla 1. Principales parámetros usados para analizar la fracción de alcanos policíclicos en el estudio de Volkman et al. (1983).

Parámetro Uso
C27 (20R)-5α(H),14 α(H),17α(H)-esterano/ C29 (20R)-5α(H),14α(H),17α(H)-esterano a

C27 (20R)-13β(H),17α(H)-diasterano/ C29 (20R)-13β(H),17 α(H)-diasterano a

C29 (20S)-5α(H),14α(H),17α(H)-esterano/ C29 (20R)-5α(H),14α(H),17α(H)-esterano b

C29 (20R)-5α(H),14β(H),17β(H)-esterano/ C29 (20R)-5α(H),14α(H),17α(H)-esterano b, c

C27 (20S)-13β(H),17α(H),-diasterano/ C27 (20R)-13β(H), 17α(H)-diasterano b

C31 (22S)- 17α(H)-homohopano/ (igual + C31 (22R)- 17α(H)-homohopano) x 100 b

C30 17β(H),21α(H)-moretano/ C30 17α(H),21β(H)-hopano b

Ts/Tm b

Ts/C3017α(H)-hopano b

C29 (20R + 20S)-13β(H), 17α(H)-diasteranos/ C29 5α(H)-esterano c

C29 17α(H)-25-norhopano/ C29 17α(H)-30-norhopano d

a: fuente; b: madurez; c: migración; d: biodegradación

Gallango et al. (1984) mostraron en su estudio la evaluación geoquímica regional de la


Cuenca del Lago de Maracaibo, sobre la base del análisis de 650 muestras de roca de núcleo y/o
canal, evaluándose del Cretáceo las rocas de las formaciones Maraca, Lisure y Apón del Grupo
Cogollo, de la Formación la Luna y de las formaciones Capacho y Colón. Del Terciario se
analizaron rocas de la secuencia Eocena y de la Formación la Rosa. También se realizó una serie
de análisis convencionales y especiales sobre 130 muestras de crudos de los diferentes campos
a lo largo de la cuenca y de diagramas de madurez de 81 pozos. El estudio incluyó correlaciones

36
crudo-crudo, clasificándolos en tres tipos genéticos principales: Tipo 1 - crudos marinos; tipo 2
– crudos terrestres; y tipo 3 – mezcla de crudos marinos y terrestres. El ejercicio de realizar
correlaciones crudo-roca madre, permitió a los autores concluir que la Formación La Luna del
Cretáceo, es la roca madre por excelencia de los crudos marinos, aunque no se descartan
pequeñas contribuciones porcentuales de crudo generado por el Miembro Machiques de la
Formación Apón y la Formación Capacho. Para culminar este estudio, se delineó la historia de
generación y migración de hidrocarburos, mediante la reconstrucción de mapas de madurez –
TTI de las varias rocas madres en diferentes tiempos geológicos (Formación la Luna en mayor
grado y formaciones Capacho y Apón en menor grado del Cretáceo) y mapas paleoestructurales
a niveles de rocas madres, sellos y yacimiento. Estos, definen la historia de generación y
migración de los hidrocarburos y además, permiten estimar el volumen total de petróleo y gas
generado, migrado y acumulado proveniente de las diferentes rocas madres, ubicadas tanto
dentro de la cuenca como fuera al suroeste (Campos los Manueles, Las Cruces y West Tarra).
Dentro de los crudos terrestres (cuya roca madre no especificaron) y mezcla de crudo,
únicamente pudieron identificar crudos maduros.

Tabla 2. Parámetros utilizados por Talukdar et al., 1986.

Tipos de crudos encontrados


en la Cuenca de Maracaibo
MARINO NO MARINO
CRUDO TERRESTRES
ALTERADO ALTERADO
Crudos marinos no alterados
AZUFRE (%) 0.5 - 5.2 >1.3 < 0.5
VANADIO
20 – 1100 200 - 500 4
(ppm) Sobre
CRUDO Inmaduro Maduro
maduro
API º 11 – 55 <25 36
AZUFRE
>4 0.7 – 1.3 <0.5
n-ALCANOS Gama completa Ausentes c23 – c35 (%)

PRISTANO/ VANADIO
<1 - >3 >900 20 - 500 <8
FITANO (ppm)

PRISTANO/ API º <16 Variable 37 - 55


<0.5 - > 0.6
n-c17
Saturados
<25 50-70 >70
ABUND. (%)
c29 < c27 c29 c29 > c27
c29 - c27
T*(T+M) -1
<51 >70 Ausentes
T*(T+M) -1 (%)
Variable - 77-100
(%)
TRITERP.
Ausentes Ausentes Presentes
18 α(H)
Saturados/
0.6 - 14 <2.0
Aromáticos

T*(T+M) -1 (%): Relación de esteroides Triaromáticos*(Triaromáticos+Monoaromáticos) -1 Mackenzie et al., 1982

37
Talukdar et al. (1986) realizaron correlaciones crudo-crudo y crudo-roca madre en la
cuenca petrolífera del Lago de Maracaibo, lo cual les permitió diferenciar los tipos de crudos y
concluyeron que la Formación La Luna es la principal generadora de los hidrocarburos
presentes en la cuenca, la Tabla 2 muestra los parámetros utilizados para llegar a esta
conclusión. Adicionalmente, usando diferentes marcadores biológicos presentaron resultados
acerca de la madurez y alteración de los crudos.

Cassani et al. (1988a) realizaron una recopilación de todos los datos geoquímicos
disponibles para las principales cuencas petrolíferas de Venezuela en donde se usaron los
biomarcadores para correlacionar crudos a nivel regional con el establecimiento de variables
importantes del punto de vista geoquímico como lo son su origen, madurez térmica y posible
grado de biodegradación. A partir de estos análisis se determinó que los crudos venezolanos de
origen marinos poseen las siguientes características:
 Abundantes n-alcanos en el intervalo C20-C24.
 Relación pristano/fitano cercana a la unidad.
 Pristano/nC17 menores de 0.5.
 Abundancia relativa de terpanos tricíclicos.
 Relación hopanos/esteranos menor de 3, típicamente entre 2 y 3.
 Distribución de esteranos regulares  C27, C28 y C29 con un predominio de los
componentes C27 sobre los C28 y C29 y una ligera baja concentración relativa de los
componentes C28.
 Ausencia generalizada del compuesto 18α(H) oleanano
 Abundancia de esteroides aromáticos y petroporfirinas, siendo las de vanadio las más
predominantes.

Por otro lado, los crudos terrestres en Venezuela se encuentran principalmente en la


Cuenca Oriental de Venezuela y en cantidades menores en el suroeste de Cuenca de
Maracaibo. Se caracterizan por poseer:
 Abundantes n-alcanos en el intervalo C23-C35.
 Alta relación pristano/fitano (mayor de 3).

38
 Pristano/nC17 mayor de 0.6.
 Ausencia o baja concentración de terpanos tricíclicos.
 Relación hopanos/esteranos mayor de 4, típicamente entre 2 y 3.
 Alta concentración de esteranos regulares  C29 comparado con los C27, C28 con
ligeros cambios en la concentración de C27 o C29 dependiendo del tipo de materia
orgánica.
 Presencia del compuesto 18(H) oleanano.

El grado de madurez de los crudos pudo estimarse utilizando el índice de


metilfenantreno y la tendencia que se observa al graficar relación C 23/C21 versus C23/C24 en los
terpanos tricíclicos. Los efectos de la biodegradación se observaron de acuerdo a las
concentraciones de n-alcanos y a la presencia o no de hopanos desmetilados. (Cassani et al.,
1988a)

Cassani et al. (1988b) estudiaron muestras de crudo y roca de la Formación la Luna en la


Cuenca de Maracaibo, incluyendo una muestra del Campo Alturitas, y señalan algunas
limitaciones de los parámetros moleculares como indicadores de madurez, tal es el caso de
% y %20S ya que se cree que para esta formación ya se había alcanzado el equilibrio térmico
en el máximo de la ventana del petróleo. Adicionalmente, señalan que el indice de
metilfenantreno no responde a la madurez de las muestras analizadas sino a su contenido de
minerales carbonáticos, mientras que el incremento relativo de la concentración del isomero 3-
y 2- con respecto al 9- y 1-metilfenantreno se acentúa al aumentar la madurez. En este estudio
también se evaluó el potencial de los terpanos tricíclicos como indicadores de madurez
propuesto por Ekweozor y Strausz (1983 en Cassani, 1988b) y utilizado por Cassani (1985 en
Cassani, 1988b) en la Cuenca Oriental de Venezuela, los cuales corresponden a las relaciones
C23/C21 y C23/C24 respectivamente, arrojando un cotejo satisfactorio que es interpretado como
generación preferencial de C21 y C24 a partir de la funcionalización de su precursor durante la
diagénesis.
En un trabajo similar en esta misma área, Gallango y Cassani (1992) observaron que
para muestras muy maduras, existe una destruccion preferencial del esterano C 29 en relacion a
C27 y C28 al tiempo que se incrementa la concentracion de los esteranos regulares C21 y C22.

39
Parnaud et al. (1994) realizaron el modelaje geoquímico de las cuencas occidentales de
Venezuela, Barinas y Maracaibo. En este, los autores trabajan sobre la base de una extensión de
unos 100.000 Km2, entre ambas cuencas, logran definir tres rocas madres; la primera
perteneciente a las secuencias de la Formaciones La Luna-Capacho-Navay, con un valor
promedio de COT de 4% (petrográficamente, poseen mas del 88% de kerógeno amorfo),
responsable de la mayor parte de los crudos marinos encontrados en el área, con potencial
petrolífero muy elevado de 20 mgHC/g roca en promedio. Una roca fuente secundaria
representada por las lutitas carbonosas y los carbones de la Formación Carbonera,
posiblemente responsables de la generación de menes y crudos que presentan aportes
importantes de materia orgánica de origen continental, mostrando valores altos de índice de
hidrogeno (700-800 mg HC/g COT), asociados a la exinita, maceral rico en hidrogeno del cual se
puede generar hidrocarburos líquidos. Finalmente una tercera roca madre de las secuencias de
la Formación Marcelina y del Grupo Orocué, que pudiera ser considerada roca madre accesoria,
el promedio útil no supera los 50 pies, con un COT de 30% en promedio. Igualmente, se
identificó en la secuencia de la Formación Apón del Cretácico, una roca madre que corresponde
al Miembro Machiques. Este Miembro presenta niveles muy ricos en materia orgánica de
origen marino. Sin embargo, su limitada extensión geográfica permite descartarla como roca
madre principal.
De las correlaciones entre crudos y rocas madres, Parnaud et al. (1994) concluyeron: Que
los crudos acumulados en los diferentes yacimientos (Cretácico, Eoceno, Oligoceno y Mioceno)
en las cuencas bajo estudio, son todos de origen marino (exceptuando algunos del área Sur-
Suroeste de la Cuenca del Lago de Maracaibo), y están genéticamente relacionados con rocas
madres de las secuencias del Cretácico Tardío. Los únicos crudos y menes de origen continental
están localizados en el Flanco Norandino y en la parte Sur Occídental de la Cuenca del Lago de
Maracaibo. Estos podrían haber sido generados por rocas madre del Eoceno Tardío - Oligoceno
y del Paleoceno, cuya materia orgánica es fundamentalmente de tipo continental. Los crudos
de Apure son de baja madurez, los de Barinas son maduros, mientras que los de Maracaibo
cubren todo el intervalo de madurez, es decir desde poco maduros hasta muy maduros. La
mezcla de crudos, con diferentes niveles de madurez y biodegradación observadas en la Cuenca
del Lago de Maracaibo se debe a procesos de generación-migración, estrechamente
relacionados con la evolución geológica de la cuenca. Las diferencias encontradas entre los

40
crudos de Apure, Barinas y Maracaibo se deben básicamente a efectos de madurez, procesos
de biodegradación y a las condiciones físico-químicas que prevalecieron durante la
sedimentación de las rocas madre que los generaron.

López et al. (1998) Interpretaron biodegradación en algunos crudos de la Cuenca de


Barinas de acuerdo a la presencia de 25-norhopano en algunas muestras mientras que otras
cuyo origen es el mismo no contienen tal biomarcador. Adicionalmente, toman en cuenta el
decrecimiento de la gravedad API y la relación de hidrocarburos saturados/aromáticos, el
aumento en el contenido de azufre, metales, asfaltenos y dia-/regular esteranos, así como la
reducción relativa de los alcanos C9-C14 y la relación n-alcanos a isoprenoides. Para la
interpretación de condiciones paleoambientales de sedimentación de la roca se utilizó la
distribución de n-alcanos C9-C40 (unimodal para ambientes marinos). La presencia de 18(H)-
oleanano sirvió como indicador de ambiente terrestre y de edad para muestras especificas. La
existencia de materia orgánica marina se complementó con las siguientes evidencias:
 Abundancia relativa de terpanos tricíclicos con máximo en C23
 Presencia de C30-hopano
 Abundancia relativa de esterano regular C27 con respecto al C29
 Índice de oleanano. 18(H)-oleanano/C30-hopano.

La interpretación de las condiciones Redox se realizó sobre la base de la relación


pristano/fitano. Por otra parte, la relación saturados/aromáticos sirvió de indicador de litofacies
de la roca madre, tomando en cuenta que este parámetro suele ser mayor en crudos generados
por rocas madre siliciclásticas comparadas con los generados por rocas ricas en carbonatos
(Hughes, 1984; Peters y Moldowan, 1993) aunque puede ser afectada por biodegradación. Otra
evidencia sobre litología de la roca madre se obtuvo de la distribución de los isómeros del
dibenzotiofeno (DBT) (Hughes, 1984); así mismo, el gráfico Dibenzotiofeno/Fenantreno vs.
pristano/fitano proporciona información adicional del tipo de roca madre.
Los parámetros utilizados para determinar el grado de madurez de los crudos incluyeron
el Índice Preferencial de Carbono (IPC) y la relación Fenantreno /Metilfenantreno (Radke et al.,
1986), así como el decrecimiento de la relación C30-moretano/C30-hopano que indica un

41
aumento de la madurez (Peters y Moldowan, 1993). El grado de madurez así establecido fue
Ts
soportado por las relaciones de los isómeros C29 esteranos y la relación .
Ts  Tm

Silliman et al. (2002) estudiaron la composición geoquímica de crudos de 34 campos


petrolíferos en Wyoming. Los autores utilizaron la relaciones pristano/fitano, 30-
C 21  C 22
hopano/hopano, terpanos tricíclicos C23/hopano y la relación de esteranos , así
C 27  C 28  C 29

como la abundancia de gammaceranos en las fracciones de hidrocarburos saturados para


correlacionar crudos entre si.
Ts
Adicionalmente de la relación diasterano C29/esteranos regulares versus
Ts  Tm
permitió diferenciar muestras provenientes de diferentes roca madre, considerando que
cocientes altos de la relación diasterano C29/esterano puede indicar valores más altos de la
relación arcilla/materia orgánica debido al rearreglo preferencial de esteranos o indicativo de
oxidación extensiva de la materia orgánica durante la diagénesis temprana.

Bakr y Wilkes (2002), analizaron 27 muestras de crudo cuyo intervalo de madurez era
Ts
bastante limitado (0,86-0,98 Ro), y observaron poca correlación de la relación con Rc
Ts  Tm
infiriendo así la influencia de otros factores, tales como la facies por la presencia de minerales
que catalizan el rearreglo estructural de Tm y Ts o incluso por la presencia de carbonatos.
Ts
Además observaron proporcionalidad directa entre y la abundancia relativa de C27
Ts  Tm
diasteranos así como la relación Pristano/Fitano, por lo que concluyeron que para esta área
esta relación es un indicativo de las características de la roca madre más que de la madurez.

Gallango et al. (2002) en otro estudio, propusieron en su trabajo realizado a través de


estudios sísmicos, estructurales y geoquímicos en el cinturón plegado de La Sierra de Perijá al
oeste de la Cuenca del Lago de Maracaibo, que hay evidencia de trampas estructurales que
fueron llenadas en dos eventos migratorios de crudos. Por lo menos cuatro grandes eventos de
deformación se identificaron en el área desde el Cretáceo Tardío hasta el Holoceno, estos son

42
alternados entre compresivos y distensivos. Concluyeron que la acumulación de crudo en
diferentes trampas estructurales se realizó en dos momentos geológicos distintos, y se presume
que estos hidrocarburos han sido expulsados de la Formación La Luna (Cretáceo), según análisis
fisicoquímicos realizados al petróleo.
Basados en correlaciones crudo – crudo y crudo – roca madre, y un modelo teórico
unidimensional de geoquímica, fundamentado en el Índice Tiempo-Temperatura de Lopatin
(TTI), Gallango et al. (2002) propusieron dos fases para la generación y migración del petróleo,
a partir de sus rocas madres, como responsables de la acumulación de los hidrocarburos
presentes en el cinturón plegado de Perijá central. Concluyeron que los crudos encontrados en
los pozos del área y los menes en superficie, han sido generados de la Formación La Luna.

Azuaje (2006) realizó un estudio sobre un conjunto de muestras de crudos del yacimiento
Marcelina Superior-Inferior de edad Paleoceno del campo Alturitas, ubicado a 30 Km al sur de
la población de Machiques, en la zona de Perijá, Estado Zulia. Utilizando los biomarcadores
como una herramienta para la caracterización de los crudos, evaluó el uso de estos compuestos
para complementar el modelo geoquímico propuesto para este yacimiento. Realizó análisis
SARA sobre cada una de las muestras de crudo disponibles, y las fracciones de hidrocarburos
saturados y aromáticos, fueron evaluadas a través de Cromatografía de Gases acoplada a la
Espectrometría de Masas. Posteriormente, se cuantificaron de manera relativa los
biomarcadores presentes en el crudo y estudiando mediante la técnica del análisis estadístico
multivariable. Permitiéndole concluir que todos los crudos provienen de la misma roca madre
madura depositada en un ambiente marino carbonático. Lo que coincide con lo interpretado
por Cassani et al. (1988) para crudos de esta zona de la Cuenca del Lago de Maracaibo y por
Talukdar (1985) para la Formación La Luna en el área. Finalmente, concluye que estos crudos
provienen de un mismo pulso de generación y no han estado sometidas a procesos de
biodegradación.

Inciarte (2008) utilizó la técnica analítica de Cromatografía de Gases-Espectrometría de


Masas que le permitió identificar hopanos, esteranos, n-parafinas, isoprenoides acíclicos y
esteroides aromáticos, en 11 muestras de menes recolectados en el sector Cachirí, Hoja
Geológica Tulé, del Estado Zulia. Obteniendo que la madurez térmica del petróleo y el ambiente

43
depositacional de la roca generadora, concuerdan con los alcanzados por otros estudios
realizados sobre la Cuenca del Lago de Maracaibo donde se establece a las calizas y lutitas
calcáreas de la Formación La Luna del Cretáceo como la roca madre de los menes analizados,
depositada en condiciones anóxicas. Logró establecer que estas muestras han sufrido
biodegradación a niveles contrastantes (pérdida parcial de n-parafinas –nivel 2 de Peters y
Moldowan (1993)– con ataque bacterial simultáneo sobre esteranos y hopanos –nivel 6–). Le
permitió postular la posibilidad de un gradiente geotérmico anómalo, que haya podido
madurar térmicamente crudo pesado somero previamente biodegradado, o más
probablemente, dilución de crudo pesado previamente alterado por fluido liviano migrado
recientemente, alcanzando esta mezcla la superficie en forma de mene.

PDVSA (2009), analizó e interpretó las características geoquímicas de muestras de crudo y


agua de formación, producidos en los pozos cretácicos pertenecientes al Bloque VIII y Centro
Lago; así como los pozos del Bloque I de la U.E. Lagomar. Los resultados obtenidos, permitieron
establecer distintos tipos o familias de crudos entre las unidades de explotación. Así mismo, los
autores caracterizaron las aguas de formación asociadas a los crudos de Centro Lago y Bloque
VIII respectivamente. Se discriminaron en tres grupos o familias de crudos en los pozos
muestreados en los Bloques VIII, mientras que en la U.E. Lagomar se discriminaron dos familias
de crudos. Los análisis efectuados sobre las aguas de formación permitieron clasificar todas las
muestras como aguas connatas del tipo cloruro-sodio.

Justificación y Delimitación de la investigación.

Una vez definido este sistema petrolífero, poder proponer y definir mejores prospectos
de áreas contentivas de hidrocarburos con posibilidades de desarrollo comercial, y futuras
perforaciones de pozos en los campos, buscando la optimización de los recursos y mayor grado
de certeza en las predicciones de perforación y a su vez mayor éxito en la producción.
Para llevar esto a cabo, en este trabajo se realizaron una serie de análisis geoquímicos
sobre cada una de las muestras de crudo disponibles y las fracciones de hidrocarburos
saturados y aromáticos fueron evaluadas a través de la técnica analítica de la Cromatografía de
Gases acoplada a la Espectrometría de Masas.

44
Objetivos de la Investigación

1.4.1. Objetivo General

Realizar el estudio geoquímico de los crudos de los yacimientos Cretácicos, tanto de


modo general en muestras de toda la cuenca, revisando variaciones de ciertos parámetros a lo
largo de la cuenca, como más específicamente en los Campos del Bloque I y Bloque VIII del Lago
de Maracaibo, utilizando tanto los biomarcadores, como la fracción liviana (C15 -) del crudo.

1.4.2. Objetivos Específicos

Para Realizar el estudio geoquímico de los crudos de los yacimientos Cretácicos, en los
Campos del Bloque I y Bloque VIII del Lago de Maracaibo, utilizando tanto los biomarcadores,
como la fracción liviana (C15-) del crudo, se desarrollaran los siguientes objetivos específicos:
 Identificar mediante la técnica de cromatografía de gases y espectrometría de masas
(GC-MS) los biomarcadores presentes en las fracciones de hidrocarburos saturados y
aromáticos de los crudos. Con ello, definir el origen genético, y determinar tipo de
kerogeno y naturaleza de la roca madre de los crudos.
 Diferenciar posibles variaciones en cuanto al paleoambiente depositacional de la roca
madre y hacer las comparaciones con las reportadas en la literatura y estudios
anteriores.
 Caracterizar el crudo utilizando principalmente las fracciones livianas de hidrocarburos
saturados denominada C15-. Hacer uso de la susceptibilidad de la misma frente a los
procesos de post-acumulación tales como: biodegradación, fraccionamiento
evaporativo, lavado por aguas o dismigración, para revisar la posibilidad de que alguno
de estos procesos haya podido alterar las características originales de estos crudos en su
yacimiento.
 Establecer parámetros de correlaciones crudo-crudo, utilizando biomarcadores, que
indiquen la existencia o no de rocas madres comunes dentro del yacimiento.

45
CAPÍTULO II

MARCO GEOLÓGICO

Cuenca Petrolífera del Lago de Maracaibo

La Cuenca Petrolífera del Lago de Maracaibo está ubicada al noroeste de Venezuela. En


sentido estricto y restringida a territorio venezolano, se extiende sobre toda el área ocupada
por las aguas del lago y los terrenos planos o suavemente ondulados que la circundan y que de
modo general, pueden delimitarse como sigue: al oeste-noreste por el piedemonte de la Sierra
de Perijá, al oeste-suroeste por la frontera colombiana hasta un punto sobre el río Guarumito,
12,5 Km. Al oeste de la población de La Fría ; al sureste por el piedemonte andino desde el
punto mencionado hacia el río Motatán, ligeramente al este del cruce de Agua Viva; al este-
noreste por la zona de piedemonte occidental de la Serranía de Trujillo y una línea imaginaria
dirigida al norte hasta encontrar la frontera de los estados Zulia y Falcón, donde puede
observarse un pequeño saliente hacia el este en la región de Quiros y en su parte norte, por la
línea geológica de la falla de Oca (Figura 1). La extensión de este trapezoide, de
aproximadamente 50.000 Km2, corresponde políticamente en su mayor parte al Estado Zulia y
extensiones menores a los estados Táchira, Mérida y Trujillo. Las líneas mencionadas
anteriormente son bastante arbitrarias en sentido fisiográfico y geológico, pero corresponden
en realidad al carácter geo-económico de la cuenca petrolífera como tal. Geográficamente, está
incluida en su totalidad dentro de la cuenca hidrográfica del Lago de Maracaibo (Brenneman,
1960; Talukdar et al., 1985).
La roca madre por excelencia en la zona es la Formación La Luna, de edad Cretáceo
Tardío, cuyas facies se extendieron por toda Venezuela Occidental hasta Colombia. Sin
embargo, se han encontrado rocas madre de importancia secundaria en los Grupos Cogollo
(Miembro Machiques de la Formación Apón) y Orocué (Formación Los Cuervos). El petróleo fue
generado, migrado y acumulado en diversos pulsos, siendo el más importante el ocurrido
durante el levantamiento andino. Las principales rocas yacimiento clásticas son las Formaciones

46
Río Negro y Aguardiente (Cretáceo), Grupo Orocué y la Formación Marcelina (Paleoceno),
Mirador-Misoa (Eoceno), Lagunillas y La Rosa (Mioceno) (Talukdar et al., 1985).
Las calizas (fracturadas) del Grupo Cogollo (Cretáceo Temprano) constituyen los
yacimientos carbonáticos más relevantes, mientras que los sellos regionales más importantes
son las Formaciones Colón (Cretáceo Tardío) y Paují (Eoceno). Localmente, constituyen sellos
importantes el Miembro Machiques (Formación Apón) y las lutitas espesas dentro de las
Formaciones ubicadas hacia el centro del Lago de Maracaibo, como Misoa, Lagunillas y La Rosa,
e incluso secuencias cercanas a los frentes de deformación, como la Formación León y los
Grupos Guayabo (Andes) y El Fausto (Perijá) (WEC, 1997).
La columna estratigráfica de la Cuenca del Lago de Maracaibo está integrada desde el
Basamento Paleozoico ígneo-metamórfico hasta la Formación El Milagro de edad Pleistoceno,
tal como se representa a continuación (Figura 2).

Tipo de Petróleo
IA
MB

N Marino Alterado
LO
CO

Marino Inmaduro

Marino Maduro

Marino Muy Maduro

Terrestre Maduro

Mixto Marino-Terrestre
LAGO DE
MARACAIBO

Edad del Yacimiento

Mioceno Paleoceno
Eoceno Cretácico

Figura 3. Distribución y tipos de crudos presentes en la cuenca del Lago de Maracaibo (Tomado de Gallango et al., 1985)

Los principales campos petroleros se encuentran en la costa oriental del Lago de


Maracaibo, los que producen principalmente de yacimientos terciarios, como por ejemplo:

47
Cabimas, Tía Juana, Lagunillas, Bachaquero, Mene Grande y Motatán. En la costa oeste se
encuentran campos con producción importante en el Cretácico, además del Terciario; entre los
que se encuentran el campo de Urdaneta (Lago de Maracaibo) y los del Flanco Perijanero, que
son, de norte a sur: La Concepción, Mara, La Paz, Boscán y Alturitas. En el centro, los campos se
ubican a lo largo de la estructura del sistema de fallas de Lama-Icotea; entre ellos se cuentan:
Lago, Centro, Lama y Lamar.
Los crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo se encuentran acumulados en yacimientos
de diferentes edades: Cretáceo, Paleoceno, Eoceno y Mioceno; presentan diferentes grados de
madurez y de alteración (Gallango et al., 1985) (Figura 3). En general, los crudos más livianos
ocurren en yacimientos cretácicos profundos y se van haciendo más pesados a medida que se
acercan a los yacimientos terciarios más someros.

Figura 4. Columna estratigráfica generalizada de la cuenca del lago de Maracaibo, Fuente Archivos PDVSA 2009.

48
Evolución Geológica de la Cuenca del Lago de Maracaibo

Los terrenos que constituyen el Basamento Pre-Cámbrico de la Cuenca del Lago de


Maracaibo son alóctonos adosados a la Placa Suramericana durante el Paleozoico Temprano
(Orogénesis Caledoniana: 570- 385 M.a.); posteriormente ocurrió la sutura del alóctono al
Paleozoico Superior, durante la Orogénesis Herciniana (385-245 Ma); dicho alóctono incluyó
terrenos precámbricos, entre los cuales sólo se ha determinado la edad de las rocas graníticas
de la Sierra Nevada de Santa Marta (Colombia). La última colisión tuvo su inicio a finales del
Mesozoico (Cretáceo) (González de Juana et al., 1980).

Figura 5. Corte estructural NO-SE a través de la Cuenca de Maracaibo, desde los andes merideños hasta la Serranía de Perijá
(Tomado de WEC, 1997)

La Figura 6 muestra la distribución de los terrenos alóctonos que se soldaron al autóctono


del Paleozoico Inferior, durante el período Ordovícico - Silúrico. Aquellos donde hay rocas
paleozoicas y que se adosaron en el Paleozoico Inferior, se reconocen ahora como parte del
basamento de los terrenos incorporados durante la historia tectónica del Caribe, como el
constituyente del cinturón orogénico del Paleozoico Inferior al norte de la Falla de Apure y
como parte del basamento de los Andes y de la cuenca del Lago de Maracaibo. En el subsuelo
del Lago de Maracaibo este terreno está representado por rocas metasedimentarias
ordovícicas, que también afloran en los Andes. Los terrenos alóctonos de edad devónica, que se
adosaron a Suramérica en el Paleozoico Superior, están ahora aflorando en la Sierra de Perijá.
Como parte de la historia de la acreción del alóctono del Paleozoico Superior contra el Inferior

49
(previamente suturado), se reconocen rocas graníticas producto de la subducción por debajo
del borde norte de la Placa Suramericana (WEC, 1997).
En Venezuela, la rotura o “rifting” de Pangea (super-continente que reunía las masas
continentales de América, Europa y África actuales) produjo varias estructuras importantes que
posteriormente influyeron en la evolución de las cuencas sedimentarias venezolanas. Dentro de
Venezuela Continental, la apertura del Proto-Caribe indujo el desarrollo de valles de extensión
o grábenes con una tendencia noreste, en los que se incluyen los grábenes de Apure-Mantecal
y Espino, así como también los grábenes de los Andes y Perijá, y el ubicado en el Lago de
Maracaibo (WEC, 1997).

Figura 6. Mapa de distribución de terrenos alóctonos en el Norte de Suramérica. (Tomado de WEC, 1997)

Todos estos grábenes fueron rellenados durante el Jurásico por sedimentos continentales
tipo ¨capas rojas¨, volcánicas de diversa índole y eventualmente clásticos y calizas de invasiones
marinas, siendo evidencia de ello, la Formación La Quinta.
Espesas secuencias volcánico-clásticas continentales de la formación la Quinta, se
depositaron en un sistema de “grabens y semi-grabens” orientados en dirección NNE-SSO. Estas

50
estructuras distensivas que actualmente se encuentran invertidas, se desarrollaron
principalmente en la región de la Sierra de Perijá y en la porción meridional de los Andes de
Mérida (Surcos de Machiques y de Uribante). Las rocas continentales de la Formación la Quinta
representan los sedimentos sintectónicos asociados a la apertura del margen occidental de la
cuenca jurásica del Tethys.
La transgresión marina cretácica que se inició con las areniscas de la Formación Rio Negro
marca el comienzo de un largo periodo de subsidencia y relajación termal de borde
septentrional de la Placa Suramericana. Durante este tiempo, en el occidente de Venezuela se
desarrolla una cuenca marginal que se comunica al oeste con una cuenca posterior a un arco
volcánico (“back-arc basin”), mientras que en el Norte y noreste predominan condiciones de
margen pasivo. Durante este tiempo se depositaron sedimentos ricos en materia orgánica bajo
condiciones euxinicas (Formación la Luna). Ningún evento importante de deformación perturbó
las unidades cretácicas durante su sedimentación. Durante el Maestrichtiense-Paleoceno
Temprano, se evidenciaron los primeros efectos de una deformación compresiva al Oeste de la
actual Sierra de Perijá. Simultáneamente se inicia el levantamiento del Arco de Mérida, que va a
permanecer como zona positiva hasta el Eoceno Medio en la Cuenca de Barinas Apure (WEC,
1997).
Durante el Cretácico Temprano, la sedimentación fue controlada en su inicio por el
sistema de fallas de los grábenes jurásicos, a continuación, la subsidencia se estabilizó y el
Grupo Cogollo (carbonático) se depositó en un extenso mar epicontinental transgresivo sobre
Venezuela Occidental (WEC, 1997).
En la Figura 6 se indica conceptualmente la distribución de paleoambientes y unidades
estratigráficas principales durante el Cretáceo Tardío en el norte de la Placa Suramericana. A
partir del final del Albiense, se inicia desde el este de Venezuela y de manera diacrónica hacia el
oeste, la invasión marina que llegó a cubrir extensas zonas hacia el sur del país, las cuales se
mantenían como áreas expuestas a la erosión desde finales del Jurásico o incluso desde finales
del Paleozoico. Esta invasión marina coincide con el pulso mundial transgresivo del Cretáceo
Tardío, responsable de la sedimentación de calizas, lutitas y ftanitas ricas en materia orgánica
tanto en América como en Europa. Estas rocas se conocen en Venezuela como las Formaciones
Querecual-San Antonio (Grupo Guayuta), Mucaria, Navay y La Luna (WEC, 1997).

51
1..1.1 Formación Río Negro [Cretácico (Barremiense)]

Durante el Barremiense, los surcos de Machiques, Uribante y Barquisimeto en Venezuela


Occidental, se rellenaron con una secuencia sedimentaria de ambiente predominantemente
fluvial, conocida como Formación Río Negro.
Su característica litológica más distintiva en el Surco de Machiques, es la presencia de
areniscas arcósicas y arcosas, asperones, conglomerados y espesores menores de arcillitas y
limolítas de colores brillantes. Esta formación se caracteriza, unas veces por sedimentos de
origen fluvial con areniscas conglomeráticas y otras por arcosas de grano grueso con
acanaladuras y lentes de conglomerados, frecuentemente con estratificación cruzada e
intercalaciones de lutitas (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).
La Formación Río Negro, es fundamentalmente una sedimentación de relleno de surcos;
sin embargo, al progresar la transgresión sobre áreas positivas como la Plataforma de
Maracaibo y el flanco noroeste del Alto de Mérida, se produce un rápido acuñamiento contra
los bordes de las estructuras antes mencionadas. En los pozos perforados en el Lago de
Maracaibo sólo se encuentran escasos metros de un conglomerado basal que está en contacto
discordante sobre rocas pre-Cretácicas (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).
Con excepción de algunos restos de plantas, no se han encontrado fósiles en el área tipo
de esta formación, cuyo contacto es transicional con la Formación Apón suprayacente (Figura
7).

1..1.2 Formación Apón Cretácico (Aptiense - Albiense)

La Formación Apón, se compone de una caliza gris azulosa, dura, densa, en capas gruesas,
generalmente fosilífera, con intervalos menores de lutitas que varían de calcáreas a arenosas.
Un intervalo de lutitas calcáreas negras y calizas laminares delgadas sirvió para efectuar la
subdivisión de esta formación en tres miembros, designados en forma ascendente como Tibú,
Machiques y Piché, concordantes entre sí. El comienzo de una sedimentación transgresiva, está
representado por el Miembro Tibú, que se caracteriza por calizas bioclásticas de aguas llanas,
cuya edad está comprendida entre el Aptiense Inferior a Medio. A finales del Aptiense, se
produce la sedimentación de extensos y relativamente delgados horizontes de lutitas

52
dolomíticas muy persistentes y de carácter regional, que ha sido denominado Miembro
Guáimaros, con localidad tipo en el flanco occidental de Los Andes de Mérida (Infome Proyecto
Cretáceo PDVSA., 2009)

Figura 7. Relación estratigráfica entre las formaciones Río Negro, Apón, Lisure y Maraca, estas tres ultimas pertenecientes al
Grupo Cogollo (Tomado: Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).

Casi simultáneamente, una notable subsidencia en la parte central del Surco de


Machiques, produce una sedimentación de tipo peculiar, caracterizada por la presencia de
lutitas calcáreas, calizas laminares oscuras, frecuentemente bituminosas, con concreciones
elipsoidales de caliza densa que contienen amonites, pelecípodos y restos de peces, este
intervalo se denomina Miembro Machiques, el cual está restringido estrictamente al Surco de
Machiques y representa un período de sedimentación alternante euxínica y de aguas
oxigenadas, presentando características de buenas rocas madres de hidrocarburos. A
comienzos del Albiense, la Depresión de Machiques, vuelve nuevamente a la circulación
normal; en la Plataforma de Maracaibo y Surco de Machiques, se reanuda la sedimentación de
calizas bioclásticas de aguas oxigenadas denominadas Miembro Piché, de edad Albiense Inferior
(Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).
La edad de la Formación Apón, se ha determinado basándose en la presencia de
numerosos fósiles, como amonites, moluscos y foraminíferos característicos del Aptiense –
Albiense. Esta formación se presenta en contacto concordante con la Formación Lisure,
suprayacente y la Formación Río Negro infrayacente (Figura 8).

53
1..1.3 Formación Lisure Cretácico (Albiense Medio)

En el Surco de Machiques, una ligera subsidencia durante el Albiense Medio produjo una
sedimentación característica de areniscas glauconíticas, areniscas laminares, intercalaciones de
calizas glauconíticas, arenosas y coquinoides y algunas lutitas correspondientes a la Formación
Lisure. Esta formación, ha sido extendida al subsuelo de la Plataforma de Maracaibo, pero más
hacia el norte, aumenta su contenido de rocas carbonáticas y se incluye en el Grupo Cogollo sin
diferenciar; mientras que hacia el sur, Lisure grada a la Formación Aguardiente con la cual es
equivalente lateral parcial. En el subsuelo del Lago de Maracaibo, la Formación Lisure presenta
un espesor promedio de 120 metros. Entre los fósiles de esta formación ubican a la unidad en
el Albiense Medio a Superior, suprayacente a la Formación Apón, e infrayacente a la Formación
Maraca (Figura 6) (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).

1..1.4 Formación Maraca Cretácico (Albiense Superior)

Durante el Albiense Tardío, las condiciones de sedimentación se igualaron de manera


notable y un delgado y extenso intervalo de caliza fosilífera, Formación Maraca, se sedimentó
sobre la Plataforma de Maracaibo y Los Andes Venezolanos. En el subsuelo del Lago de
Maracaibo, esta formación promedia 14 metros de espesor y se caracteriza por calcarenitas
bioclásticas fosilíferas. El contacto entre la Formación Maraca y la Formación La Luna
suprayacente, sugiere un violento cambio de ambiente, aunque las relaciones de campo entre
ambas parecen ser concordantes y hasta transicionales; este contacto representa un cambio
litológico contrastante que coloca a las calizas con ostras, de ambiente nerítico muy cercano a
la costa de la Formación Maraca, con calizas negras y densas con faunas de amonites y lutitas
negras marinas de ambientes euxínicos de la Formación La Luna, postulándose una
profundización de los mares, en un evento contemporáneo con la base transgresiva del
Cretácico Medio – Superior (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).

54
1..1.5 Formación La Luna Cretácico (Cenomaniense - Campaniense)

La Formación La Luna, constituye la unidad litoestratigráfica más característica del


Cretácico de Venezuela Occidental. Consiste típicamente en calizas laminadas densas de color
gris oscuro a negro, carbonáceas a bituminosas, arcillas, calcáreas o no, de color negro; como
carácter notorio, la formación presenta concreciones elipsoidales y discoidales de caliza negra
dura, y es bastante común la presencia de ftanita negra.

Figura 8. Relación estratigráfica entre las formaciones La Luna, Colon (Miembro Socuy) y Mito Juan (Tomado Infome Proyecto
Cretáceo PDVSA., 2009).

La Formación La Luna, se sedimentó en un ambiente marino, bajo condiciones de fondo


euxínicas que inhibieron la vida bentónica; en este ambiente reductor, se preservó materia
orgánica y se formó pirita durante las fases diagenéticas. Debido a su alto contenido de materia
orgánica, la Formación La Luna, fue por excelencia la principal generadora de hidrocarburos en

55
la Cuenca del Lago de Maracaibo, donde se han encontrado espesores de hasta 81 metros.
Dentro de esta formación se reconoce el Miembro Tres Esquinas que consiste de areniscas
glauconíticas, calcáreas y fosilíferas de color gris verdoso (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA.,
2009).

1..1.6 Formación Colón Cretácico (Campaniense-Maestrichtiense)

La Formación Colón, se caracteriza por lutitas microfosilíferas gris oscuro a negras,


macizas, piríticas y ocasionalmente micáceas o glauconíticas, con margas y capas de caliza
subordinada.
Las lutitas son más arenosas hacia la parte superior, donde la unidad pasa
transicionalmente a la Formación Mito Juan (Figura 6). El contacto entre estas dos formaciones
es difícil de reconocer por ser gradacional con intervalos lutíticos que poco a poco se hacen más
arenosos. El ambiente de sedimentación de la Formación Colón, se considera como marino
abierto con buena circulación de masas de agua y desarrollo favorable de microfaunas
bentónicas y planctónicas. Dentro de esta formación se reconoce el Miembro Socuy (Figura 8),
que está constituido por calizas que forman la base de la Formación Colón en Perijá y subsuelo
de áreas vecinas, constituyendo un horizonte de carácter regional en la parte septentrional de
la Cuenca de Maracaibo (Infome Proyecto Cretáceo PDVSA., 2009).

1..1.7 Formación Mito Juan Cretáceo (Maestrichtiense Superior)

La Formación Mito Juan, se caracteriza litológicamente por las arcillas grises, gris -
verdosas y negras, localmente arenosas, en las cuales el contenido de limo y arena aumenta en
sentido ascendente y en cuya parte superior se encuentran a veces capas delgadas de calizas y
areniscas.
Esta formación, representa una facies de aguas marinas poco profundas con intervalos
salobres; que es uno de los criterios de diferenciación con la Formación Colón infrayacente
(Figura 8), además de la presencia de arenas, es el marcado cambio de las faunas de los
foraminíferos en comparación con los de Colón (Sutton, 1946).

56
Hacia finales del Cretáceo y comienzos del Paleoceno, Venezuela Occidental sufrió
finalmente el efecto de la colisión entre la Placa de Nazca (Océano Pacífico) y el Occidente
Colombiano; existen evidencias de que la sedimentación del Grupo Orocué (y posiblemente las
Formaciones Guasare y Marcelina) estuviesen controladas por los frentes de deformación de la
citada colisión; éstos generaron sucesivos depocentros de edades cada vez más jóvenes hacia el
este de lo que hoy en día es la Sierra de Perijá. Al norte y oeste de la Cuenca del Lago de
Maracaibo al inicio del Paleoceno, la Formación Guasare en cambio, representa ambientes más
someros y que reflejan una mayor lejanía de los frentes de deformación, previamente a la
instalación de los ambientes paludales costeros de la Formación Marcelina (WEC, 1997).

Figura 9. Mapa de distribución de facies sedimentarias dominantes Cretácico Tardío. (Tomado de WEC, 1997)

Durante el Eoceno, en la cuenca del Lago de Maracaibo existió un marco sedimentario


complejo que se caracterizó por sistemas deltaicos-estuarinos, fluvio-costeros y marinos, en
diferentes ubicaciones geográficas delante de los frentes de corrimiento, ya sea el de Perijá o el
relativamente más joven del Estado Lara, hacia el este (González de Juana et al., 1980).

57
Durante el Oligoceno, la acumulación de sedimentos en la Cuenca de Maracaibo fue
preservada mayormente hacia sus flancos: al oeste los clásticos arenosos de las Formaciones
Carbonera y Ceibote (Grupo El Fausto), al sur y este los clásticos finos de la Formación León y
hacia el centro del Lago de Maracaibo (González de Juana et al., 1980).
El Neógeno en Venezuela está signado por importantes períodos de formación de
montañas, los cuales son una consecuencia directa de la interacción de las placas del Caribe y
Suramérica. En el Plioceno, la orogénesis en todo el norte de Venezuela terminó de definir las
cuencas petrolíferas actuales y levantó extensas zonas constituyendo el Sistema de Montañas
del Caribe y el ramal de los Andes Venezolanos, el cual separa a las cuencas del Lago de
Maracaibo y Barinas-Apure. En la Sierra de Perijá, el Grupo El Fausto es una unidad molásica,
relacionada con las montañas de los frentes de deformación en el límite occidental de la
Cuenca del Lago de Maracaibo (WEC, 1997).

Sistemas Petroleros

En la Figura 10, se observa el sistema petrolero generado a partir de la Formación La Luna


en el subsuelo adyacente al noreste del Lago de Maracaibo (Figura 10). La generación ocurre al
noreste de la cuenca; con migración y acumulación durante el Eoceno Tardío, hacia el suroeste;
entrampándose en yacimientos cretácicos y eocenos, especialmente hacia el alto de Icotea. El
momento crítico, donde se alcanza el máximo de probabilidades de acumulación, se encuentra
en el límite Eoceno-Oligoceno (Figura 10).

Figura 10. Sistema petrolero de la Cuenca del Lago de Maracaibo, en su primera fase. (Tomado de WEC, 1997)

58
Otro sistema está constituido por la roca madre cretácica (principalmente la Formación La
Luna) en la mayor parte de la actual cuenca hidrográfica del Lago de Maracaibo (Figura 13), que
en algunas áreas alcanza condiciones de sobremadurez. La generación, la migración y la
acumulación ocurren en pleno levantamiento andino, llenando yacimientos prácticamente a lo
largo de toda la columna estratigráfica. El momento crítico se ubica en nuestros días. Este
sistema constituye el evento más importante de acumulación de hidrocarburos para los
yacimientos terciarios, particularmente en las estructuras de los campos de la región occidental
del Lago de Maracaibo, campos de Urdaneta, Lama-Icotea y los de la costa oriental del Lago de
Maracaibo (Figura 13) (WEC, 1997).
En la Figura 11, se observa el sistema petrolero generado a partir de la Formación La Luna
en la mayor parte de la actual cuenca hidrográfica del Lago de Maracaibo, que en algunas áreas
alcanza condiciones de sobremadurez (WEC, 1997). La generación, la migración y la
acumulación ocurren en pleno levantamiento andino, llenando yacimientos prácticamente a lo
largo de toda la columna estratigráfica. El momento crítico se ubica en la actualidad. Este
sistema constituye el evento más importante de acumulación de hidrocarburos para los
yacimientos terciarios, particularmente en las estructuras de los campos de la región occidental
del Lago de Maracaibo, campos de Urdaneta, Lama-Icotea y los de la costa oriental del Lago de
Maracaibo.

Figura 11. Sistema petrolero definido en la cuenca del Lago de Maracaibo, roca madre Formación La Luna, en la Fase 1
(38 Ma) (Modificado de Talukdar y Marcano, 1994)

59
El tercer sistema lo constituye el Grupo Orocué, al suroeste del Lago de Maracaibo (Figura
13). Aparentemente, esta generación es responsable de los campos del noreste del Macizo de
Santander, en la frontera Colombo-Venezolana. La generación, migración y acumulación
ocurren en el clímax del levantamiento andino (Plioceno), el cual termina de separar
completamente las cuencas de Maracaibo y Barinas-Apure, con la formación de todo un
sistema estructural que incluye la reactivación de estructuras antiguas e involucra inclusive el
basamento ígneo-metamórfico. La principal roca yacimiento es la secuencia clástica paleogena
(Figura 12), que presenta un momento crítico actual (WEC, 1997).

Figura 12. Sistema petrolero de la "Fase 2"; Cuenca de Maracaibo (Tomado de WEC, 1997)

60
Figura 14. Sistema petrolero
definido en la cuenca de
Maracaibo, roca madre
Formación La Luna, al tiempo
presente (Modificado de
Talukdar y Marcano, 1994).

Figura 14. Sistema petrolero


definido en la cuenca de
Maracaibo, roca madre Grupo
Orocué, al tiempo presente
(Modificado de Talukdar y
Marcano, 1994)

1994).

61
Figura 15. Mayores elementos tectono-estructurales del noroeste de Sur América, América Central y del Caribe. BM = Bloque Maracaibo; CC = Cuenca de Colombia; CCa =
Cuenca de Carúpano; FB = Falla de Boconó; FCET = Falla de Corrimiento El Tinaco; FF = Falla de Falcón; FO = Falla de Oca; FOr = Falla Oriente; FP = Falla Polochic; FPR = Falla
Panamá-Romeral; FoPR = Fosa de Puerto Rico; FSMB = Falla Santa Marta-Bucaramanga; GV= Golfo de Venezuela; MS = Macizo de Santander; SMC = Sistema Montañoso del
Caribe; SP = Sierra de Perijá; ZFEJP = Zona de Falla Enriquillo-Jardín de Plátano; ZFS = Zona de Falla Septentrional; ZFSw = Zona de Falla Swan; Zona de Falla Walton. Tomado de
Avé Lallemant y Guth (1990), Chacín et al. (2005), James (2000), Mann y Burke (1984), Montes et al. (2005)
Figura 16. Mapa Estructural tope de Calizas Cretácicas (Tomado de Informe Parnaud et al., 1994)
Figura 17. Fases de Deformación y estilos estructurales (Tomado Parnaud et al., 1994)
Estilos Estructurales

Las diferentes fases de deformación que afectan el occidente de Venezuela implican una
historia estructural compleja y polifásica que se manifiesta con distintos estilos estructurales
(De Toni et al., 1994). Para cada evento se observa tanto una superimposición tectónica con
reactivación de estructuras pre-existentes (estructuras heredadas) como formación de nuevas
estructuras (estructuras neoformadas). La cronología relativa de los episodios tectónicos así
como su reconstrucción cinemática, se basa en la relación que existe entre los marcadores
sedimentarios y las estructuras (Parnaud et al., 1994)( Figura 16 y 16).
Tectónica de Basamento: Se presume que en el mesozoico la tectónica del basamento se
inició durante el Jurásico con la apertura continental entre Norte y Suramérica. Las fallas
normales asociadas a la apertura jurásica (“rift”) controlaron posteriormente la reactivación de
las estructuras en el basamento durante los episodios de compresión, transpresión, extensión y
transtensión (alineamiento de Urdaneta, Icotea, Burro Negro, etc.). Durante los eventos de
compresión que en la componente fue ortogonal con respecto a la orientación principal de las
estructuras, se desarrollaron fallas inversas (“Short cut Thrusts”) en los bordes de los “Grabens”
(sector suroccidental del piedemonte surandino). Cuando la componente fue oblicua
(Transpresión) se generó únicamente la inversión estructural de los “grabens” (Icotea). La
compresión andina es quizás la manifestación mas resaltante de tectónica de basamento
reciente en el occidente de Venezuela. Aun cuando la geometría de los bloques tectónicos no
esta bien definida, la sísmica de Los Andes de Mérida evidencia una serie de cabalgamientos
profundos que transportan el basamento hacia el Norte y noreste. La cobertura sedimentaria
se pliega sobre los bloques fallados formando estructuras monoclinales (Figura 16) (Parnaud et
al., 1994).
Tectónica de cobertura: Los niveles dúctiles del Cretácico Tardío (Formación Colón) y del
Paleógeno (Secuencias de la Formación Trujillo y Pagüey) constituyen los horizontes principales
de despegues activos durante los episodios compresivos Eocenos y Mioceno (corrimientos
asociados a las Napas de Lara y zonas triangulares del Flanco Perijanero y Flanco Norandino),
distensivos (Cuencas distensivas de Zulia Oriental) y transpresivas (Retrocorrimientos de la Paz-
Mara y Lama-Icotea). En el dominio distensivo Zulia Oriental, las fallas normales lístricas se
generan por una deformación dúctil de las unidades del Paleógeno que fueron plegadas
pasivamente (“drapping”) como respuesta a la reactivación por extensión (deformación frágil)
de estructuras jurásicas en el basamento. Los despegues de estas fallas lístricas se localizan en
los horizontes dúctiles de las secuencias de la Formación Colón y Formación Trujillo. En el
dominio transpresivo, las estructuras que involucran basamento (La Paz-Mara e Icotea) generan
retrocorrimientos (“fish-tails”) en la cobertura sedimentaria, donde mecánicamente transfieren
el acortamiento en sentido contrario al del sistema principal. En algunos casos, los niveles
incompetentes dentro del Eoceno Temprano (Formación Misoa) actúan como horizontes
dúctiles propensos a esta deformación disarmónica (Parnaud et al., 1994).
Inversiones Estructurales: Gran cantidad de estructuras interpretadas en la Cuenca del
Lago de Maracaibo, piedemonte surandino y Zulia oriental corresponden con estructuras
invertidas. Los espesos paquetes de sedimentos depositados en las cuencas distensivas
jurásicas y paleógenas fueron deformadas posteriormente por compresión. La inversión
estructural generó enormes pliegues asociados a estructuras profundas altamente complejas y
variables. Estas estructuras corresponden con fallas inversas tipo “Short Cut Thrust” en el
basamento y fallas inversas y retrocorrimientos en la cobertura (Parnaud et al., 1994).
Zonas Triangulares: El flanco sur oriental de la Sierra de Perijá y el Flanco Norandino
constituyen dos zonas triangulares del Neógeno con desacoplamiento del basamento a nivel de
las lutitas dúctiles del Cretácico Tardío de la secuencia de la Formación Colón. La zona triangular
representa el frente de deformación de los cabalgamientos ciegos del basamento. El
acortamiento en estas cadenas se transfiere dentro del mismo nivel dúctil en un
retrocorrimiento que transporta y pliega pasivamente la cobertura post-Colón en sentido
opuesto al de los cabalgamientos del basamento. Otros retrocorrimientos menores también
aparecen dentro de las secuencias miocenas (Parnaud et al., 1994).
Estructuras en “flor” y en “pop-ups”: La mayoría de los alineamientos estructurales que
involucran basamento y que han sido originados y/o reactivados por tectónica rumbo
deslizante, generan fallas muy verticales dentro de la cobertura sedimentaria con frecuentes
saltos aparentes normales e inversos. En algunas estructuras se observa que los saltos en las
fallas se alternan consecutivamente dentro de la misma estructura, lo que comprueba la
existencia de transcurrencia en los alineamientos. Este tipo de tectónica es responsable de las
estructuras tipo “flor” o de culminaciones regionales importantes como el “pop-up” meridional
del frente de Perijá (Figura 16) (Parnaud et al, 1994).
Estudios de Roca Madre en la Cuenca del Lago de Maracaibo

En la Evaluación de una roca madre se trata de identificar aquellas formaciones


geológicas que tengan suficiente materia orgánica para generar hidrocarburos tanto líquidos
como gaseosos, en cantidades comerciales.

La literatura (Tissot y Welte, 1984) ha definido a una roca madre de petróleo, como
aquella secuencia sedimentaria de grano fino y coloración generalmente oscura, que puede ser
o ha sido capaz de generar y expulsar petróleo líquido, en algún momento de su historia
geológica. En este sentido, cabe definir a una roca madre potencial, como aquella unidad
litológica que puede ser capaz de generar petróleo, por poseer tanto la cantidad como el tipo
de materia orgánica apta para generar hidrocarburos. Por otra parte, una roca madre efectiva,
es aquella roca que ya ha sido capaz de producir y expulsar petróleo, por haber estado en algún
momento de su historia geológica sometida a condiciones de presión y temperatura adecuadas
(ha alcanzado la madurez térmica). Dentro de este último contexto, puede definirse una roca
madre activa, como aquella que actualmente genera crudo y/o gas, mientras que una roca
madre inactiva sería una roca fuente que estuvo alguna vez activa, pero que detuvo
temporalmente su generación debido a procesos de enfriamiento asociados con eventos de
levantamiento y erosión. Este tipo de roca madre, mantiene aun cierto potencial de producción
de hidrocarburos.
La generación de petróleo y gas depende de la riqueza orgánica, del tipo de materia
orgánica y del nivel de madurez térmica de las rocas madres. Estos tres factores: Tipo de
materia orgánica, cantidad de materia orgánica y maduración térmica, son importantes en la
evaluación de las rocas madres con potencial de generación de petróleo (Durand, 1980; Tissot y
Welte, 1984).
La cantidad y el tipo de materia orgánica están muy interrelacionadas en términos de la
generación de petróleo. Por ejemplo, una pequeña cantidad de macérales del grupo de las
liptinitas, especialmente las alginitas (0,5% en volumen de roca total) representa que la roca
poseerá un potencial de roca fuente de hidrocarburo mucho mejor que el que puede presentar
otra roca que contenga una cantidad grande de inertinita (2,0%). La cantidad de materia
orgánica en sedimentos y rocas se expresa comúnmente en porcentaje en peso (base seca) de
Carbono Orgánico Total (COT). La Tabla 3, muestra los factores de conversión comúnmente
empleados para determinar la cantidad de materia orgánica en las rocas, a partir de las
medidas de COT. En el laboratorio, la determinación de COT se realiza usualmente pulverizando
finamente la roca, eliminando los carbonatos minerales por tratamiento con ácido clorhídrico,
quemando el residuo del tratamiento anterior en una atmósfera oxidante y midiendo la
cantidad de C02 que se produce en la combustión.
Valores mínimos aceptables de COT para varios tipos de rocas madre de petróleo, son
0,5% para lutitas, 0,3% para carbonatos y 1,0% para rocas clásticas de grano fino, en general.
La cantidad de hidrocarburos separados del bitumen extraído de muestras de roca finamente
pulverizada, también provee una buena indicación de si existe algún potencial generador de
petróleo en esta roca. Se considera que una roca madre aceptable, requiere una concentración
mínima de hidrocarburos (saturados más aromáticos) entre 200 y 300 ppm (Tissot y Welte,
1984).
Las areniscas no poseen algún potencial para la generación de hidrocarburos, debido a
que son depositadas en ambientes óxicos y de alta energía donde la materia orgánica no puede
ser preservada. Además, la materia orgánica esta en bajas concentraciones debido a la alta tasa
de sedimentación.
Unas definiciones de la riqueza orgánica a ser utilizadas para lutitas y calizas, pueden ser
las consideradas por Gallango et al., 1984, en el estudio de geoquímica que hicieran en la
Cuenca del Lago de Maracaibo y que sirve de referencia al presente trabajo, estas se dan a
continuación:

Tabla 3. C.O.T (Carbono Orgánico Total; expresado en % en peso. Tomado de Gallango et al., 1984)

Para rocas madres lutitas

Pobre Medio Bueno Muy Bueno Excelente


0,5 0,5-1,00 1,00-2,00 2,00-4,00 4,00

Para rocas madres calizas

Pobre Medio Bueno Muy Bueno Excelente


0,3 0,3-0,5 0,5-1,00 1,00-2,00 2,00
Caso de Roca Madre: Formación La Luna

La Formación La Luna ha sido considerada desde hace mucho tiempo como la principal
roca madre de los crudos presentes en la Cuenca del Lago de Maracaibo (Hedberg, 1931). Otros
intervalos mencionados en la literatura como roca madre de estos crudos, son el Miembro
Machiques de la Formación Apón (Salvador y Hotz, 1963), la Formación Capacho (Blaser, 1979;
Core Labs, 1982; Gallango et al., 1984), la Formación Colón (Gallango et al., 1984), las lutitas
marinas del Eoceno en la región nororiental de la cuenca (Bockmeulen et al., 1983), las lutitas
carbonosas y los carbones de la Formación Carbonera (Parnaud et al., 1994), y algunas
secuencias de la Formación Marcelina y del Grupo Orocué, ambas del Paleoceno (Parnaud et
al., 1994).
Stauffer y Betoret (1979) y Corpoven (1982) introducen un estudio de evaluación del
potencial petrolero de la Cuenca del lago de Maracaibo. Los autores presentaron mapas de
paleotemperaturas de la Formación La Luna y medidas de reflectancia de vitrinita, carbono
orgánico total e índices de madurez térmica derivados de pirólisis Rock-Eval (Espitalie, 1977),
realizadas sobre 12 pozos distribuidos en toda la cuenca. Las secciones estudiadas incluyeron
desde el Mioceno hasta el Cretáceo. Los autores establecieron que las rocas madres efectivas
están localizadas en el Cretáceo; la sección terciaria se encuentra constantemente inmadura.
Los valores de reflectancia de vitrinita, junto con la construcción de los perfiles de maduración
del kerógeno (Dow, 1977) permitieron a los autores la elaboración de un mapa donde se
muestran las principales etapas de generación de hidrocarburos para la Formación La Luna y
Grupo Cogollo (Figura 18).
Figura 18. Etapas de generación principal de crudo, para la Formación La Luna, mostrando las direcciones principales de
migración (Tomado de Corpoven, 1982).

Blaser (1979) presentó un trabajo de la misma naturaleza de los anteriores. En este


estudio, se analizaron rocas del Terciario y Cretáceo en 56 pozos y varias secciones de
afloramiento, distribuidos de modo regional en la Cuenca del Lago de Maracaibo. Los estudios
del grado de madurez térmica en las rocas, expresados según la escala DOM (grado de
metamorfismo orgánico, Hood et al., 1975), indicaron que la Formación La Luna ha alcanzado la
etapa principal de generación de hidrocarburos en casi toda la cuenca (Figura 19).
Figura 19. Época en la cual la Formación La Luna alcanzó la madurez térmica (Rm = 0,6 ; DOM = 62). (Tomado de Blaser y
White., 1984).

En contraposición a lo interior, las rocas madres del Terciario son constantemente


inmaduras en la misma, a excepción del frente de montañas Norandino, donde se destacaron
rocas madres potenciales terciarias para crudo y gas con niveles de metamorfismo orgánico
apropiado para la generación de crudo.
Core Labs (1982) incluyó en su estudio la historia de generación y migración de crudos a
partir de la Formación La Luna, utilizando la escala TTI, a través del análisis de rocas del
Cretáceo en 30 pozos. La Figura 20 representa el nivel actual de madurez térmica de la citada
unidad en la Cuenca del Lago de Maracaibo.

Figura 20. Madurez térmica de la Formación La Luna, tiempo actual. (Tomado de Core Labs, 1982).
Gallango et al. (1984), Talukdar et al. (1985, 1986) incluyeron en su estudio geoquímico
orgánico regional de la Cuenca del lago de Maracaibo, la identificación de rocas madres por
medio de la evaluación de ocho formaciones del Cretáceo y once del Terciario, utilizando
muestras de canal y núcleos de 42 pozos.

Figura 21. Mapa de distribución regional de madurez actual para la Formación La Luna. (Tomado de Talukdar et al., 1985).

Los parámetros empleados para evaluar la capacidad de generación de hidrocarburos,


fueron el contenido de carbono orgánico total (COT), los índices de hidrogeno y oxigeno
determinados por pirólisis Rock-Eval, los análisis elementales sobre el kerógeno (relación
atómica H/C), la reflectancia de la vitrinita, la temperatura máxima de pirólisis (Tmax, Rock Eval)
y la caracterización geoquímica del bitumen, incluyendo análisis por cromatografía de gases-
espectrometría de masas. Los autores concluyeron que la Formación La Luna es la principal
secuencia sedimentaria generadora de crudos en esta cuenca. Los datos de madurez
observados y calculados (ver diagrama TTI vs. relación porcentual bitumen/COT, Figura 5 en
Talukdar et al., 1986), indican que esta unidad ha generado y expulsado petróleo a niveles de
madurez térmica más bajos que otras rocas madres; el comienzo, máximo y final de la ventana
del petróleo, han sido determinados a valores de TTI 15 (Tmax = 429°C), TTI 35 (Tmax = 435°C) y
TTI 160 (Tmax = 450°C), respectivamente. La madurez térmica actual de las rocas de la
Formación La Luna en la Cuenca, varía de inmadura a sobremadura (Figura 21).
Parnaud et al. (1994) realizaron el modelaje geoquímico de las cuencas occidentales de
Venezuela, Barinas y Maracaibo. En este los autores trabajaron sobre la base de una extensión
de unos 100.000 Km2, entre ambas cuencas, logrando definir tres rocas madres; la primera
perteneciente a las secuencias de la Formaciones La Luna-Capacho-Navay, con un valor
promedio de COT de 4%, responsable de la mayor parte de los crudos marinos (mas del 88% de
material amorfo) encontrados en el área, con potencial petrolífero muy elevado del 20
mgHC/g.roca.
Una secundaria representada por las lutitas carbonosas y los carbones de la secuencia de
la Formación Carbonera, posiblemente responsables de la generación de menes y crudos que
presentan aportes importantes de materia orgánica de origen continental, mostrando valores
altos de índice de hidrogeno (700-800 mg HC/g.COT), asociados a la exinita, rico en hidrogeno
del cual se puede generar hidrocarburos líquidos. Finalmente una tercera roca madre de las
secuencias de la Formación Marcelina y del Grupo Orocué, que pudiera se considerada roca
madre accesoria, el promedio útil no supera los 50’, con un COT de 30% en promedio.
Igualmente, se identifico en la secuencia de la Formación Apón del Cretácico, una roca madre
que corresponde al Miembro Machiques. Este Miembro presenta niveles muy ricos en materia
orgánica de origen marino. Sin embargo, su limitada extensión geográfica permite descartarla
como roca madre principal.
Figura 22. Tendencia del tipo de materia Orgánica – La Luna – Capacho – Navay (Tomado de Alberdi et al.,1994).
Análisis Térmico sobre la Cuenca del Lago de Maracaibo

Parnaud et al. (1994), hacen el estudio de las temperaturas con la información de


perfiles de pozo, con temperaturas estabilizadas de pruebas de formación de varios pozos.
Observando un gradiente mínimo de 2,2 °C/100m, en la parte Central-Oeste (Campo Soledad) y
Oeste (Campo Alturitas) del Lago de Maracaibo. El valor máximo del gradiente, 2,8°C/100m, se
encuentra al Este (Campos La Ceiba y Mene Grande), Noroeste (Campo La Paz), Oeste (Campo
Aricuaisá) y Suroeste (Distrito Colón) del Lago.
En el Oeste del Flanco Norandino (sector del Pozo Guaruríes-1S), el gradiente geotérmico
es de 2,6 °C/100m.
Adicionalmente, cuando se trata de establecer la calibración térmica, es necesario
determinar y analizar las variaciones del gradiente de temperatura a lo largo del tiempo
geológico. Del modelo estratigráfico (Parnaud et al., 1994) se conoce que la cuenca estudiada
se formó en varias etapas geológicas principales, de las cuales destaca:
 Pre-apertura
 Apertura de la corteza, durante el Jurásico
 Margen pasivo durante el Cretácico
 Etapa intermedia, durante el Cretácico - Paleoceno, con un margen pasivo al Este y
Norte del área considerada, y un margen activo al Oeste, detrás de un arco compresivo.
 Compresión durante el Eoceno Temprano - Eoceno Medio, debida a la colisión de la
Placa Caribe contra la Placa de Suramérica y al emplazamiento de las Napas de Lara.
 Dos últimas etapas compresivas, durante las cuales se individualizan la Cuenca del Lago
de Maracaibo y la de Barinas-Apure, durante el Oligo - Mio - Pleistoceno.

La roca madre principal (Formación La. Luna) se depositó en el Cretácico, durante el


periodo de margen pasivo y las rocas madre secundarias durante el Terciario, por lo que
maduraron después del período de margen pasivo, es decir, en el período activo.
De acuerdo con la literatura, el flujo de calor aumenta en un contexto de apertura de
corteza, mientras que en una cuenca de antepaís disminuye, debido a la alta tasa de
sedimentación. Según esta afirmación, se supone que el gradiente actual, variable a lo largo de
la cuenca (de 2,2 a 4 °C/100m), se puede considerar como un valor mínimo.
Sin embargo, con los datos disponibles actualmente (temperatura estabilizada, etc.) se
obtuvo un flujo de calor muy elevado (50 a 60 mW/m2), para este tipo de cuenca de antepaís.
Esto se podría explicar si se considera un período largo de baja sedimentación (desde el
Cretácico hasta el Mioceno Temprano), a excepción de la zona de talud de edad Eoceno al
Noreste del Lago de Maracaibo (Parnaud et al., 1994). Durante el Mioceno - Pleistoceno, se
observó una disminución del flujo de calor de 70 a 60 mW/m2 paralela a una elevada tasa de
sedimentación de más de más de 300 m/m.a.

Gradiente de Temperatura Actuales en la Roca Madre.

Para lograr obtener algún resultado significativo, se tienen que calibrar las temperaturas
de equilibrio calculadas a partir de temperaturas de fondo, en pozos controles representativos
en la cuenca.
Gallango et al. (1984) obtuvieron los gradientes observando en ellos, que en la secuencia
Cretácica son más altos que los de la secuencia Terciaria. Esta clara tendencia también fue
observada por Habicht (1971) y Core Labs (1982) en la Cuenca del Lago de Maracaibo. El
Gradiente más alto del Cretácico coincide con el tope aproximado de las Formaciones Colón y
Mito Juán. Un resumen de sus resultados revelan las siguientes variaciones para el Terciario,
1,6°C/100m y 2,4°C/100m, mientras que los del Cretáceo varían entre 2,4°C/100m y
4,4°C/100m. Los gradientes geotérmicos promedios en la cuenca son 2,2°C/100m para la
secuencia Terciaria y 3,3°C/100m para la secuencia Cretácica.

Madurez Térmica de la Roca Madre.


Sobre este tópico Parnaud et al. (1994), realizaron el estudio a fin de calcular la madurez
de la roca madre, utilizando los siguientes parámetros:

 La reflectancia de la vitrinita (% Ro).


 El Tmáx (°C), medido sobre el pico S2 de la pirolisis Rock- Eval (Espitalié et al., 1986).
Estos datos permiten evaluar el nivel de madurez actual de las rocas madres, en
particular, la historia térmica.
De acuerdo con Alberdi et al., 1994, en el sector de la cuenca se disponían de 1680
valores de Tmax y de 664 valores de Ro de los cuales:

 498 valores de Tmáx y 137 valores de % Ro para la Formación La Luna.


 41 valores de Tmáx y 16 valores de % Ro para la Formación Carbonera.
 83 valores de Tmáx y 46 valores de % Ro para el Grupo Orocué y la Formación
Marcelina.

Estos datos de % Ro y Tmáx presentaron una excelente distribución geográfica lo que


permitió llevar a cabo una buena calibración térmica. Sin embargo, hay que considerar estos
datos con prudencia, particularmente en los siguientes casos:

 Cuando la cantidad de vitrinita es inferior al 10 - 15 %


 Cuando la materia orgánica es una mezcla de diferentes tipos de kerógenos (tipo II + Ill),
los valores de Tmáx deben ser evaluados con mucho cuidado.
 Cuando los valores de Tmáx tienen una dispersión muy grande

En conclusión, en la Cuenca del Lago de Maracaibo, el gradiente geotérmico varía


geográficamente. Se observa una zona de gradiente bajo (2,2°C/100m), localizada a lo largo de
la fosa flexural Norandína y Suroeste del Lago de Maracaibo. Este gradiente aumenta
regularmente hacia los bordes de la cuenca, alcanzando valores de 2,6°C/100m a lo largo de la
Serranía de Perijá, y hacia la zona Noreste del Lago de Maracaibo (Campos La Paz, La
Concepción, etc.), y de 3,2 °C/100m o más, hacia el sector Noreste del Lago (Campo Ambrosio).

Otras Rocas Madre en la Cuenca del Lago de Maracaibo:

Parnaud et al. (1994) basado es sus análisis del estudio, hacen una discriminación relativa
sobre los diversos tipos de rocas madres y cuales podrían haber llegado a generar crudos en la
Cuenca del Lago de Maracaibo, he aquí sus concusiones.
Los autores hablan de una roca generadora principal que pertenece a las secuencias del
Cretácico, y está representada por las Formaciones La Luna - Capacho y Navay. Esta roca madre
tiene una materia orgánica de origen marino (más de 88% de material amorfo) en la Cuenca del
Lago de Maracaibo, y origen mixto (aproximadamente de 30 a 40% continental) en la Cuenca de
Barinas-Apure. El espesor útil es muy reducido en la Cuenca de Barinas-Apure debido al alto
porcentaje de niveles detríticos y al bajo contenido de COT (entre 0,5 y 1 %), por su parte, en la
Cuenca del Lago de Maracaibo varía entre el 60% y el 80% del espesor total. El COT actual en
esta misma cuenca varía entre 0,5% y 10%, con un promedio de 4% y un potencial petrolífero
muy elevado de 20 mg HC/g roca.
Se reconoció una roca madre secundaria perteneciente a la secuencia del Oligoceno, y
está representada por la Formación Carbonera. Los niveles de roca madre en esta formación
incluyen carbones con IH muy elevado, del tipo I, ricos en exinita y alginita. Estos carbones no
están muy bien cartografiados, por lo que se requiere en el futuro definir mejor este aspecto.
Se infirió un espesor promedio de 15', con un COT de 40% aproximadamente y un porcentaje
de saturación de expulsión de hidrocarburos del orden de 50%.
También se reconoció una roca madre accesoria, perteneciente a las secuencias del
Paleoceno, representada por las Iutitas carbonosas y carbones del Grupo Orocué y la Formación
Marcelina. El espesor útil de estos carbones no supera un promedio de 50' con un COT
promedio de 30%.
Igualmente, se identificó en la Formación Apón del Cretácico, una roca madre que
corresponde al Miembro Machiques. Este Miembro presenta niveles muy ricos en materia
orgánica de origen marino. Sin embargo, su limitada extensión geográfica permite descartarla
como roca madre principal.

Principales Periodos de Generación y Expulsión (Cocinas):

1.- El período Eoceno Temprano hasta el Eoceno Medio (52 a 40 m.a), durante el cual se
desarrolla una cocina de hidrocarburos al Noreste del Lago de Maracaibo en la zona de talud,
donde se depositaron las espesas secuencia del Paleoceno Tardío - Eoceno Medio en esta
etapa, se expulsó principalmente crudo, de hecho muy ligero o de mayor calidad que migró
hacia el Suroeste.
2.- Un período del Eoceno Tardío-base del Mioceno Temprano (40 a 21 m.a.),
caracterizado por ser un periodo de poca generación y expulsión, pero de importantes eventos
tectónicos, los cuales van a individualizar varios sistemas petrolíferos. Las Napas de Lara, las
cuencas extensivas de Zulia Oriental, la plataforma de la Cuenca del Lago de Maracaibo y la sub-
cuenca de Barinas. En los sistemas de las napas de Lara y de la cuenca extensiva del Zulia
Oriental, en los pre-eventos tectónicos muestran una generación importante de crudos,
incluyendo hidrocarburos livianos a condensados.
Por Su parte, en los sistemas de la plataforma de la Cuenca del Lago de Maracaibo y la
sub-cuenca de Barinas, se observó la primera inversión estructural en relación con la zona
positiva de las Napas de Lara al Noreste y la zona de sedimentación del Oligoceno.
3.- Un periodo del Mioceno Temprano al actual (21 m.a. al presente) caracterizado por un
desplazamiento de las cocinas y aislamiento del sistema petrolífero de Barinas de la Cuenca del
Lago de Maracaibo. La cocina de hidrocarburos generados por la Formación La Luna invade
toda la Cuenca del Lago de Maracaibo. Se distinguen dos cocinas de hidrocarburos livianos
(condensados y gas) en el borde Noreste del Lago de Maracaibo y a lo largo de la fosa flexural
Norandina. Estas cocinas generan únicamente en el sistema petrolífero del Lago de Maracaibo.
Igualmente, durante este período se forman las cocinas relacionadas a las rocas madres
terciarias Orocué y Carbonera. Estas cocinas, localizadas a lo largo de la fosa flexural norandina,
generan un crudo de origen continental que alimenta los campos Tarra y Los Manueles.
También son responsables de los menes continentales del Flanco Norandino. Esta generación y
expulsión es muy reciente, es decir, desde el Mioceno Medio.
CAPITULO III

MARCO METODOLOGICO

La investigación del presente trabajo es de carácter descriptivo e interpretativo. Para


llevar a cabo este estudio se realizó una serie de pasos y procedimientos con el propósito de
alcanzar los objetivos planteados.
El universo de muestras analizadas fue de 76 pozos distribuidos a lo largo de la Cuenca del
Lago de Maracaibo, haciendo énfasis en crudos de los Bloques I (Lagomar) y VIII (Centro- Sur
Lago) (9 Pozos), gracias a que en ellos se logró realizar un mayor número de análisis. El mismo
involucró la toma de muestras en tres (3) pozos de la Unidad de Explotación Lagomar (U.E.
Lagomar) la cual se encuentra a una distancia aproximada de separación de 25 Km Noroeste
con respecto a los Bloque VIII, donde se muestrearon cinco (5) pozos y un pozo en Centro Sur
Lago; la ubicación geográfica de ellos en Lago de Maracaibo es mostrada en la Figura 22.
En primer lugar, se procedió a la búsqueda y recopilación de toda la información
disponible en cuanto a estudios realizados anteriormente y bibliografía. Las muestras fueron
sometidas a análisis SARA (separación de las fracciones de saturados, aromáticos, resinas y
asfáltenos), para posteriormente analizar las fracciones de aromáticos y saturados a través de
cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masa con el fin de cuantificar de manera
relativa los biomarcadores presentes en el crudo.
93634 143634 193634 243634
DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM0116
0120 DMM0002
DM DM 0132
DM 0054
DM DM
DM 0132
0043
0054
DM 0043 DM 0001
DM 0008
DM0008
DM 0001
P 0156
P 0194
0106
P 0156
P P 0167
0180
PP0194
P 0106P
0180
P 0167 C 0227
C 0227
C 0151
1173580 C 0151 1173580
EPU0002
EPU0002 TOT0004
TOT0004

BN 0215
TOT0001
BN 0215
TOT0003
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD 0116
UD 0119
TOT0002 UD
UD0119
UD 0116
UD 0112
0112

URD0006URD0006
URD0007URD0007 VLA0808
ALP0008A
ALP0005
ALP0005ALP0008A UD VLA0808
GAR0017 UD 0148 0148 UD 0154
ALP0010
ALP0010 GAR0017 UDVLA0711
0154 VLA0711
ALP0003
ALP0003
ALP0009
ALP0006ALP0009
ALP0006 VLA0810 VLA0810
SJ SJ
0002ALP0004
ALP0007
0002 ALP0004
ALP0007
VLA1402 VLA1402
UD 0153
UD 0153
VLA0710 VLA0710
UD
UD 0168
UD 0168
0097
UD 0097
UDUD 0170
0198
UD 0170
UD0779 UD0779
SJL0002
MCH0002
SJL0002
MCH0002 UD 0198
MCH0003
MCH0003 UD 0185
UD 0185
UD 0209
UD 0209
ALT0019
ALT0019
ALT0018
ALT0017 SOL0002
1098580 ALT0015
ALT0018
ALT0017
ALT0015
SOL0002
CLD0055
CLD0060 1098580
CLD0053
CLD0054CLD0055
CLD0060
CLD0053
ALT0009
ALT0009
CLD0046
CLA0096
CLD0054
CLD0046
CLA0096
ALT0016
ALT0016
CL
CL 0099
0087
CL
CL 0099
0087
VLE0686 VLE0686 VLF3020
VLF3020

ARI0002
ARI0002

1023580 CR 0004 1023580


CR 0004

T 0230
WT 0055
T 0230 1 Cm1=Cm15000 m
= 15000
30 Km m
WT 0002
WT 0055
Oil Producer
Oil Producer
WT 0002
948580 948580

93634 143634 193634 243634

Figura 22. Mapa de Ubicación y Pozos con muestras utilizadas para este estudio
Separación del Crudo en Saturados, Aromaticos, Resinas y Asfaltenos (S.A.R.A.)
Este procedimiento permite la separación los grupos principales del petróleo, a saber,
hidrocarburos saturados, aromáticos, resinas y asfaltenos así como la determinación de sus
concentraciones respectivas.
Para la caracterización de los crudos, se procede a tomar una alícuota de 0,05 gr. de
muestra aproximadamente la cual es fraccionada en primer lugar en asfaltenos y maltenos, con
la posterior separación de los últimos en hidrocarburos saturados, aromáticos y resinas.
Los asfaltenos son precipitados por adición de n-heptano a la muestra, en relación 1:200;
obteniéndose un sólido negro y una solución coloreada que pueden ser separados
mecánicamente. El sólido corresponde a la fracción de asfaltenos y la solución a la fracción de
maltenos.
La separación de los maltenos fue realizada por cromatografía liquida de adsorción,
usando alúmina previamente activada a 105 C por un mínimo de 24 horas como soporte;
utilizando dos (2) gotas de maltenos disueltos en n-hexano y eluciones sucesivas de n-hexano y
tolueno para obtener las fracciones de hidrocarburos saturados y aromáticos respectivamente.
La fracción de resinas se determinó por diferencia de peso. Todas las fracciones se dejaron al
aire libre para su evaporación.

Cromatografia de Gases Acoplada a Espectrometría de Masa (GC-EM)

1..1.8 Cromatografía de Gases

La cromatografía (del griego Chromato = color, y Graphe = escritura) es una técnica


utilizada para la separación de mezclas complejas de acuerdo a su solubilidad diferencial
(partición). Las mezclas se distribuyen entre dos fases, una fase estacionaria (sólida o líquida) y
una fase móvil (liquida o gaseosa). Los componentes de la muestra migran de la fase
estacionaria por influencia de la fase móvil. (Skoog y West, 1989 en Azuaje, 2006)
La cromatografía de gases (gas-líquido) separa los componentes de una mezcla compleja
en el estado de vapor con el fin de estudiar la ocurrencia y distribución de componentes
orgánicos específicos (biomarcadores). Las moléculas vaporizadas presentan afinidades
diferenciales entre la fase estacionaria y la fase móvil gaseosa, atendiendo a sus
configuraciones estructurales, tamaños moleculares, polaridades y/o grupos funcionales. La
mezcla compleja es disuelta en un solvente orgánico e inyectada a la columna por medio de una
microjeringa en dispositivo inyector el cual se encuentra a temperatura elevada (280ºC) motivo
por el cual la muestra se vaporiza. Un gas inerte (helio, nitrógeno, entre otros), suministrado
bajo condiciones de flujo y presión controladas, sirve como gas de arrastre para transportar la
fase móvil a través de una columna que contiene una fase líquida estacionaria, donde ocurre la
partición. Los componentes separados que van eluyendo de la columna son enviados a un
detector, donde son transformados en una señal eléctrica que va a un registrador (Figura 23). El
reporte final consiste de un trazado lineal donde aparecen una serie de picos, los cuales se
presentan, con distintas intensidades, a varios tiempos de retención (Figura 24). (Peters y
Moldowan, 1993).

La separación cromatográfica depende del grado en el cual se distribuyen los


componentes de la muestra en ambas fases dado por el coeficiente de reparto:

 Cs 
K  
 Cm 
Donde:
K = coeficiente de reparto
Cs = concentración de soluto en la fase estacionaria
Cm = concentración de soluto en la fase móvil

En condiciones ideales K es una constante que depende de la temperatura y que se


mantiene invariable dentro de un amplio intervalo de concentraciones, por lo cual el proceso se
considera de cromatografía lineal, donde la gráfica Cs vs. Cm es una línea recta (Pecsok y Shield,
1983 en Azuaje, 2006). A este tipo pertenece la cromatografía de elusión lineal, en la cual una
fracción de la muestra disuelta en la fase móvil es colocada en la parte superior de la columna y
eludida a través de esta permitiendo la distribución de los componentes en ambas fases.
La resolución, selectividad y eficiencia de la separación cromatográfica dependen de una
serie de factores que se fundamentan en la cinética del sistema como el tiempo de retención, el
volumen de retención, la velocidad de migración del soluto, entre otros.
El tiempo de retención es el tiempo que transcurre desde el momento en que se realiza la
inyección de la muestra hasta que el pico del soluto aparece en el extremo de la columna. Las
partículas de soluto pueden moverse sólo durante el tiempo en que éste reside en la fase
móvil, lo cual condiciona la velocidad de migración del soluto a través de la columna, según la
ecuación:

L
v
Tr
Donde:
v = velocidad de migración del soluto.
L = longitud de la columna.
Tr = tiempo de retención.
El volumen de retención es proporcional al tiempo de retención y la velocidad de flujo, y
se refiere a un volumen de soluto retenido o absorbido parcialmente en la columna, por lo
tanto:

Vr  Tr * Vf
Donde:
Vr= volumen de retención
Tr = tiempo de retención
Vf= velocidad de flujo

La velocidad de flujo se mide justo en la salida de la columna y debe ser corregida con
respecto a las variables de presión y temperatura, según la siguiente ecuación:

Vf  Vmedida * Tc / Tamb * ( Po  PH 2 O) / Po
Donde:
Po = presión de salida
PH2O = presión de vapor de agua medida a la temperatura del medidor de flujo
Tc = temperatura de la columna.
La eficiencia está relacionada con el ancho de los picos del cromatograma, que
aumenta a medida que se incrementa el tiempo de residencia del soluto en la fase móvil;
otros factores relacionados a ello son la longitud de la columna, el número y altura de los
platos teóricos. La resolución de la columna refleja la capacidad de esta para resolver dos
solutos y esta puede ser mejorada alargando la columna. La selectividad establece la
separación que hay entre los picos y es una medida del tiempo de retención relativo
necesario para la identificación, puede mejorarse alterando variables termodinámicas como
la temperatura. (Skoog y West, 1989 en Azuaje, 2006).

Figura 23. Cromatógrafo de gases. (Tomada de Peters y Moldowan, 1993)

Figura 24. Ejemplo de cromatograma. (Tomada de Peters y Moldowan, 1993)


1..1.9 Espectrometría de Masa

La espectrometría de masa es una importante técnica analítica utilizada


fundamentalmente en la identificación de los componentes de una muestra y la elucidación de
las estructuras moleculares de dichos compuestos por medio de sus patrones de fragmentación
característicos.
A medida que los componentes eluyen de la columna del cromatógrafo de gases, pasan
por medio de una línea de transferencia a una cámara iónica que es mantenida a en alto vacío
(10-2 a 10-5 torr aproximadamente), donde son bombardeados con electrones a 70 eV.
Aproximadamente, una de cada 10.000 moléculas de cada compuesto es ionizada, extraída
electrostáticamente por unos lentes, e inyectada al cuadrupolo. Una combinación de voltajes
de radio frecuencias (RE) y corriente directa (DC) facilita la separación de los iones según su
relación masa/carga (m/z) los iones que atraviesan al cuadrupolo, chocan con un detector
multiplicador de electrones. Cada impacto genera una cascada de aproximadamente 105
electrones, cuya carga es acumulada en capacitores, y convertida en voltaje por electrómetros.
La salida de voltaje va a un convertidor analógico-digital que está conectado a una
computadora, donde se procesa y genera una serie de registros (espectro de masas,
fragmentograma, etc.) (Peters y Moldowan, 1993).
La resolución del espectrómetro de masa se refiere al ensanchamiento de los picos que
en condiciones ideales es nulo, pero que generalmente se ve afectado por variaciones en el
campo magnético o en el voltaje de aceleración aplicado, entre otros factores. Se expresa como
la razón M/ΔM, donde M es la masa de un par de picos de igual altura, uno a M y otro a M+ΔM,
considerando que la señal en el valle entre los picos no exceda 10%. Una alta resolución
permite establecer diferencias entre compuestos con masas moleculares aproximadas.
En la fragmentación de los componentes de una muestra se obtiene un ión molecular que
posee una masa que corresponde al peso molecular del compuesto generado, lo cual facilita la
identificación de la mayoría de los compuestos. Igualmente pueden formarse picos de los
isótopos de dichos compuestos, por lo cual se hace necesario disponer del patrón de
fragmentación de cada compuesto y comparación con sus tiempos de retención.
La cromatografía de gases acoplada a la espectrometría de masa provee una herramienta
útil de separación, identificación y cuantificación de diversos compuestos, tomando como
muestra de análisis del espectrómetro la salida de la columna cromatográfica. Al combinar
ambas técnicas y conectarlas a un sistema de registro, almacenamiento y procesamiento de
datos puede obtenerse información valiosa para estudios de correlación y caracterización,
entre otros.

1..1.10 Procedimiento de Análisis

Los análisis por cromatografía de gases se realizaron sobre las fracciones de hidrocarburos
aromáticos y saturados disueltas en diclorometano (CH2CL2), inyectando 0,3 μl de muestra. La
identificación de los picos será realizada por comparación directa con los tiempos de retención
y de los espectros de masa.
Se utilizó un cromatógrafo de gases Agilent Technology, modelo 6890N, con una columna
capilar de vidrio DB5-MS (J & Scientific de Agilent) de 30 m. de longitud, 0,25 mm de diámetro
interno y 0,25 mm de espesor de película, acoplado a un espectrómetro de masas cuadrupolar
computarizado Agilent 5973N. Las condiciones de operación fueron las siguientes:

 Gas transportador: helio certificado al 99,95%.


 Temperatura del inyector: 270°C.
 Programa de calentamiento: 80°C a 290°C, a una tasa de 4°C/min.
manteniéndose a 290°C por 20 minutos.
CAPITULO IV

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

4.1 Características generales de los crudos


Los crudos marinos de la Cuenca del Lago de Maracaibo, provenientes de pozos
completados en distintos depósitos del Basamento, Cretáceo y Terciario de esta cuenca, han
sido generados en su gran mayoría, por La Formación la Luna del Cretáceo (Gallango et al.,
1984; Talukdar et al., 1985; Escobar, 1987; Parnaud et al., 1994). En tal sentido, el presente
estudio, dedicado exclusivamente al estudio de crudos acumulados en yacimientos del
Cretáceo, supone que todos estos hidrocarburos han sido en su totalidad producidos de La
Formación La Luna.
La importancia del presente estudio en función de las reservas de petróleo que maneja
la División de Occidente de PDVSA en la Cuenca del Lago de Maracaibo, puede ser visualizada
en la Tabla 4. Se incluyen en esta, el volumen de crudo acumulado, tanto en todos los
yacimientos del Cretáceo de la cuenca, como en aquellos yacimientos cretáceos objeto de
estudio en el presente trabajo (Fuente: Libros de Reservas de PDVSA del año 2005). Es
importante destacar que aún quedan más de 600 MMBls en reservas remanentes, las cuales
representan cerca de 50 MBls de producción diaria, en las áreas de los campos estudiados,
cifras importantes que indican la relevancia de estudios de esta naturaleza, y la posible
integración y continuidad con otros que se realizan en la actualidad, por parte de PDVSA y sus
empresas filiales.
Tabla 4. Comparación entre las reservas de Occidente, en el Cretáceo y en este Estudio (Cifras
en MMBls hasta el año 2005)
Reservas PDVSA Div. Occidente Cretá ceo Estudio
N° Yacimientos 1372 138 45
POES 271383 17781 10878
Res. Recuperables 61747 3465 2244
Producció n Acum. 40338 2107 1563
Res. Remanentes 21409 1358 681
Prod Anual/Diaria 452 / 1,2 26 / 0,0719 17 / 0,0482

Las características geoquímicas básicas de los crudos analizados, se presentan a


continuación en la Tabla 5, Los intervalos de valores para la gravedad °API varían desde crudos
livianos a pesados, al igual que los valores SARA. Sin embargo, se aprecia una correspondencia
(no lineal, ni constante) que para valores de mayor fracción de saturados hay un mayor valor de
°API, más adelante se verá que esto a su vez coincide con ciertos valores analizados (Ejemplo:
Concentración de Vanadio y Níquel).
Los análisis geoquímicos realizados sobre las muestras de crudos de yacimientos
cretáceos, incluyeron el análisis SARA, la cromatografía de gases acoplada a espectrometría de
masas de las fracciones de Saturados y Aromáticos para revisar la concentración y distribución
de biomarcadores, así como el uso de la fracción C15- sobre un número limitado de crudos, y las
determinaciones de la concentración de vanadio y níquel en crudo total.

Tabla 5. Listado de Pozos con sus propiedades básicas de °API y Análisis SARA.

S.A.R.A
GRAVEDAD
POZO YACIMIENTO CAMPO *SAT *ARO *RES+ ASF
°API
(%) (%) (%)
ALP0003 APON 0003 ALPUF 28,40 67,20 12,80 17,00
ALP0004 LUNMAR 0004 ALPUF 24,50 61,70 18,50 17,80
ALP0005 APON 0003 ALPUF 22,00 48,00 21,10 21,30
ALP0006 NO CLASIFICADO ALPUF 29,70 53,10 23,30 12,30
ALP0007 LUNMAR 0004 ALPUF 22,60 32,50 26,70 34,40
ALP0008A LUNMAR 0008 ALPUF 26,70 75,60 10,20 4,70
ALP0009 M.JUAN 0009 ALPUF 24,50 54,10 16,90 28,30
ALP0010 NO CLASIFICADO ALPUF 30,80 63,90 13,50 13,90
ALT0009 LUCO 0009 ALTURITAS 33,80 66,10 22,30 11,60
ALT0015 LUCO 0015 ALTURITAS 34,20 54,70 34,40 10,90
S.A.R.A
GRAVEDAD
POZO YACIMIENTO CAMPO *SAT *ARO *RES+ ASF
°API
(%) (%) (%)
ALT0016 MJUAN-M 0008 ALTURITAS 18,30 36,10 29,30 34,60
ALT0017 LUCO 0017 ALTURITAS 28,40 69,50 14,50 10,80
ALT0018 APON 0018 ALTURITAS 31,90 63,00 24,00 13,00
ALT0019 LUCO 0017 ALTURITAS 34,20 54,70 34,40 10,90
ARI0002 NO CLASIFICADO ARICUAISA 24,50 46,90 26,90 26,20
BN 0215 NO CLASIFICADO BOSCAN 23,40 38,20 25,90 35,20
CONCEPCION
C 0151 CRET SUR 32,80 64,60 22,60 12,80
PETROWAYU
CONCEPCION
C 0227 CRET NORTE 35,40 62,50 29,50 8,00
PETROWAYU
CL 0087 CRETACEO 4 CENTRO LAGO 39,00 74,10 22,20 3,70
CL 0099 CRETACEO 4 CENTRO LAGO 41,20 75,60 15,60 8,80
CLA0096 CRETACEO 9 CENTRO LAGO 38,00 80,20 19,00 1,10
CLD0046 CRET CLD0044 BLOQUE VIII / CENTRO 36,30 79,00 19,00 2,10
CLD0053 CRET CLD0044 BLOQUE VIII / CENTRO 37,00 77,90 20,00 2,10
CLD0054 CRET CLD0044 BLOQUE VIII / CENTRO 37,00 77,10 21,00 2,10
CLD0055 CRET CLD0044 BLOQUE VIII / CENTRO 37,00 78,60 19,00 2,10
CLD0060 CRET CLD0044 BLOQUE VIII / CENTRO 37,10 77,20 21,00 2,10
CR 0004 LAGAM 0004 ROSARIO 41,00 84,00 13,00 3,00
DM 0001 CRET KM-24 MARA 27,40 49,20 41,30 9,50
DM 0008 CRET KM-24 MARA 25,80 - - -
PALEOCENO
DM 0043 MARA 34,00 - - -
DM0043
PALEOCENO
DM 0054 MARA 16,70 - - -
DM0043
DM 0116 CRET DM-115 MARA 15,60 25,80 40,80 33,40
DM 0120 CRET DM-115 MARA 11,20 20,40 26,00 50,60
DM 0132 CRET DM-121 MARA 27,10 44,70 25,40 21,30
DMM0002 CRET DMM-2 EL MOJAN 30,40 - - -
EXPL. ZULIA
EPU0002 NO CLASIFICADO 38,00 29,40 23,50 45,50
NOR-OESTE
GAR0017 MARAPON 29G2 GARCIA 25,80 44,20 24,20 19,80
MCH0002 LUCO 0002 MACHIQUES 35,80 64,60 14,60 4,90
MCH0003 APON 0003 MACHIQUES 36,50 64,00 14,00 9,60
P 0106 CRET CAMPO LA PAZ 27,90 56,80 30,30 12,90
P 0156 CRET CAMPO LA PAZ 43,20 45,10 24,30 20,30
P 0167 BASMTO PPAL LA PAZ 36,00 50,40 23,50 16,70
P 0180 BASMTO PPAL LA PAZ 32,30 56,40 30,90 12,70
BASMTO
P 0194 LA PAZ 26,10 52,80 27,70 19,50
P-194
SJ 0002 SJ.CRET 01 SAN JOSE 30,80 59,10 14,90 19,60
SJL0002 MARACA 0001 SAN JULIAN 34,70 59,90 17,10 10,20
SOL0002 RIONEGRO 4 URD. OESTE LAGO 24,20 40,70 25,80 33,50
T 0230 AGD/MER 0230 LAS CRUCES 40,80 89,70 7,60 2,70
TOT0001 APON 0001 TOTUMOS 19,00 17,00 23,00 50,20
TOT0002 APON 0002 TOTUMOS 29,00 51,40 26,50 22,10
TOT0003 APON 0001 TOTUMOS 30,00 - - -
TOT0004 APON 0001 TOTUMOS 32,00 65,70 13,80 8,80
UD 0097 CRETACEO 8 LAMA LAGO 14,30 50,70 30,20 19,10
S.A.R.A
GRAVEDAD
POZO YACIMIENTO CAMPO *SAT *ARO *RES+ ASF
°API
(%) (%) (%)
UD 0112 CRETACEO14 * URD. ESTE LAGO 14,80 55,10 33,10 11,80
UD 0116 CRETACEO14 * URD. ESTE LAGO 25,60 49,90 33,60 16,50
UD 0119 CRETACEO14 * URD. ESTE LAGO 27,50 49,30 31,40 19,30
UD 0148 CRETACEO29 * URD. OESTE LAGO 33,50 52,80 35,10 12,10
UD 0153 RIONEGRO 1 URD. OESTE LAGO 28,40 47,00 32,70 20,30
UD 0154 CRETACEO37 URD. ESTE LAGO 31,80 60,10 29,10 10,80
UD 0168 CRETACEO 8 LAMA LAGO 43,20 49,00 33,20 17,80
UD 0170 RIONEGRO 1 URD. OESTE LAGO 25,70 48,50 26,20 25,30
UD 0185 RIONEGRO 1 URD. OESTE LAGO 32,20 50,10 32,00 17,90
UD 0198 RIONEGRO 1 URD. OESTE LAGO 29,30 41,10 36,70 22,20
UD 0209 RIONEGRO 1 URD. OESTE LAGO 47,20 46,10 27,60 26,30
UD0779 CRETACEO 8 LAMA LAGO 26,30 50,20 36,00 14,20
URD0006 LUCO 23H1 URDANETA TIERRA 25,50 42,40 22,40 24,40
URD0007 APON 28K2 URDANETA TIERRA 26,70 32,50 36,50 31,00
VLA0710 CRET VLA0515 BLOQUE I: LAGUNILLAS 31,30 55,80 26,60 17,60
VLA0711 CRET VLA0515 BLOQUE I: LAGUNILLAS 33,40 48,80 30,20 21,00
VLA0808 CRET VLA0515 BLOQUE I: LAGUNILLAS 32,50 57,60 24,50 17,90
VLA0810 CRET VLA0515 BLOQUE I: LAGUNILLAS 23,30 50,40 36,00 13,40
VLA1402 CRET VLA0515 BLOQUE I: LAGUNILLAS 24,20 51,20 36,00 12,90
VLE0686 CRET VLE0686 BLOQUE V: CENTRO 41,00 78,90 16,10 5,00
CRET
VLF3020 BLOQUE XI: CEUTA 42,20 85,40 12,00 2,60
VLF3020
WT 0002 LUN/GUA 0002 BONITO 54,60 92,60 6,60 0,20
WT 0055 TIBU 0055 BONITO 46,90 84,60 13,70 1,70
(*)SAT (%): Fracción de crudos saturados, ARO: Aromáticos y RES+ASF: Resinas mas Asfáltenos
LUNMAR: Fms. La Luna y Maraca; MJUAN: Fm. Mito Juán; LUCO: Fms. La Luna y Colón; CRET: Cretáceo sin
diferenciar; MARAPON: Fms, Maraca y Apón; BASMO: Basamento ígneo-metamórfico; AGD: Fm. Aguardiente;
LUN/GUA: Fms. La Luna y Guasare; TIBU: Mbo. Tibú de la Fm. Apón.

A continuación se presentan dos secciones estratigráficas en dirección este a oeste (A-


A’) ( Figura 25) y de suroeste-noreste (B-B’) ( Figura 26), a nivel del Cretáceo de la cuenca,
sobre las cuales se ha resaltado las Rocas Madres (Formación la Luna) y las rocas reservorio
principales (Formaciones Apón, Lisure y Maraca). En ellas, se aprecian los diferentes espesores,
continuidad y posibles macro-eventos geológicos ocurridos.
En la Figura 25, los triángulos amarillos y negros indican tendencias depositacionales
predominantemente progradantes y retrogradantes, respectivamente, agrupadas
tentativamente en 8 secuencias de 3er orden indicadas en la parte media de la sección (LQ = La
Quinta; BLL = basal La Luna).
A este nivel de correlación en la Figura 25, se puede apreciar cómo se mantiene el
espesor en La Formación La Luna, con un leve incremento más hacia el Oeste de la Cuenca,
gracias a la presencia del paleo-surco de Machiques (González de Juana et al., 1980); este
hecho se acentúa más al revisar las unidades infrayacentes, sobre todo a nivel de la Formación
Apón, lo cual permite inferir que el depocentro de la cuenca estaba hacia el extremo Oeste, es
decir que la dirección de depositación podría haber sido de Este a Oeste, durante el Cretáceo,
considerando exclusivamente la dirección este-oeste. En la siguiente Figura 26, en dirección
suroeste-noroeste, se aprecia mejor que el depocentro de la cuenca en tiempos del Cretáceo
dominaba hacia la dirección Suroeste.
Figura 25. Sección de correlación A-A’ a través de la región
central de la Cuenca de Maracaibo. (Modificado de Informe
Técnico PDVSA 2009, Proyecto Cretáceo Cretáceo).
Figura 26. Sección de correlación B-B’ a través de la región suroeste-noreste de la Cuenca. El mapa índice se muestra en la
Figura 25. LQ = La Quinta, RN = Río Negro, BLL = basal La Luna, Guáim. = Guáimaros, Gu. = Guayacán, LG = La Grita.
(Modificado de Informe Técnico PDVSA 2009. Proyecto Cretáceo)
4.2 Uso de Diagramas Ternarios para Reconocer Clases Geoquímicas de Crudos y
Posibles Procesos de Alteración
Los resultados obtenidos en los análisis de la composición de los crudos en base a su
solubilidad (SARA, Tabla 5) y el diagrama ternario derivado de ellos, son mostrados en la Figura
27. Se observa que la agrupación de datos correspondiente a todos los crudos de los pozos
estudiados, entran en su gran mayoría en la clasificación de crudos normales, según lo
referencia Tissot y Welte. (1984).

RES+ASF
100
ALPU F
10 ALTUR ITAS
90 B.XI C EUTA
BLOQ I L AG
20 BLOQ´S CEN TR O
80 BONITO
BOSCAN
30 C. LAGO
70
CRUDOS
CON CEPCION
PESADOS EXPLORAT
40
60 ALTERADOS GAR CIA
LA PAZ
50 LAMA LAGO
MAC HIQUES
50
MAR A
60 ROSA-CRU CE
40 SAN JO-JUL
TOTUMOS
CRUDOS 70 URD TIERR A
NORMALES
30 URD . E-LAGO
80
20
90
10
10 0

10 0 90 80 70 60 50 40 30 20 10
SATURADOS AR OMATICOS

Figura 27. Diagrama ternario de composición de las fracciones SARA en los crudos
estudiados.

En un análisis más detallado, realizado en dos campos (Bloque I y VIII), se logro estudiar
el contenido de parafinas, naftenos y aromáticos (PNA) indicados en el diagrama ternario
mostrado en la Figura 28. Esta gráfica permitió diferenciar los crudos procedentes de la U.E.
Lagomar de aquellos producidos en los Bloques VIII y Centro Lago; siendo los primeros
clasificados como parafínicos-nafténicos y se caracterizan por no mostrar dispersión apreciable
en su composición; mientras que, los segundos son ubicados en el campo de los crudos
parafínicos y su distribución es más dispersa.
Es importante señalar que con este diagrama ternario, se puede vislumbrar desde ya
que los crudos de la U.E. Lagomar son derivados de una facies casi totalmente marina de la
Formación la Luna, mientras que los del Bloque VIII y Centro Lago, han sido generados de una
sección volumétrica de la Formación la Luna que posee una cierta influencia continental (Elrich
et al., 1999). Este aspecto será explicado en la siguiente sección.

Aromaticos+NSO
100
10
CLA-96
90 CLD-46
20 CLD-53
80 CLD-54
30 CLD-55
70 CLD-60
40 UD-0779-1
60 VLA-1402-1
U.E. Lagomar
50 VLA-810-1
ROCAS MADRES MARINAS 50 Crudos aromáticos asfálticos

60 Crudos aromáticos nafténicos

40 Crudos aromáticos intermedios

70 Crudos nafténicos

30 Crudos parafínicos nafténicos

INFLUENCIA CONTINENTE 80 Crudos parafinicos

20
Centro Lago y Bloque VIII 90
10
100

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10

Parafinas Naftenos

Figura 28. Diagrama ternario de las concentraciones de parafinas, naftenos y


aromáticos (PNA) en los crudos estudiados de la U.E. Lagomar, Bloques VIII y
Centro Lago (Modificado de PDVSA-Intevep, 2009).

4.3 Nivel de Óxido-Reducción del Paleoambiente Depositacional y Litología de la


Roca Madre (Fm. La Luna)

El estudio de paleoambientes y paleogeografía presentado por Erlich et al. (1999),


determinó que la Formación La Luna fue depositada en un medio sedimentario
correspondiente a la plataforma y el talud continental. Este trabajo también permitió
establecer los distintos cambios de facies observados sobre las rocas madres de la Formación la
Luna a lo largo de la cuenca, variando desde medios ubicados en la parte sureste de la cuenca,
con una cierta influencia continental, siendo a su vez mas siliciclásticos, mientras que al Norte
tienden a ser más marinos, y por ende más calcáreos.
La Figura 29 permite reconocer que, en tiempos del Cenomaniense, se depositaron
sedimentos ricos en carbono orgánico en La Formación La Luna, a lo largo de toda la Cuenca del
Lago de Maracaibo, y se observan dos facies principales en función de la cantidad de lutitas
(más o menos del 50% de lutitas). En la parte este y sureste de la cuenca, la Formación La Luna
contiene por lo general más del 50% de lutita, mientras que en el resto de la cuenca, la
Formación La Luna posee generalmente más del 50% de roca caliza (Erlich et al., 1999).

> 50% CALIZA

> 50% LUTITA

Figura 29. Mapa de la Paleogeografía del Cenomaniense. LS = Caliza; SS = Arenisca;


SLTST=Limolita; SH = Lutita; PHOS=Fosfático; SIL = Silicio; GLAUC =Glauconita. Modificado:
Erlich et al., 1999.
Esta Figura 29, no debe confundirse con la situación actual de la cuenca, en la cual una
buena parte del área ocupada durante el Cenomaniense por la facies más lutítica de La Luna,
está cubierta hoy en día por la Cordillera de Los Andes. Debe recordarse que, según Parnaud et
al., 1994, existieron tres momentos importantes de generación y expulsión de petróleo,
durante la evolución geodinámica de la Formación La Luna; un primer periodo durante el
Eoceno temprano y medio, caracterizado por basculamiento de la cuenca con hundimiento
hacia el noreste y rápida sedimentación en esa área de talud continental. Los crudos
provenientes de esta parte de la Formación La Luna, mostrarán evidencias de haber sido
generados por rocas madres calcáreas.
El segundo periodo ocurrió durante el Eoceno tardío – Mioceno temprano, caracterizado
por el emplazamiento de las napas de Lara al noreste y la sedimentación del Oligoceno en las
regiones suroeste y sur de la cuenca; y el periodo final, entre el Mioceno temprano – Holoceno,
tipificado por el evento tectónico que trajo como consecuencia el levantamiento de Los Andes y
la creación de la antefosa andina en su flanco norte. Es muy probable que los crudos marinos
presentes en la Cuenca del lago de Maracaibo, que demuestren evidencias geoquímicas de
haber sido generados de una facies más lutítica de la Formación La Luna, hayan sido generados
durante el Mioceno, a partir de esas rocas madres lutíticas depositadas en la sección sureste de
la cuenca, en tiempos del Cenomaniense.

4.4 Relaciones utilizadas para definir posibles ambientes de depositación de la


Roca Madre

El petróleo está constituido principalmente por hidrocarburos y compuestos orgánicos


heteroatómicos. Entre estos últimos compuestos se encuentran algunos complejos metal-
orgánicos, con metales en concentraciones traza (Lewan et al., 1982; Dill et al., 1988; Telnaes et
al., 1991; Alberdi-Genolet y Lafargue 1993; Mongenot et al., 1996; Filby 1994). Los metales
trazas se encuentran en el petróleo en dos formas: a) como porfirinas organometálicas
derivadas del material orgánico original; b) como complejos no porfirínicos encontrados en las
resinas y asfaltenos del crudo (Fausnaugh, 2002 en Azuaje, 2006).
1..2 4.4.1. Relación Vanadio sobre Níquel (V/Ni)
Uno de los parámetros geoquímicos más empleados en estudios de correlación crudo-
crudo y crudo-roca madre, es la relación vanadio/níquel (Al Shahristani et al., 1972; Tissot y
Welte, 1984; Lewan, 1984; Escobar 1987; Hunt ,1996; Filby 1994; López et al., 1998; Alberdi-
Genolet, 1999). Este cociente, queda fijado en el kerógeno al finalizar la diagénesis de la
materia orgánica, y se mantiene a lo largo de todo el proceso de generación del petróleo. La
razón fundamental radica en el hecho de que los procesos de alteración que puede sufrir el
petróleo desde que abandona la roca madre, incluyendo su migración hasta la acumulación en
las trampas, pueden afectar las concentraciones absolutas de vanadio y níquel. No obstante,
independientemente de la naturaleza del proceso que afecte la composición del crudo, los
complejos orgánicos que contienen estos metales, serán afectados de la misma forma y
extensión, razón por la cual la relación V/Ni no debería cambiar, para crudos generados de una
misma unidad generadora.
El níquel y el vanadio pueden estar formando complejos tetrapirrólicos en forma de
níquel porfirinas y vanadil porfirinas (Didyk, 1978) y en otros tipos de compuestos
organometálicos, así como en forma de partículas coloidales minerales. La presencia de estos
dos elementos en los crudos, tiene la particularidad de ser muy característico del ambiente en
el cual se depositó la roca madre. Teniendo en cuenta que el elemento vanadio, solo se
encuentra presente en la sangre de ciertos organismos de origen marino tipo ascidias, debería
observarse, en ausencia de algún otro proceso de alteración, que su concentración prevalezca
sobre la de níquel, gracias a que el paleoambiente depositacional de las rocas fuentes de estos
fluidos orgánicos sea marino, con muy poca influencia del continente.
Por su parte, el elemento níquel pertenece al grupo de los elementos calcófilos (afines
con azufre) y en los medios sedimentarios, se encuentra generalmente asociado al hierro,
movilizándose en suspensión, en forma de hierro coloidal o asociado a sustancias húmicas. En
consecuencia, la presencia de una mayor concentración de níquel en el crudo, vista a través de
la disminución relativa de la relación V/Ni respecto a otros valores en crudos de la misma
cuenca, indica cierta influencia de ambientes terrestres, de carácter más oxidante (Tissot y
Welte, 1984; Talukdar et al., 1985; Escobar, 1987; Hunt, 1996), en el medio sedimentario de
plataforma continental y talud sobre el cual se depositaron sus rocas madres de la Formación
La Luna (Elrich et al., 1999).
En la Figura 30 (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), se evidencia una amplia
dispersión de tendencias, que no deja muy claro, hacia donde estaría una influencia continental
y hacia donde una influencia más marina. Por una parte, debe recordarse que la Formación La
Luna subaflora a lo largo de toda la Cuenca del Lago de Maracaibo, y en la sección 4.3 se
demostró que han ocurrido cambios de facies a lo largo de esta unidad. En tal sentido, no debe
de extrañase que las relaciones V/Ni no sean uniformes a lo largo de esta cuenca. Por otro lado,
en aquellos crudos muy livianos, con concentraciones relativamente bajas de estos elementos,
el factor analítico juega un papel muy importante, ya que una variación de uno o dos por ciento
en la concentración de alguno de estos metales, por algún error cometido durante su
determinación analítica, tiene una influencia muy importante en el valor de la relación V/Ni.
DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM 0132
DM 0054
DM 0043
1 Cm30
= Km
15000 m DM 0001
DM 0008
V / Ni
P 0156
>= 2.38, < 5.19 P 0194
P 0106
PP0167
0180
>= 5.19, < 8.00 C 0227
>= 8.00, <10.82
>=10.82, <13.63 C 0151

>=13.63, <16.44
>=16.44, <19.25EPU0002 TOT0004

BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 30. Relación Vanadio / Níquel, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.
No obstante, el análisis estadístico básico de los 33 crudos con valores reportados de la
relación V/Ni, visto en un histograma de frecuencias ( Figura 31), Datos en Tabla A1.9, sección
apéndice), permite reconocer una sola población de muestras (histograma unimodal), con
valores de media y mediana iguales a 12, desviación estándar de 2,88 y coeficiente de variación
de 24%. Tomando en consideración que la relación V/Ni ha sido empleada tradicionalmente en
la geoquímica del petróleo como un parámetro de correlación crudo-crudo y crudo-roca madre,
estos resultados permiten concluir que, a pesar que se evidencian diferencias en las
características del ambiente depositacional de las rocas madres de estos crudos a lo largo de la
cuenca, se concluye que la unidad generadora de los crudos es muy probablemente una sola, la
Formación La Luna del Cretáceo en esta cuenca, como ya ha sido reconocido previamente por
numerosos estudios citados a lo largo de este trabajo.

Histograma Relación V/Ni

16
14
12
Frecuencia

10
8 Frecuencia
6
4
2
0
,4

,2
8

6
3

...
5,

8,

11

14

or
ay
m
y

Clase

Figura 31. Histograma de frecuencias para la Relación Vanadio / Níquel, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

En la siguiente Figura 32 (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), que relaciona


V/(V+Ni) se aprecia una mejor tendencia dado que este cociente variará entre 0 y 1. Valores
más cercanos a la unidad deberían corresponder a rocas madres más marinas y por ende más
calcáreas hacia la zona Noroeste de la Cuenca y cocientes menores a uno deberían representar
crudos generados de rocas fuentes con una mayor influencia continental, originados en la
región sureste de la Cuenca, esta tendencia se repetirá con otros parámetros que se discutirán
más adelante.
DM 0120 DMM0002
DM 0116
1 Cm30
= Km
15000 m DM 0132
DM 0054
DM 0043
V/(V+Ni) DM 0001
DM 0008
>=0.63, <0.68
>=0.68, <0.74 P 0156
P 0194
P 0106
>=0.74, <0.79 PP0167
0180

>=0.79, <0.84 C 0227

>=0.84, <0.90
C 0151
>=0.90, <0.95
EPU0002 TOT0004

BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 32. Relación Vanadio / (Vanadio mas Níquel), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo.

Las variaciones absolutas en cuanto a la concentración de estos elementos como


consecuencia del proceso de migración secundaria, se relacionan con el proceso de
cromatografía natural, o retención selectiva de compuestos polares (resinas y asfaltenos) por
interacción con la superficie de los minerales de arcilla (Chakhmakhchev et al., 1983;
Vanderbroucke et al., 1983; Bonilla y Engel 1986; Zhao-An 1987; Bonilla y Engel 1988). El
níquel, al igual que el vanadio, han sido utilizado ampliamente en la determinación de posibles
rutas de migración secundaria debido a que las concentraciones absolutas de estos metales
traza varían a lo largo del eje de migración, fenómeno que puede estar asociado al proceso de
cromatografía natural (Al Shahristani et al. 1972; Tissot y Welte 1984; Lewan 1984; Escobar
1987; Filby 1994; Hunt 1996; López et al., 1998; Alberdi-Genolet 1999). El tópico de migración
secundaria del petróleo, se escapa de los alcances del presente estudio, debido a la muy pobre
densidad de muestreo, ya que en este, se analizaron crudos recolectados a lo largo de casi toda
la cuenca.

1..3 4.4.2. Relación Pristano sobre Fitano (Pr/Fi)


Los isoprenoides pristano y fitano ( Figura 33) han sido utilizados en numeroso estudios
de correlación de crudos y extractos de roca madre, la relación pristano/fitano ha sido
empleada como indicador del ambiente depositacional (Brooks et al., 1969).
En la Figura 33 (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), se puede apreciar que la
mayor parte de la cuenca del lago de Maracaibo dominan los ambientes marino reductores, sin
embargo hacia el Sur y Este de la Cuenca se puede reconocer una cierta influencia de material
sedimentario proveniente del continente.
DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM 0132
DM 0054
DM 0043
DM 0001
DM 0008

1 Cm30
= Km
15000 m P 0156
P 0194
P 0106
Prist/Fit PP0167
0180

>=0.40, <0.57 C 0227

>=0.57, <0.73
C 0151
>=0.73, <0.90
>=0.90, <1.07 EPU0002 TOT0004
>=1.07, <1.23
BN 0215
>=1.23, <1.40 TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002 UDUD 0170
0198
MCH0002
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 33. Relación entre Pristano y Fitano (Pr/Fi), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo.

1..4 4.4.3. Análisis de compuestos aromáticos con azufre,


metildibenzotiofenos (MDBT).
Los hidrocarburos aromáticos más estudiados por cromatografía de gases pertenecen a
las series de los naftalenos (Radke et al., 1986) y fenantrenos mono y disustituidos (Radke et al,
1982). En esta fracción, también se han estudiado profusamente los compuestos orgánicos
azufrados benzo- más dibenzotiofenos (Hudges, 1985). Se ha demostrado que en la zona
correspondiente a la ventana del petróleo, las relaciones entre diversos homólogos de estas
familias de compuestos aromáticos, cambian en una forma regular con el incremento en la
madurez térmica de la materia orgánica.
El análisis de compuestos aromáticos de la familia de los metildibenzotiofenos, (4-
MDBT, 2-MDBT+3-MDBT y 1-MDBT de la Figura 34, Datos en Tabla A1.11, sección apéndice),
medidos en el ión m/z 198, permite diferenciar los crudos procedentes de la U.E. Lagomar con
respecto a los de Bloque VIII y Centro Lago. Entre estas dos áreas hay gran distancia, además de
grandes fallas estructurales que claramente separan a los crudos en distintas familias.

DM
DM 0120
0116
DMM0002

DM 0132
DM 0054
DM 0043
4-MDBT
DM 0001
DM 0008

P 0156

100
P 0194
P 0106
P 0167
P 0180

CLA0096
C 0227

C 0151

EPU0002
TOT0004

BN 0215
10 CLD0046
CLD0053
TOT0001
TOT0003
UD0119
0116

90
TOT0002 UD
UD 0112

ALP0005
ALP0008A
ALP0010
ALP0003
ALP0009
ALP0006
URD0006
URD0007
GAR0017 UD 0148
VLA0808
UD 0154
VLA0711
CLD0054
20
ALP0004 VLA0810

CLD0055
SJ 0002
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198

80 CLD0060
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018
ALT0017 SOL0002
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
CLD0046
ALT0009
ALT0016
CLA0096

CL 0099
CL 0087 UD0779
VLE0686
VLF3020
30 VLA0810
ARI0002
70 VLA1402
40
60
CR 0004

50
WT 0055
T 0230
1 Cm30 Km m
= 15000
50
Oil Producer
WT 0002

60
40
70
30
80
20
90
10
100

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10
2+3-MDBT 1-MDBT

Figura 34. Diagrama ternario de la familia de los isómeros del metildibenzotiofeno, para los
crudos de U.E. Lagomar, Bloques VIII y Centro Lago.
La principal aplicación de la distribución de los compuestos MDBT en geoquímica del
petróleo, tiene que ver con el reconocimiento de las características litológicas de la roca fuente
de los crudos, a partir de su distribución en los fragmentogramas de masas.
A continuación, se presentan dos fragmentogramas, el primero representativo de
crudos cretáceos del centro del lago (Bloque I, pozo VLA-0810, Figura 35) y el segundo, de
crudos de la costa oeste del lago de Maracaibo (campo Alturitas, pozo ALT-0053, Figura 36).
Hughes (1985) propuso que si el fragmentograma (relación m/z 198) para los compuestos
MDBT presentaba una forma de “V” (tipo 4>2,3<1 MDBT, como el de la Figura 36) sería
característico para crudos de roca madre marina, roca calcárea. En contraposición, si es de tipo
4>2,3>1 MDBT ó “Escalonada” ( Figura 35), será característico para rocas madres siliciclásticas
(lutíticas).

DMM0002
DM
DM 0120
0116

DM 0132
DM 0054
DM 0043
DM 0001
DM 0008

P 0156
P 0194
P 0106
P 0167
P 0180

C 0227

C 0151

EPU0002
TOT0004

BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018
ALT0017 SOL0002
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
CLD0046
ALT0009 CLA0096
ALT0016
CL 0099
CL 0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
1 Cm30 Km m
= 15000
WT 0055
Oil Producer
WT 0002

Figura 35. Fragmentograma representativo de ion m/z 198 del centro del Lago de Maracaibo
correspondientes a los Bloques I y VIII. El mapa índice, señala la presencia del Lago de
Maracaibo, muestra la ubicación en la cuenca de los campos Bloque VIII (punto naranja, a la
derecha) y del campo Alturitas (punto verde, en la izquierda).

Por tanto, de los datos mostrados hasta este momento, se deriva una conclusión muy
importante y es que los crudos del norte y oeste de la cuenca, tienen un origen de rocas
madres de la Formación La Luna depositadas en un ambiente marino, mientras los del centro y
sur de la cuenca corresponden a una facies de La Luna con cierta influencia continental.
Figura 36. Fragmentograma representativo de ion m/z 198 correspondientes al campo
Alturitas, costa Oeste del Lago de Maracaibo. Fuente: Escobar et al., 2007.
Como una manera de combinar las informaciones presentadas en las secciones 4.4.2 y
4.4.3, se incluye a continuación una gráfica que muestra las relaciones entre los cocientes
Dibenzotiofeno/Fenantreno vs. Pristano/Fitano ( Figura 37, Hughes et al., 1995). Los resultados
mostrados corresponden a crudos cretáceos provenientes de pozos perforados en las áreas de
Bloque I y VIII. Se observa que los crudos de la U.E. Lagomar se ubican dentro de la zona 1B, con
relaciones DBT/F (1-3) y Pr/Fi <1 los cuales son asociados a rocas madres cuyas secuencias
presentan litología carbonática y mixta (carbonáticas-siliciclásticas), depositadas en ambientes
marinos ricos en sulfatos como se describe en la Tabla 6, (Datos en Tablas A1.9 y A1.11, sección
apéndice). Los crudos de los Bloques Centro Lago y Bloque VIII se ubican en el límite entre las
zonas 3 y 2, con DBT/F (0-1) y Pr/Fi cercano a uno (1), concluyéndose de nuevo que son crudos
marinos, pero con una cierta influencia de medios continentales pobres en sulfatos (Hughes et
al., 1995).

8
Zona 1A
Zona 1B
7 Zona 2
Zona 3
Zona 4

VLA0810
5
DBT/F

VLA1402
UD0779
4
CLD0046
CLD0053
3
CLD0054
CLD0055
2
CLD0060

0
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Pristano/Fitano

Figura 37. Relación dibenzotiofeno (DBT)/fenantreno (F) Vs. relación pristano/fitano.


Tabla 6. Zonas definidas por las relaciones de dibentiofeno/fenantreno y pristano/fitano para
ambientes sedimentarios y litología de la roca madre. (Hughes et al., 1995).

DBT/F
Pr/Fi
Zona (dibenzotiofeno/ Ambiente sedimentario Litología
(pristano/fitano)
fenantreno)
1A >3 <1 marino carbonatos
1B 1-3 <1 marino y lacustrino (rico en sulfatos) carbonatos y mixta
2 <1 <1 lacustrino (pobre en sulfatos) variable
3 <1 1-3 marino y lacustrino lutitas
lutitas carbonosas y
4 <1 >3 fluvial-deltaico
carbones

4.5 Madurez Térmica de la Roca Madre (Fm. La Luna)

La madurez térmica al día de hoy, de las rocas madres de la Formación la Luna en la Cuenca
del Lago de Maracaibo, expresada en términos de la escala TTI (Índice Tiempo-Temperatura de
Lopatin) puede ser vista en la Figura 38. Talukdar et al. (1986), indican que la Formación La
Luna ha generado y expulsado petróleo a niveles de madurez térmica más bajos que otras rocas
madres; el comienzo, máximo y final de la ventana del petróleo, han sido determinados a
valores de TTI 15 (Tmax Pirólisis Rock-Eval = 429°C), TTI 35 (Tmax = 435°C) y TTI 160 (Tmax =
450°C), respectivamente. La madurez térmica actual de las rocas de la Formación La Luna en la
Cuenca, varía de inmadura a sobremadura.
Figura 38. Madurez actual, de la Formación La Luna (Modificado de Talukdar, et al., 1985).

Ya se ha mencionado en páginas precedentes, que Parnaud et al., 1994 proponen tres


períodos principales de generación y migración del petróleo en la cuenca, resumidos en la
Figura 38, con la denominación de “cocinas”; los dos principales, comprenden una primera
cocina, de edad Eoceno, abarcando la sección de la Formación la Luna que subaflora en la parte
noreste de la cuenca, y una segunda cocina, de edad Mioceno-Holoceno, la cual corresponde al
resto de la cuenca.

1..5 4.5.1. Relación entre Pr/n-C17 y F/n-C18


Las relaciones Pr/Fi en combinación con Pr/n-C17 y Fi/n-C18 han sido usadas en
numerosos estudios para obtener información del ambiente depositacional y como parámetros
de correlación en estudios de crudos y rocas madres (Rashid, 1979; Volgler, 1981; Alexander,
1981; Gubert, 1975 en Philp, 1985). Las relaciones Pr/n-C17 y Fi/n-C18 disminuyen con el
incremento en la madurez térmica del crudo, debido a la tendencia creciente de generación de
n-parafinas a partir del kerógeno, como resultado del incremento en su maduración con la
temperatura. Estas relaciones aumentan con el progresivo incremento en la biodegradación
(sirven como indicadores de biodegradación incipiente), debido a la pérdida de n-alcanos por
acción de las bacterias. Hunt, (1996) presentó un gráfico de pristano/n-C17 vs. fitano/n-C18 (
Figura 39), (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), el cual permite clasificar crudos y extractos
de rocas de acuerdo a su origen (tipo de kerógeno), incluyendo el nivel de oxido-reducción de
su paleoambiente depositacional.

Figura 39. Diagrama Pristano/n-C17 Vs. Fitano/n-C18 (Hunt., 1996).

Los crudos analizados bajo estos parámetros caen en la región de crudos marinos (Hunt.,
1996), derivados de rocas madres depositadas en paleoambientes reductores, arrojando un
grado de maduración amplio como se ven agrupados en la parte inferior del gráfico de la Figura
39. Como se trata de yacimientos profundos, se considera que es muy poco probable que los
crudos hayan sufrido biodegradación, debido a que las temperaturas a estos niveles
generalmente exceden los 80ºC, límite superior de vida para las bacterias que comúnmente
biodegradan el petróleo (Hunt, 1996).
En la siguiente Figura 40 (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), se aprecia un
incremento de la madurez térmica en sentido Noroeste a Sureste, esto principalmente da una
idea del grado de maduración a lo largo de toda la cuenca, que incluso puede estar relacionado
con mayores profundidades (temperaturas mayores) y tiempos de cocción bajo esas
condiciones de la roca en estas áreas. Además, se observan casos puntuales de crudos con
mayor madurez dentro de grupos de pozos con un menor grado de madurez térmica, lo cual
lleva a recomendar hacer estudios subsecuentes para determinar cual pudiera ser la causa de
esas anomalías.

DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM 0132
DM 0054
DM 0043
DM 0001
DM 0008

1 Cm30
= Km
15000 m P 0156
P 0194
P 0106
Fitano nC18 PP0167
0180

C 0227
>=0.30, <0.48
>=0.48, <0.67 C 0151
>=0.67, <0.85
>=0.85, <1.03 EPU0002 TOT0004
>=1.03, <1.22 BN 0215
>=1.22, <1.40 TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 0. Grafico de Fitano/n- C18, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.


Similar al análisis anterior, se observa congruencia con las relaciones Pristano/n-C17. La
Figura 41 (Datos en Tabla A1.9, sección apéndice), arroja mayor grado de madurez térmica a
medida que se avanza en la dirección Noroeste a Sureste en la Cuenca del Lago de Maracaibo.
Es importante mencionar la coincidencia existente entre la dirección de aumento en la madurez
térmica, indicada por los dos parámetros anteriores, y la dirección hacia la cual aumenta el
porcentaje de roca lutita como componente de las rocas madres de la Formación la Luna, visto
en capítulos anteriores. Se sabe que, a medida que aumenta el carácter continental del
ambiente depositacional, la relación pristano/fitano es afectada a favor del pristano; es decir,
estas relaciones aumentan (Tissot y Welte, 1984). Sin embargo, las relaciones Pr/n-C17 y Fi/n-C18
no deberían sufrir modificaciones importantes gracias al mencionado incremento en el carácter
lutítico de las rocas madres de los crudos. Se concluye que este estudio ha arrojado una
coincidencia interesante, es decir ambientes con influencia continental (Sureste de la Cuenca)
tienen un mayor grado de madurez térmica y ambientes marinos (Norte, noroeste) tienen un
nivel de madurez térmica menor en sus rocas fuentes.
DM 0120 DMM0002
DM 0116

1 Cm30
= Km
15000 m DM 0132
DM 0054
DM 0043
Prist/n-C17 DM 0001
DM 0008
>=0.20, <0.32
P 0156
>=0.32, <0.43 P 0194
P 0106
PP0167
0180
>=0.43, <0.55
C 0227
>=0.55, <0.67
>=0.67, <0.78 C 0151
>=0.78, <0.90
EPU0002 TOT0004

BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018
ALT0017 SOL0002
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 1. Grafico de Pristano/n- C17, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

1..6 4.5.2. Estéranos

Los estéranos son compuestos derivados de esteroles que están ampliamente


distribuidos en plantas y microorganismos, con el esterol C27 y C28 abundantes en organismos
marinos y el esterol C29 en plantas superiores. Sin embargo, Cassani (1988) menciona que en
algunos crudos marinos el predominio del C29 puede atribuirse a la contribución de algas
marrones o verdes u otros organismos marinos.
Los estudios de biomarcadores en la fracción de hidrocarburos saturados (Figura 42)
arrojaron una predominancia de estéranos regulares (Tabla A1.10, sección apéndice),
medidos sobre el ión m/z 217, en la cual los estéranos C 27 predominan sobre los C28 y C29. Esto
puede ser visualizado en el diagrama ternario mostrado en la Figura 42, el cual se caracteriza
por mostrar muy poca dispersión de puntos, a pesar que incluye crudos de pozos perforados
a lo largo de casi toda la Cuenca. Esta distribución, con preferencia hacia los estéranos C 27, es
asociada al origen marino de la materia orgánica (Peters et al., 2005).

%C28
100
ALTURITAS
10 ARICUAISA
90 BLOQ I LAG
BONITO
20 C.LAGO
80 C.ROSARIO
EXP
30 LA PAZ
70 MARA
SOL
40
URD TIE-LAG
60
50
50
60
40
70
30
80
20
90
10
100

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10
%C27 %C29

Figura 2. Diagrama ternario de estéranos regulares en la fracción saturada de los crudos de la


Cuenca del Lago de Maracaibo.

A modo de contraste, la Figura 43 muestra fragmentogramas de estéranos regulares


(relación m/z 218), entre crudos del oriente y occidente de Venezuela, destacando el dominio
de C27 en crudos de origen marino y C29 en crudos de ambiente continental (Cassani, 1988).
Además, se incluye en la Figura 44 un fragmentograma de masas, perteneciente a uno de los
crudos del Bloque I, del Lago de Maracaibo, donde se ve el predominio de los estéranos C 27
sobre los C28 y C29, característica esta de su origen de rocas marinas.

ALT-11

MARINO
C27 > C29

JU-455

CONTINENTAL
QG-29S C29 > C27

Figura 3. Fragmentograma de masas y la comparación entre (a) Crudos en ambiente Marino


(ALT-11) Cuenca del Lago de Maracaibo, (b) Campo Oriental (JU-455) y (c) un Crudo de
ambiente Continental al Oriente de Venezuela (QG-295). (Modificado de Cassani, 1988).

Figura 4. Fragmentograma del ión m/z 218, para la muestra de crudo perteneciente al pozo
VLA-0810 de la U.E. Lagomar.
4.6 Análisis de madurez con biomarcadores saturados y compuestos aromáticos
en la fracción C15+

A continuación se presenta la Figura 45, la cual hace referencia a algunos


biomarcadores utilizados y su equivalencia al grado de madurez térmica, los cuales han sido
estandarizados para la reflectancia media de la vitrinita (%Rm). Se trabajara con algunos de
estos, de los cuales se obtuvieron mayor número de datos y han sido considerados más
representativos a efectos del presente estudio.

Modificado de Peters y Moldowan, 1993


%Rm

Figura 5. Biomarcadores como parámetros y en diferentes rangos de maduración. Modificado


de Peters et al., 1993, 2005.
1..7 4.6.1. Relación ααα20S/(ααα20S+ααα20R) ó %20S
Los esteranos regulares poseen un carbono quiral en C20. El proceso de isomerización en
estéranos causa el incremento de la relación 20S/(20S+20R) desde 0 hasta 0,5 con el aumento
de la madurez. Los esteroides precursores de seres vivientes, solo presentan la con Figuración R
pero progresivamente, la transformación que sufre la materia orgánica en los ambientes
geológicos, ocasiona que estos se van convirtiendo en una mezcla de R y S. Frecuentemente, se
utilizan los compuestos del αααC29 para cuantificar y hacer seguimiento a este hecho, debido a
la facilidad para su identificación con CG-EM con el ión m/z 217. Esta relación puede ser
afectada por factores diferentes a la madurez, como por ejemplo; la facies y la biodegradación,
esta última reflejada como un aumento de la relación por encima de 0,55 por una probable
remoción selectiva por bacterias del epímero ααα20R (Seifert y Moldowan, 1986).
La relación de madurez %20S (20S/20S+20R) en la Figura 46 (Tabla A1.10, sección
apéndice), muestra que los crudos alcanzaron la condición de equilibrio en la reacción de
isomerización que va desde un 40% a 60% del parámetro %20S, lo cual localiza a estas muestras
en la zona que corresponden al pico de la ventana de generación.
DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM 0132
DM 0054
DM 0043
1 Cm30
= 15000 m DM 0001
DM 0008
%20S
P 0156
>=40.00, <43.33 P 0194
P 0106
PP0167
0180
>=43.33, <46.67
C 0227
>=46.67, <50.00
>=50.00, <53.33 C 0151
>=53.33, <56.67
>=56.67, <60.00 EPU0002 TOT0004

BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002 UDUD 0170
0198
MCH0002
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 6. Mapa de madurez térmica %20S (20S/20S+20R), crudos de la Cuenca del Lago de
Maracaibo.

Esta Figura muestra la misma tendencia de incremento en el grado relativo de madurez


térmica de los crudos de yacimientos cretáceos de la Cuenca del Lago de Maracaibo, en sentido
generalizado Noroeste – Sureste, que ya se mostró en las Figura 40 y Figura 41, para las
relaciones Pr/n-C17 y Fi/n-C18.
Se observan dos regiones anómalas, alrededor de los campos García-Urdaneta y Rosario,
ambos ubicados en la costa occidental del lago, con crudo de relativamente baja madurez
térmica. Considerando que la segunda “cocina” importante de generación de petróleo de las
rocas madres de la Formación La Luna, abarcó el periodo Mioceno – Holoceno, podría
proponerse que los crudos presentes en las regiones antes especificadas, provienen de una
cocina geológicamente reciente.

1..8 4.6.2. Relación /(+) ó 


La isomerización en las posiciones de los átomos de carbono 14 y 17 en los estéranos
regulares C29-20S y 20R causa el incremento de la relación /(+) hasta alrededor de 0,7
debido a la mayor estabilidad térmica de los isómeros  en comparación con los isómeros
derivados biológicamente  (Farrimond et al., 1998). Esta relación parece ser independiente
del tipo de materia orgánica y alcanza el equilibrio más lento que la relación
20S/(20S+20R); por tanto, es efectiva a niveles más altos de madurez.
El nivel de madurez determinado a través del % (Tabla A1.10, sección apéndice), es
mostrado en la Figura 47, en la cual se observa que la mayoría de las muestras de crudo en
niveles del Cretáceo en la cuenca, han alcanzando cierta condición de equilibrio para esta
reacción, la cual ubica la madurez térmica de las muestra en la zona del pico de la ventana del
petróleo (Mackenzie, 1984; Peters et al., 1993, 2005), siendo por lo tanto más viable para la
estimación del nivel de madurez.
Es importante mencionar la coincidencia respecto a la Figura anterior, en el sentido que
los crudos presentes en la parte central de la costa occidental del Lago de Maracaibo (campos
Totumo, Alpuf, Machiques, San Julián, Alturitas, entre otros) muestran un nivel de madurez
térmica consistentemente más bajo que el observado en el resto de la cuenca, lo cual hace de
nuevo suponer a esta área de la cuenca, como una región en la cual la Formación la Luna
generó petróleo, en un tiempo geológico más cercano al momento actual, que lo que ocurrió
en el resto de la cuenca.
Así mismo, se resalta la contradicción entre los resultados mostrados en esta Figura 47 y
en la anterior (Figura 46), para el crudo del campo Rosario, el cual aparece en la Figura 47 con
evidencias de madurez térmica en la zona del máximo de la ventana del petróleo. Considerando
que los crudos provenientes de campos ubicados cercanos a Rosario (Las Cruces, Bonito) en la
zona sur, arrojan sistemáticamente evidencias de madurez térmica elevada, corroborada por
los estudios de Gallango et al., 1984, se propone que la madurez térmica para los crudos del
campo Rosario, debería ser similar a la de los hidrocarburos producidos por los yacimientos
presentes al sur de este campo.

DM 0120 DMM0002
DM 0116

DMDM
00540132
DM 0043
DM 0001
1 Cm30
= Km
15000 m DM 0008

BB P 0156
P 0194
P 0106
>=36.00, <41.67 PP0167
0180

>=41.67, <47.33 C 0227

>=47.33, <53.00 C 0151


>=53.00, <58.67
>=58.67, <64.33 EPU0002 TOT0004
>=64.33, <70.00 BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148UDVLA0808
0154
ALP0010 VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006
ALP0004 VLA0810
SJ 0002
ALP0007 VLA1402
UD 0153 VLA0710
UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018
ALT0017
ALT0015 SOL0002
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
CLD0046
ALT0009 CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 7. Mapa de madurez térmica con %, crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

1..9 4.6.3. Porcentaje de Aromatización de Esteroides (Monoaromáticos a


Triaromáticos) T/(T+M) ó TA/(MA+TA)
Este parámetro de evaluación de la madurez térmica de la roca madre que dio origen al
crudo analizado, mide la aromatización de los anillos saturados de esteroides monoaromáticos
(MA) con transformación a esteroides triaromáticos (TA, Mackenzie, 1984). Presenta valores
que oscilan entre cero y 100% (Figura 44, Datos en Tabla A1.10, sección apéndice),
correspondiendo este último valor al pico de generación o ventana de petróleo, equivalente a
una Rm% (0,7-0,8) (Mackenzie, 1984; Peters et al., 2005). Su determinación emplea las
concentraciones de esteroides aromáticos medidos sobre los iones con m/z 231 (esteroides
triaromáticos C27) y m/z 253 (esteroides monoaromáticos C28).
En la Figura 48, se observa la distribución de este parámetro en toda la Cuenca del Lago
de Maracaibo, mostrando valores relativamente bajos hasta llegar a 100%, permitiendo
reconocer que la ventana del petróleo en la cuenca abarca desde crudos con baja madurez
térmica en el Centro del Lago (Bloque I – Urdaneta Lago) y Noroeste de la Cuenca (Campo
Mara), hasta alcanzar una mayor y total madurez térmica para el resto de las muestras
estudiadas (pico de la ventana de petróleo), que cubre la mayoría de la cuenca.
Se observan contradicciones respecto a las dos Figuras precedentes (Figura 46 y Figura
47), donde se tiene por ejemplo los crudos del Bloque I (U.E Lagomar), los cuales muestran
menos madurez térmica, mientras que con las medidas de los parámetros anteriormente
discutidos, presentan una mayor y consistente madurez. Sin embargo, se ratifica la baja
madurez térmica en el campo Mara, del cual ya se han hablado algunas razones sobre ello para
los crudos de esta parte de la cuenca.
Luego, es destacable la reiteración de una mayor madurez térmica en los campos
Bonito, Las Cruces, Rosario y Aricuaisa, la cual ha sido consistente en muchos de los gráficos
presentados, coincidiendo con otros estudios anteriores ya citados. Así como también se
observa una especie de banda que bordea los campos Totumos, Boscán, La Concepción y
Urdaneta Este Lago con máximos valores de madurez térmica, que lo incluyen en el pico de la
ventana de máxima generación de crudo, teniendo en cuenta además, que el ambiente de
depositación hacia esta zona es predominantemente marino, lo cual había sido previamente
asociado con crudos que presentaban relativamente una menor madurez térmica. Es probable
que este comportamiento tenga que ver más con un proceso de migración y entrampamiento
de una primera etapa de generación, es decir, la cocina del Eoceno (Parnaud et al., 1994).
También, se ha encontrado que esta relación puede ser afectada por el proceso de expulsión de
hidrocarburos (Hoffmann et al., 1984; Peters et al., 1992). Los esteroides triaromáticos son más
polares, y son retenidos preferencialmente en el bitumen en comparación con el petróleo
expulsado. No obstante, no se cuenta con herramientas en el presente estudio para
profundizar más acerca de este aspecto.
DM 0120 DMM0002
DM 0116
DM 0132
DM 0054
DM 0043
DM 0001
1 Cm30
= Km
15000 m DM 0008

T/(T+M)(Est3A/MoA) P 0156
P 0194
P 0106
>= 34.10, < 45.08 PP0167
0180

>= 45.08, < 56.07 C 0227

>= 56.07, < 67.05


C 0151
>= 67.05, < 78.03
>= 78.03, < 89.02
EPU0002 TOT0004
>= 89.02, <100.00
BN 0215
TOT0001
TOT0003
TOT0002 UD0119
UD 0116
UD 0112

URD0006
URD0007 VLA0808
ALP0005
ALP0008A GAR0017 UD 0148
ALP0010 UD 0154
VLA0711
ALP0003
ALP0009
ALP0006 VLA0810
SJ 0002 ALP0004
ALP0007 VLA1402
VLA0710
UD 0153 UD 0168
UD 0097
UD0779
SJL0002
MCH0002 UDUD 0170
0198
MCH0003 UD 0185
UD 0209
ALT0019
ALT0018 SOL0002
ALT0017
ALT0015
CLD0055
CLD0060
CLD0053
CLD0054
ALT0009 CLD0046
CLA0096
ALT0016
CL
CL 0099
0087
VLE0686
VLF3020

ARI0002

CR 0004

T 0230
WT 0055
WT 0002

Figura 8. Mapa de madurez de T/(T+M), crudos de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

4.7 Correlación Crudo-Crudo

1..10 4.7.1. Utilización de la Fracción C15- para Reconocer Familia de Crudos

4.7.1.1 Diagramas polares – Fingerprint ó Huella Digital de Crudos

En esta sección se presentan los resultados obtenidos sobre los análisis realizados en la
fracción de C15- ; estos corresponden al método visual de análisis de resultados representado
por los diagramas polares ó huella digital de crudos, los cuales se construyen a través de la
utilización de los "diagramas estrella", que no son más que representaciones en escala polar de
relaciones de diversas parafinas (señales minoritarias en el cromatograma). Tales parafinas han
sido a su vez establecidas como suficientemente contrastantes o discriminantes en el conjunto
de crudos bajo estudio. Para esto, se avanza a través de un método visual comparativo o por
medio de análisis estadístico multivariado, las cuales requieren el procesamiento estadístico de
las áreas de todas las parafinas en el intervalo considerado, y la definición de familias de
muestras representadas en formas de dendogramas. Las relaciones interparafinas
normalizadas, son las más concluyentes en la discriminación de familias de las muestras objeto
del estudio estadístico, estas serán las que se van a utilizar para definir las puntas de la estrella
en el diagrama estrella.
Estas relaciones al presentar mayor desviación estándar, permiten diferenciar
ampliamente entre muestras de una misma población. Con ello, es posible esquematizar los
crudos en grupos o diferenciarlos por compartimentos; a su vez, saber si hay continuidad o no
dentro de un yacimiento en un área determinada. Además, se lograra establecer posibles
diferencias, en familias de crudos y hasta posibles alteraciones en sus composiciones. Cabe
mencionar que es importante acompañar esta información con las diferentes disciplinas y
geociencias como, la geología, geofísica y petrofísica así como también, integrarlo con registros
de producción de pozos en los intervalos abiertos o diferentes sistemas de completaciones
mecánicas de pozos.
También, es importante analizar los diferentes métodos y técnicas utilizados para la
producción de petróleo, estudiarlo e integrarlo con la información de presiones de yacimientos
y los criterios preliminares, que han servido para diferenciar las áreas y yacimientos.
La Figura 49, muestra los arreglos geométricos de los diagramas polares, para cada una
de las muestras de los crudos captados en el Bloque VIII y Centro Lago. Estas diferencias son
atribuidas a las variaciones composicionales en la fracción de C15- de los fluidos de un
yacimiento y pueden indicar probables compartimientos en el o los yacimientos (Kaufman et
al., 1990; Hwang et al., 1994).
En la Figura 49 (Datos en Tabla A1.12, sección apéndice), se aprecia la diferencia entre
los diagramas estrellas, que presentan los crudos de los pozos CLA-096 y CLD-060 los cuales
pueden ser separados del resto de la población de crudos (CLD-046, CLD-053, CLD-054, CLD-
055), debido al contraste presente en ellos que claramente representan diferencias en su
composición.
Es importante observar la distribución areal a lo largo de la sección sísmica en la Figura
50, puesto que no hay eventos estructurales de gran magnitud, como pudieran ser las fallas
geológicas mostradas, es decir, estas no son tan contundentes como para representar un
carácter sellante y separar en grupos o familias a los crudos almacenados allí (CLD-046, CLD-
053, CLD-054, CLD-055), lo cual haga suponer una separación entre compartimientos en el
yacimiento estudiado.
Sin embargo, los crudos que presentaron mayores diferencias en el grupo analizado, se
encuentran en los extremos de la sección sísmica ( Figura 50). El pozo CLA-096, se ubica al Sur
del área, mientras el CLD-060 está más al Norte del área, cerca de una gran falla estructural,
que puede tener influencia en su diferenciación, la cual incluso pudiera servir como un medio
permeable de intercambio constante de fluidos, en comparación con los otros crudos que se
encuentran más al centro del área de análisis.
2 CLD0046
0
97 19 CLA0096
CLD0053
CLD0054
83 50
55
CLD0055
CLD0060

78 100 57

150

76 58

74 59

72 63

67 65

Figura 9. Diagramas polares para las muestras de crudos captados en Bloque VIII y Centro
Lago.
A continuación la integración de la sísmica con los diagramas polares de los diferentes
pozos, es plasmada en la Figura 50. En importante acotar, que en su mayoría este tipo de
pozos productores cretácicos, son completados a hoyo desnudo, ya que resultan
antieconómicos (menores tasas de producción) de completarse selectivamente. Además del
grado de complejidad mecánico que ello significa; dado que son bastante profundos, razón por
la cual se hace más difícil la perforación. Esto también complica o pone en desventaja este tipo
de análisis, ya que no se podría contar con crudos producidos individualmente de cada uno de
los yacimientos cretácicos (Formaciones Apón, Lisure y Maraca). Por cuanto, no se conocería un
patrón característico por yacimiento, y con ello diferenciar los diferentes crudos, producidos y
así poder hacer una estimación más precisa de cuáles son los intervalos o yacimientos con
mejores y mayores índices de producción. En consecuencia, resultados precisos para la
geoquímica de los crudos presentes en las formaciones Apón, Lisure o Maraca, se escapan del
alcance de este estudio.
CLD -53
CLA - 96 CLD -46 CLD - 54 CLD - 55 CLD -60
Figura 50. Línea sísmica cubriendo los pozos sobre los cuales se hizo la caracterización
geoquímica de fluidos, Bloque VIII y Centro Lago.
Conociendo que los pozos CLA-096 y CLD-046 presentan amplios intervalos cañoneados
(1101 y 750 pies respectivamente sin diferenciar yacimientos o grupo de ellos), esto interfiere
como se ha dicho con una mejor interpretación y diferenciación de los diagramas estrellas entre
los crudos producidos. Por otra parte, los intervalos cañoneados en el pozo CLD-060 en las
Formaciones (Apón, Lisure y Maraca; Grupo Cogollo) interceptan en profundidad al plano de la
falla (indicada con el número 3) en la línea sísmica mostrada en la Figura 50. La gran
proximidad del plano de la falla con respecto a los intervalos cañoneados, introduce
incertidumbres considerables en la interpretación geoquímica, porque; no hay certeza del
grado de sello que estas fallas puedan brindar. En resumen, es posible que exista comunicación
con otros intervalos o yacimientos, trayendo consigo hidrocarburos que se puedan mezclar con
los allí presentes.
Las evidencias obtenidas a través del uso de la fracción de C15- permiten inferir que la
falla (número 3) puede ser de carácter sellante (llámese limite o separación entre áreas o
yacimientos), dando origen a las variaciones composicionales del crudo producido en el pozo
CLD-060 con respecto al crudo producido en el resto de los pozos ubicados en el Bloque VIII
(CLD-046, CLD-053, CLD-054 y CLD-055).
Para los crudos procedentes de la U.E. Lagomar del Bloque I, también fueron
construidos los diagramas de huella digital, ellos son mostrados en la Figura 51 (Datos en Tabla
A1.13, sección apéndice), donde se observan diferencias en los pozos VLA-1402, VLA-0810 y
UD-0779, respecto a si mismos y a las muestras anteriormente discutidas del Bloque VIII y
Centro Lago (ubicados al sur de esta área).
2
0 UD0779
146 19
VLA0810
50
VLA1402
120 100
55

150

97 200 57

250

300

83 59

78 63

76 65

74 72

Figura 51. Diagramas de huellas digitales para las muestras de crudos en la U.E. Lagomar.

Al igual que para los pozos de los Bloques VIII y Centro Lago, los diagramas polares
fueron integrados a la línea sísmica en sentido norte-sur, mostrada en la Figura 52; acotando el
tope de la Fm. Apón como principal yacimiento productor en el área de la U.E. Lagomar, la cual
cubre los pozos de interés para el estudio geoquímico. De aquí, se observa que los pozos VLA-
1402 y VLA-0810, presentan similitudes composicionales en buena medida, al presentar una
forma similar de su diagrama estrella, para las relaciones de los compuestos indicados con los
números: 97, 83, 78, 76, 74, 72, 65, 63, 59, 57, 55, 19 (12 de las 15 relaciones), sin embargo,
queda muy claro que se puede diferenciar uno del otro, puesto que presentan picos resaltantes
de los diferentes compuestos, si además, con el pozo UD-0779 se denota una mayor diferencia,
siendo que estos pozos se encuentran en un mismo bloque o compartimiento, y la distancia
entre ellos es representativa y se evidencia su influencia con este tipo de análisis.
VLA-1402 VLA-810
UD-779

Figura 52. Línea sísmica en la U.E. Lagomar, con los pozos estudiados (VLA-1402, 0810 y UD-
0779).

Los pozos de la U.E. Lagomar, se caracterizan por presentar diferentes diagramas


estrellas. Es común en estos pozos (como en los anteriormente analizados), los amplios
intervalos cañoneados VLA-1402 (1713 pies), VLA-0810 (656 pies) y UD-0779 (1424 pies), lo cual
limita la realización de inferencias sobre la continuidad vertical, al no poder discretizar los
intervalos productores, recordando que probablemente hay diferentes yacimientos aportando
crudo a cada pozo.
Por otra parte, el VLA-1402 y VLA-0810 se encuentran separados geográficamente del
pozo UD-0779, a una distancia considerable (aproximadamente a 10 Km) lo cual limita la
aplicabilidad de la herramienta geoquímica de C15- para definir posibles barreras que impidan la
comunicación o establecer por el contrario indicios de algún tipo de continuidad lateral, así
como descartar posibles barreras estructurales o estratigráficas, importantes para establecer
diferentes compartimientos, entre el yacimiento o área de estudio, que a su vez, servirían para
establecer las reservas asociadas a un yacimiento en especifico, y distribuir los aportes por cada
intervalo o yacimiento productor, que permitirán el control y toma de decisiones sobre los
planes de perforación, completación, producción y por consiguiente de explotación.
También se observa en la línea sísmica mostrada en la Figura 52, la proyección de las
fallas indicadas con los números 1, 2 y 3, las cuales afectan los intervalos estratigráficos
productores en las Formaciones Apón, Lisure y Maraca, respectivamente. La presencia de estas
estructuras con un carácter sellante, puede explicar la diferenciación observada en la
composición de los crudos producidos de los pozos VLA-1402 y VLA-0810 ubicados al Norte, con
respecto al crudo perteneciente al pozo UD-0779 que se encuentra al Sur del área. De aquí, la
importancia de hacer mayores esfuerzos en este tipo de estudios, con la integración de mayor
numero de muestras en pozos productores en el área y/o vecinos a ellas.
CONCLUSIONES

 Se Logró identificar y definir el origen genético de los crudos, kerogeno tipo II y la


naturaleza de la roca madre “La Luna” predominantemente Carbonática hacia el Norte
con graduales cambios de facies Siliciclásticas o Lutiticas hacia el piedemonte de Los
Andes, con el uso apropiado de Biomarcadores.
 Se pudo visualizar las condiciones en las cuales fueron generados los crudos, en esta
área de la cuenca. Además, se determinó la existencia de crudos con diferentes niveles
de madurez térmica, indicios de diferentes tiempos de madurez (Cocinas Eocena y
Miocena-Reciente) y expulsión.
 Conociendo la Paleogeografía y paleoambiente depositacional de la roca madre (La
Luna), se tiene una idea mas clara de donde provienen los crudos derivados de las facies
más Lutitica y la más Calcárea. Con mayor detalle en cuanto a la geología del yacimiento,
se podría establecer rutas de migración, que permitirán postular posibles nuevos
yacimientos / áreas prospectivas.
 Se caracterizaron los crudos cretáceos de los campos Bloq. I y VIII utilizando las
fracciones livianas de hidrocarburos saturados (C15-). Con ello, se estableció sutiles
diferencias entre los crudos, que permiten distinguirlos unos de otros en una misma
área, yacimiento o compartimiento. Estas diferencias pueden atribuirse a que han sido
generados de distintas regiones de la Formación La Luna en la Cuenca.
 Se establecieron parámetros de correlación crudo-crudo (Ej: V/Ni), lo cual ha arrojado la
existencia de rocas madres comunes dentro de la Cuenca del Lago (Formación La Luna),
presentando diferencia de facies, siendo más continental (Plataforma interior con
influencia de clásticos del continente) hacia el Sur del Lago y un ambiente más marino
(Talud) hacia el Norte.
RECOMENDACIONES

 Seguir con estudios de este tipo a lo largo y ancho de todo el país, para en un futuro
tener mapas de geoquímica de crudos y con ello manejar mejor los diferentes campos
petrolíferos.
 Realizar mayores esfuerzos para hacer análisis geoquímicas más completos y modernos
en áreas de exploración en la actualidad e integrarlo a este tipo de estudio.
 Crear base de datos con los datos que se tienen hasta ahora, a fin de facilitar la
búsqueda de información, por parte de investigadores en el área.
 Integrar disciplinas de las diferentes ciencias y geociencias específicas, a fin de
mancomunar esfuerzos y obtener mejores resultados de las interpretaciones en los
diferentes ámbitos.
 Enlazar estos resultados con los estudios que se llevan actualmente en el proyecto del
Cretàceo, en curso en PDVSA.
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APÉNDICE A1

FUNDAMENTOS TEÓRICOS

GEOQUIMICA ORGANICA DEL PETROLEO

Se conoce con el término genérico de bitumen a aquellas sustancias naturales de


variable color, dureza y volatilidad, compuestas principalmente por los elementos carbono e
hidrógeno y casi siempre asociadas con materia mineral, en las cuales la fracción no mineral es
soluble en disulfuro de carbono. El petróleo es una forma de bitumen, constituida
principalmente por hidrocarburos. La palabra petróleo tiene sus raíces en los términos latinos
petra (roca) y oleum (aceite). Popularmente, se ha denominado como petróleo a cualquier
mezcla de hidrocarburos que puede ser producida a través de una tubería (Hunt, 1996).
El petróleo es uno de los más complejos y diversos materiales de interés geológico. Su
estado natural puede ser sólido, líquido ó gaseoso, dependiendo de la naturaleza y
concentración de los compuestos químicos que lo constituyen, junto con las condiciones de
presión y temperatura imperantes en su ambiente natural. Cuando está acumulado en
cantidades comerciales, el petróleo puede formar yacimientos de gas natural, de crudo o de
asfalto (Escobar y Galárraga, 1987).
Químicamente, el petróleo está definido como una mezcla de hidrocarburos y
compuestos orgánicos heteroatómicos, que contiene azufre, oxígeno, nitrógeno y trazas de
metales, principalmente vanadio y níquel (Tabla A1.1). La suma combinada de estos
heteroátomos rara vez excede un 10 % en peso del crudo total (Escobar y Galárraga, 1987).
Los hidrocarburos presentes en el petróleo pueden clasificarse en: saturados (Parafinas
normales, ramificadas y cíclicas), y aromáticos (bencenos y sus derivados policondensados con
o sin sustituyentes alquílicos) (Figura A1.1). Entre los principales compuestos que contienen
heteroátomos, se han identificado moléculas orgánicas sencillas, como benzotiofeno y sus
derivados, porfirinas metálicas y sustancias orgánicas complejas, de alto peso molecular y
estructuras aún no bien definidas, denominadas resinas y asfaltenos. Estos últimos dos grupos
de compuestos, están constituidos por núcleos poliaromáticos condensados, unidos por
cadenas las cuales pueden o no contener heteroátomos (Escobar y Galárraga, 1987).
Tabla A1.1 Composición elemental de crudos convencionales (Tomada de Hunt, 1996)

Elemento Concentración (% en peso)

Carbono 83-87

Hidrógeno 11-15

Azufre 0,1-6

Nitrógeno 0,1-1,5

Oxígeno 0,3-1,2

Vanadio 5-1300 ppm

Níquel 1-150 ppm

Figura A1.1 Tipos de hidrocarburos encontrados en el petróleo.

1..11

1..12 Clasificación de los crudos


La clasificación del petróleo se ha realizado atendiendo a las propiedades del crudo, las más
usadas son:
CLASIFICACIÓN SEGÚN LA GRAVEDAD API (U.N.I.T.A.R., 1982)

Se fundamenta en los valores de gravedad específica y viscosidad a temperatura


ambiente del crudo. De acuerdo a los datos, se tiene la siguiente clasificación:
 Crudos Convencionales: Desde 52,5° hasta 25,1° API (densidad <0,904 g/cc)

 Crudos Intermedios: Desde 25,0° hasta 20,1° API (0,904 < densidad < 0,934 g/cc)
 Crudos Pesados: Desde 20,0° hasta 10,0° API (0,934< densidad <1,000 g/cc)
 Crudos Extrapesados: Menores de 10,0° API (densidad > 1 ,000 g/cc, viscosidad máxima
de 10.000 cp)
 Arenas Bituminosas: Viscosidad mayor de 10.000 cp.

CLASIFICACIÓN DE CRUDOS SEGÚN SU COMPOSICIÓN (Tissot y Welte, 1984)

La clasificación por su composición puede ser establecida sobre la base de las cuatro
familias o grupos de compuestos químicos que lo conforman: hidrocarburos saturados,
aromáticos, resinas y asfaltenos (abreviados como S.A.R.A., por las iniciales de los mismos).
También toma en cuenta el contenido de azufre. De acuerdo a este criterio se tienen los
siguientes tipos:
 Crudos Parafínicos: Presentan una concentración de hidrocarburos saturados mayor del
50%, incluyendo principalmente alcanos normales e isoalcanos y menos de 1% de
azufre.
 Crudos Nafténicos o Asfálticos: Incluyen una concentración de más de 50% de
hidrocarburos saturados, un porcentaje de naftenos mayor del 40%, y menos del 1% de
azufre. Esta clase incluye crudos degradados, los cuales generalmente contienen menos
del 20% de n-alcanos e isoalcanos.
 Crudos Parafínicos-Nafténicos: Poseen porcentajes moderados de resinas más
asfáltenos (generalmente 5-15%), además presentan una concentración de
hidrocarburos saturados mayor del 50%, conteniendo tanto alcanos normales como
cicloalcanos y un porcentaje de azufre menor de 1%.
 Crudos Aromáticos- Intermedios: Contienen menos de 50% de hidrocarburos
saturados; el contenido de aromáticos, resinas y asfaltenos sobrepasa el 50%; estos
crudos presentan una concentración de n-parafinas menor del 10% y generalmente más
del 1% de azufre.
 Crudos Aromáticos-Nafténicos: Presentan concentraciones de hidrocarburos nafténicos
mayor del 25 %, menos del 50 % de hidrocarburos saturados, menos de 1 % de azufre y
además presentan menos del 10 % de n-parafinas.
 Crudos Aromáticos-Asfálticos: Presentan un porcentaje de hidrocarburos saturados
menor de 50 %, menos de 10 % de n-parafinas, menos de 25 % de nafténicos y más del 1
% de azufre.

ORIGEN Y GENERACIÓN DE LOS HIDROCARBUROS

La gran diversidad de compuestos orgánicos y organometálicos que constituyen el


petróleo, hace imposible pensar en un mecanismo sencillo para explicar el origen de un
material tan variado y complejo. Las teorías para explicar el origen del petróleo, pueden ser
divididas en dos grandes grupos, fundamentándose esta división en la naturaleza del material
de partida. Así, se habla del origen inorgánico o abiogénico y del origen orgánico o biogénico
del petróleo (Escobar y Galárraga, 1987).
La teoría inorgánica supone que los hidrocarburos se originaban de la reducción del
carbono ígneo o metamórfico, o sus formas oxidadas a elevadas temperaturas, este proceso se
originaba en estratos profundos (Dott, 1969; Escobar y Galarraga, 1987).
La teoría orgánica supone un origen a partir de la materia orgánica depositada,
diseminada y preservada conjuntamente con los sedimentos de grano fino y/o lodos
carbonáticos, en un ambiente sedimentario de baja energía, el cual es esencialmente anóxico.
Posteriormente la alta temperatura, la profundidad de enterramiento de los sedimentos y el
medio ambiente que los rodea permiten su transformación en hidrocarburos (Tissot y Welte,
1984; Hunt, 1996). Estudios sistemáticos realizados en las últimas décadas sobre muestras de
sedimentos recientes, rocas sedimentarias y crudos, han apartado un gran número de
evidencias geológicas y geoquímicas que favorecen un origen del petróleo a partir de
materiales orgánicos biológicos (Tissot y Welte, 1984; Haun, 1974a y b), entre las cuales
destacan las siguientes:
 La asociación general con las rocas sedimentarias.
 La presencia de pequeñas cantidades de hidrocarburos en organismos vivientes.
 La presencia de componentes biológicamente biosintetizados (biomarcadores)
en el petróleo.
 La actividad óptica del petróleo.
 Las similitudes de las relaciones de isótopos estables de carbono entre la materia
orgánica y el petróleo.

MATERIA ORGANICA
La materia orgánica es suministrada a la cuenca en forma de partículas coloidales (vivas
o muertas) o en solución acuosa. Este material puede ser autóctono del ambiente de
depositación (proviene de la columna de agua suprayacente o directamente del sedimento
donde se acumula) o, alóctono (se origina en otro medio); el medio puede ser óxico, anóxico o
disóxico.
La materia orgánica sedimentada pertenece a dos tipos:

1..13 Materia Orgánica Húmica

Proviene principalmente de plantas continentales, generalmente se incorpora a los


sedimentos bajo condiciones oxidantes. Consiste de esporas transportadas por el viento, polen,
resinas, ceras, otros restos orgánicos y material leñoso derivado de plantas superiores (troncos,
hojas, etc.) transportado a las cuencas por ríos o por descargas submarinas. Este material
sedimentado, puede ser retrabajado por bacterias, hongos u organismos bentónicos marinos,
cuyos residuos metabólicos son un aporte adicional a la materia orgánica en sedimentos (Hunt,
1979).
La degradación biológica de estos restos de plantas y animales es catalizada por
microorganismos y genera sustancias húmicas, productos que, junto con la biomasa bacteriana
muerta, tiende a asociarse en estructuras químicas complejas (geopolímeros). Las sustancias
húmicas son una mezcla de numerosos compuestos que pueden variar en su composición, pero
que tienen características de solubilidad similares. Bajo este contexto, las sustancias húmicas se
clasifican en ácidos húmicos, ácidos fúlvicos y huminas. La materia orgánica depositada en
suelos y en sedimentos recientes que es insoluble en hidróxido de sodio se denomina humina;
la fracción que precipita al adicionar ácido clorhídrico a la solución anterior (hasta pH = 2) se
conoce como ácidos húmicos y el material orgánico que permanece aún en solución, se
denomina ácidos fúlvicos (Schnitzer y Khan, 1972; Tissot y Welte, 1984).
La importancia de las sustancias húmicas en la geoquímica del petróleo, radica en que
han sido propuestas como un paso intermedio en las transformaciones de las moléculas
vivientes al kerógeno, por lo cual se puede considerar a la humina como precursor del kerógeno
(Tissot y Welte, 1984; Hunt, 1996).

1..14 Materia Orgánica Acuática o sapropélica

Proviene de plantas y organismos marinos o lacustres, generalmente es enterrada bajo


condiciones anaeróbicas por lo que sobrevive a la destrucción de los microorganismos.
En general, las aguas marinas contienen en la región eufótica un 95% de su biota en
forma de zooplancton y fitoplancton, y su productividad biológica está controlada por la luz,
temperatura y composición del agua de mar (Tissot y Welte, 1984). Los principales productores
de materia orgánica entre los componentes del fitoplancton, son las diatomeas unicelulares con
un esqueleto silíceo, presentes principalmente en zonas templadas y frías; las peridíneas con
esqueleto algal y las cocolitóforas con un esqueleto calcáreo, ambas típicas de aguas tropicales,
(Hunt, 1996).
Existe un tercer tipo de material alterado (reciclado) denominado "inertinita",
prácticamente son partículas de "carbón muerto" que no son afectadas por la temperatura y no
producen petróleo ni gas. La inertinita está constituida por huesos de mamíferos, algunas ceras
y resinas de alto peso molecular (tipo ámbar) y una pequeña fracción de tejidos vegetales muy
oxidados y restos de hongos (Hunt, 1996).

MEDIO AMBIENTE DE DEPOSITACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA

El medio ambiente adecuado para la depositación de la materia orgánica está


restringido a lugares acuáticos. Los ambientes marinos y lacustres fueron definidos como
óxicos, dióxicos y anóxicos según los biólogos Rhoads y Morse (1971). Esta clasificación
depende del contenido de oxígeno como se ve en la Tabla A1.2. Los microorganismos que viven
en estos medios ambientes se llaman aeróbicos, disaeróbicos y anaeróbicos respectivamente.
Éstos necesitan de cierta cantidad de oxígeno para sobrevivir; entre los organismos aeróbicos
se tiene a los bénticos, de características aeróbicas; los disaeróbicos necesitan menos oxígeno
para vivir y los anaeróbicos viven sólo en sistemas donde hay ausencia de oxígeno. Dentro de
estos organismos puede mencionarse a las bacterias sulfato reductoras, quienes reducen los
iones sulfato del agua de mar para obtener el oxígeno requerido para realizar sus procesos
metabólicos (Hunt, 1996).

Tabla A1.2 Contenido de Oxígeno en el Agua en Medio Ambiente Marino y Lacustre.


(Tomado de Tyson y Pearson., 1991)

Oxico Dióxico Anóxico


Contenido de O2/H2O
02> 1 0, 1 <02< 1 02<0,1
MI/I

La energía del medio es un parámetro muy importante. Regímenes altos en energía,


conducen más bien a un evento de erosión, en lugar de depositación, o a la acumulación de
sedimentos de grano grueso. Estos últimos no permiten la retención de partículas orgánicas de
baja densidad, y a su vez favorecen una amplia difusión de oxígeno, promoviendo la oxidación
del material orgánico acumulado. Por otra parte, si el nivel de energía es muy bajo,
prácticamente no hay aportes de sedimentos (y materia orgánica) al medio. La situación ideal,
comprende un balance entre un régimen de baja energía que permita la depositación
simultánea de partículas de sedimento del tamaño de arcilla y materia orgánica, y una
velocidad de sedimentación no muy alta, que evite la dilución de la materia orgánica por
sedimentos inorgánicos (Tissot y Welte, 1984).
La adición de minerales de diámetro reducido, particularmente de partículas finas de
minerales de arcilla, a una columna de agua con materia orgánica disuelta o en partículas,
puede promover la adsorción de aminoácidos, azúcares, sustancias fenólicas, etc., sobre la
superficie de estos minerales, conduciendo a fenómenos de coprecipitación y floculación. Estos
procesos favorecen la incorporación de las sustancias orgánicas disueltas o en partículas, a la
columna sedimentaria (Tissot y Welte, 1984).
Otro aspecto importante, es que la depositación de sedimentos de grano fino limita el
acceso del oxígeno molecular disuelto, favoreciendo la preservación de la materia orgánica. Los
microorganismos presentes en estos medios consumen rápidamente el oxígeno disponible, y se
establecen condiciones anaeróbicas (Eh < 100 mV), donde eventualmente se producirá H 2S (Eh
<0 mV), por la acción de bacterias anaeróbicas reductoras del ión sulfato presente en las aguas
del mar. Todo esto conduce a un ambiente sedimentario donde se establece una columna de
agua estratificada, en la cual el oxígeno está restringido a los niveles superficiales iluminados
(zona eufótica), mientras que las aguas del fondo están saturadas con H 2S (Tissot y Welte,
1984).

PRESERVACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA

La preservación de la materia orgánica en los sedimentos, difiere según su ambiente de


depositación. En medios marinos, donde un 95% de la productividad primaria proviene del
fitoplancton, la mayoría de la materia orgánica detrítica (muerta) es reciclada por organismos
pelágicos (que nadan o flotan cerca de la superficie). La pequeña porción que alcanza el fondo,
es en su mayor parte retrabajada por organismos bénticos (que viven sobre o dentro del
sedimento), los cuales se alimentan de detritos orgánicos. Sólo una fracción insignificante del
material muerto, bajo las condiciones físico químicas apropiadas, es capaz de ser preservada e
incorporada a los sedimentos, formando depósitos ricos en carbono orgánico. Se ha estimado
que la velocidad de acumulación del carbono orgánico en los sedimentos, está en el orden de
4x106 ton./año, lo cual permite calcular que solo un 0,01% de la productividad primaria neta
marina, es preservada anualmente. Comparando con medios continentales, prácticamente toda
la materia orgánica depositada en los suelos es descompuesta y reciclada, y las acumulaciones
están esencialmente restringidas a los depósitos de turba en pantanos, así como algunas capas
ricas en carbono orgánico que se observan en ciertos sedimentos lacustres. Sin embargo, los
lagos y pantanos contienen un volumen de agua muy pequeño comparado con el de los
océanos, por lo que puede concluirse que la mayor parte de la preservación del carbono
orgánico en la corteza terrestre ocurre en los sedimentos marinos (Killops y Killops, 1993).
El contenido de carbono orgánico en un sedimento refleja la influencia de factores que
aumentaron o preservaron la materia orgánica o bien, de aquellos con tendencia a destruir o
diluir dicha materia. Los factores que tienden hacia el aumento son: mayor cantidad de
material orgánico sedimentario, bajo contenido de oxígeno en el agua, incluida la intergranular
del sedimento, sedimentación lenta, baja actividad microbiana y preponderancia de grano fino
en las rocas. Las que favorecen la disminución de material orgánico son: bajo nivel de
sedimentos orgánicos, alto porcentaje de sedimentación inorgánica, alto contenido de oxígeno
en el agua, fuerte actividad bacteriana, y grano grueso de los sedimentos.
Estos factores no actúan independientemente sino que varían con los distintos
ambientes sedimentarios; los tipos de organismos también cambian entre diferentes ambientes
y su aporte bioquímico a los sedimentos también varía. Los procesos que degradan o destruyen
la materia orgánica tampoco son uniformes; ciertas sustancias como las proteínas y azúcares
son destruidas con relativa facilidad, otras como los lípidos y ligninas son resistentes y por ello,
tanto la composición y concentración de la fracción de la materia orgánica del sedimento varía
con el ambiente.

ETAPAS DE TRANSFORMACIÓN DE LA MATERIA ORGÁNICA


Un esquema general de evolución de la materia orgánica, desde su depositación hasta el
comienzo del metamorfismo, debe considerar los siguientes pasos: diagénesis, catagénesis y
metagénesis (Figura A1.2) (Tissot y Welte, 1984).
Figura A1.2 Esquema general de evolución de la materia orgánica, desde su depositación
hasta el comienzo del metamorfismo (tomado de Tissot y Welte, 1978)

1..15 Diagénesis

Es el proceso a través del cual el sistema bajo consideración tiende a alcanzar un


equilibrio bajo condiciones de soterramiento somero y mediante el cual los sedimentos se
consolidan formando rocas (Tissot y Welte, 1984); la temperatura se mantiene por debajo de
50°C, produciendo decarboxilación, desaminación, polimerización y reducción, siendo el
principal agente de transformación la actividad bacteriana.
Los sedimentos depositados en un medio subacuático, contienen gran cantidad de agua
(la porosidad es mayor del 80% en lodos arcillosos a 5 cm. de profundidad, y el agua representa
el 60% del peso total del sedimento), minerales, materia orgánica muerta, (autóctona y
alóctona, así como materiales retrabajados) y numerosos microorganismos. Tal mezcla proviene
de varios procesos sedimentarios y de componentes primarios de diferentes orígenes (Tissot y
Welte, 1984).
Durante la diagénesis temprana, el principal agente de transformación del sistema es la
actividad microbiana. Los microorganismos aeróbicos que viven en los estratos superiores de
los sedimentos consumen el oxígeno libre. Los organismos anaeróbicos reducen los iones
sulfato para obtener oxígeno requerido para sus procesos metabólicos (Tissot y Welte, 1984).
La energía necesaria para llevar a acabo estas reacciones, es proporcionada por la
descomposición de la materia orgánica, en cuyo proceso esta última es convertida en dióxido
de carbono, amoniaco y agua. La eficiencia de esta conversión usualmente es alta en
sedimentos tipo arenas, donde la circulación del agua es favorable, pero es bastante baja en los
limos y lodos. Al mismo tiempo, el potencial de óxido-reducción (Eh) decrece abruptamente y el
pH se hace ligeramente alcalino. Ciertos minerales como la calcita (CaCO3) y el cuarzo (SiO2)
pueden disolverse, alcanzar la saturación y reprecipitar, junto con minerales autígenos como los
sulfuros de hierro, cobre, plomo, zinc y la siderita (Tissot y Welte, 1984).
Dentro del sedimento, la materia orgánica también avanza hacia condiciones de
equilibrio termodinámico. Los biopolímeros que constituyen los organismos vivientes (proteínas
y carbohidratos) son destruidos a monómeros por la actividad bacteriana durante la
sedimentación y la diagénesis inicial. Posteriormente, sus constituyentes se van
progresivamente insertando dentro de nuevas estructuras policondensadas (geopolímeros) que
son precursores del kerógeno. De modo análogo al estudio de la materia orgánica en los suelos,
se postula que estos geopolímeros evolucionan desde ácidos fúlvicos a ácidos húmicos y
finalmente a huminas, incrementando su complejidad estructural y grado de polimerización, y
disminuyendo su concentración de grupos funcionales hidrolizables. En aquellas situaciones
naturales en las que el volumen de depositación de la materia orgánica derivada de plantas
superiores continentales, predomina en comparación con la contribución de la materia mineral
inorgánica, se forma una acumulación especial denominada turba, la cual evoluciona
posteriormente a carbón marrón (lignito y carbón bituminoso). En todos los casos, el
hidrocarburo más abundante formado durante la diagénesis es el metano, aunque en la etapa
de la diagénesis final, la materia orgánica puede producir CO2, H2O y algunos compuestos
heteroatómicos pesados (Tissot y Welte, 1984).
El punto final de la diagénesis de la materia orgánica sedimentaria, se establece por
conveniencia en aquel nivel donde los ácidos húmicos extraíbles de los sedimentos, se han
reducido a su mínima expresión, y en donde la mayoría de los grupos funcionales carboxílicos
de la materia orgánica han sido removidos. Esto es equivalente al límite entre el carbón marrón
(sub-bituminoso) y carbón duro (bituminoso de alto volátil), y corresponde a un valor de
reflectancia de la vitrinita de aproximadamente 0,5 % (Tissot y Welte, 1984).

1..16 Catagénesis

Durante la catagénesis, la materia orgánica está expuesta a incrementos de la


temperatura, la cual varía entre 50°C (122°F) y 200°C (392°F), y altas profundidades de
enterramiento, estos incrementos de temperatura y presión colocan de nuevo al sistema fuera
de equilibrio termodinámico, trayendo como consecuencia la producción de nuevos cambios
químicos y físicos lo cual generará la degradación térmica del kerógeno para producir
hidrocarburos bajo condiciones reductoras.
En esta etapa se produce la "ventana de petróleo" o "zona principal de génesis del
petróleo". La ventana de petróleo es el intervalo de profundidad dentro del cual la roca fuente
genera y expulsa la mayor parte del crudo (petróleo líquido) (Hunt, 1996).

1..17 Metagénesis

Esta es la última etapa en la alteración térmica de la materia orgánica. Durante esta


etapa, los cambios en el kerógeno son bastante simples y las temperaturas dominantes son
mayores a 200-250°C (392-482°F). La producción de metano disminuye y se da comienzo a la
generación de un material rico en carbono que es precursor del grafito (Hunt, 1996).
Durante esta etapa los minerales son severamente transformados; por ejemplo, los
minerales de arcilla pierden el agua intersticial, obteniendo un mayor grado de cristalinidad; los
óxidos de hierro que contienen agua estructural (goetita), cambian a óxidos sin agua
(hematita), etc. Ocurren eventos severos de presión-disolución y la roca sufre un alto grado de
recristalización, formándose por ejemplo una cuarcita a partir de una arenisca cuarzosa. Las
rocas alcanzan condiciones de temperatura que conducen a la metagénesis del kerógeno
(Tissot y Welte, 1984).

KERÓGENO

La materia orgánica preservada es frecuentemente designada con el nombre de


kerógeno, el cual no es aplicable a toda la materia orgánica sedimentada, sino a aquella que ha
sido convertida por procesos bacterianos y químicos, durante el soterramiento, en un polímero
complejo, de alto peso molecular, con bajo contenido de nitrógeno y oxígeno y además
insoluble en solventes alcalinos acuosos o en solventes orgánicos comunes (Durand, 1980); el
resto de la fracción extraíble con solventes orgánicos se conoce como bitumen (material
orgánico soluble en solventes orgánicos) y representa entre el 1 y el 20 % de la fracción
orgánica. (Hunt, 1979; Tissot y Welte, 1984). Existen tres tipos de kerógeno:

1..18 Kerógeno Tipo I


Rico en macerales del grupo de las liptinitas (alginitas o material amorfo derivado de
restos de bacterias), y con un potencial generador de petróleo alto. Presenta valores de la
relación atómica H/C inicialmente altos (1,5 ó más) y valores O/C bajos (menores de 0,1). Este
tipo de kerógeno consta de mucho material lipídico, particularmente con cadenas alifáticas
largas.

1..19 Kerógeno Tipo II

Se encuentra frecuentemente en muchas rocas madres y en lutitas petrolíferas, siendo


el más común en la naturaleza. Generalmente está relacionado con sedimentos marinos, en
donde la materia orgánica autóctona, derivada de una mezcla de fitoplanton, zooplanton y
materia orgánica bacterial, ha sido depositada en un ambiente reductor. Exhibe valores de la
relación atómica H/C relativamente altos, aunque inferiores al del tipo I, y valores de O/C bajos.
El azufre también puede estar presente en cantidades considerables, formando parte de
sistemas cíclicos y posiblemente también como enlaces sulfuro. En aquellos casos donde el
azufre es abundante (8 a 14% en peso de S orgánico) y la relación atómica S/C es mayor que
0,04 se habla de kerógeno tipo II-S.

1..20 Kerógeno Tipo III

Se refiere al kerógeno del tipo vitrinita, con valores de la relación atómica H/C
inicialmente bajos (usualmente menores de 0,1) y un valor de O/C inicial alto (entre 0,2 y 0,3).
Este tipo de kerógeno es comparativamente menos favorable para la generación de crudo que
los tipos I y II, aunque puede producir cantidades importantes de gas, particularmente metano
si es proveniente de plantas superiores continentales y contiene muchas partículas vegetales
identificables al microscopio.

ROCA MADRE

Una roca madre está definida como una roca sedimentaria que posee la cantidad y el
tipo de materia orgánica aptos para producir petróleo aunado a la capacidad de generar y
expulsar suficiente cantidad de hidrocarburos para formar una acumulación de petróleo o gas.
Una roca madre potencial es aquella que es inmadura para generar petróleo en su
ambiente natural pero formará significantes cantidades de petróleo cuando la temperatura
aumente durante el soterramiento de la misma. Una roca madre efectiva es aquella que ha
formado y expulsado petróleo hacia un yacimiento. Esta puede ser activa (expulsando
actualmente) o inactiva (por ejemplo a causa de su levantamiento por erosión o enfriamiento).
Las técnicas para reconocer rocas madres han sido desarrolladas midiendo la cantidad, calidad y
nivel de maduración de la materia orgánica en rocas asociadas con producción de petróleo. Las
correlaciones roca madre-petróleo ayudaron a establecer que una roca madre lía producido y
expulsado petróleo hacia una roca yacimiento (Hunt, 1996).
Las rocas madres no se forman en regímenes de alta energía donde los granos gruesos
clásticos son depositados (por ejemplo, arenas silíceas u oolitas calcáreas) o donde los arrecifes
crecen. Las rocas madres generalmente se forman de sedimentos de grano fino (arcillas y
marga) en medio ambientes de baja energía donde los sedimentos orgánicos son depositados y
preservados. Las rocas ricas en materia orgánica son de color gris oscuro, negro o marrón
chocolate, reflejando su relativamente alta razón volumétrica de materia orgánica sobre los
minerales (Jacobson, 1991).
Para la evaluación de una roca madre con potencial de generación de petróleo es
importante tener en cuenta tres factores: tipo de materia orgánica, cantidad de materia
orgánica y maduración térmica (Durand, 1980; Tissot y Welte, 1984).
Los niveles mínimos de concentración de materia orgánica, en términos del tenor en
carbono orgánico de la roca madre, han sido considerados por numerosos autores (Ronov,
1958 y Gehman, 1962 en Tissot y Welte, 1984). Se ha escogido, de modo empírico, valores de
concentración de carbono orgánico en el orden de 0,3% en peso para calizas y 0,5% en lutitas;
estos valores representan niveles mínimos de kerógeno necesarios para generar una
concentración de hidrocarburos suficiente como para que sea posible su expulsión de la roca
madre.
El tipo de materia orgánica más adecuado para la generación de petróleo es estimado a
través del análisis elemental del kerógeno. La clasificación más utilizada a estos fines es la de
Van Krevelen, 1950, 1984; en Tissot y Welte, 1984. El kerógeno más apto para la generación de
crudo, es aquel que presenta una relación atómica H/C alta (1,3-1,6) y O/C baja (0,15-0,20).
La madurez de una roca madre está referida al estado evolucionario del kerógeno. Las
transformaciones del mismo en petróleo están controladas principalmente por temperatura,
presión e interacciones con la matriz inorgánica. El kerógeno puede ser visualizado como una
mezcla de núcleos aromáticos, enlazados químicamente por intermedio de una matriz
parafínica, rica en hidrógeno. (Durand, 1980).
La literatura de geoquímica orgánica presenta varios métodos para la determinación del
nivel de madurez térmica del kerógeno, en función del comienzo, máximo y final de la
"ventana del petróleo" o "zona principal de formación del petróleo" (Tissot y Welte, 1984). Los
más utilizados en la actualidad son la reflectancia de la vitrinita (Rm) y el "Índice tiempo-
temperatura" (TTI= Time - Temperature Index).
La vitrinita (Van Krevelen, 1961) es un maceral derivado de tejidos de plantas
superiores. Las medidas de reflectancia de vitrinita se realizan generalmente a través de un
microscopio provisto de un fotómetro de Berek (Hoffmann y Jenkner, 1932 en Escobar, 2003) y
un objetivo de inmersión en aceite, utilizando secciones pulidas de rocas.
La maduración del kerógeno se refleja en un aumento en el ordenamiento de los
macerales, a medida que la matriz parafínica del mismo, reacciona para formar petróleo. Por
correlaciones con otros parámetros de maduración de la roca madre, y a través de estudios
experimentales, se ha determinado valores de Rm entre 0,5-0,7 y 1,3% para los límites de la
ventana del petróleo (Tissot y Welte, 1984). Estos son valores generalizados, que dependen
esencialmente de la estructura y composición química del kerógeno.
El método TTI (Waples, 1980) considera los efectos combinados de tiempo y
temperatura en el establecimiento de la madurez del kerógeno. La implementación del modelo
requiere de la reconstrucción de la historia de soterramiento, junto con perfiles de
paleotemperaturas, para cada roca madre potencial. La relación tiempo-temperatura se
establece sobre la base de suponer una cinética de primer orden para las reacciones de
transformación del kerógeno en petróleo y kerógeno más maduro. Por calibración con otros
parámetros de maduración de rocas madres, Waples reporta valores de TTI= 15, 75 y 160,
respectivamente, para el comienzo, máximo y final de la ventana del petróleo.

MIGRACION DEL PETROLEO


La sumatoria de eventos que transcurren desde la generación de fluidos orgánicos por
parte del kerógeno, hasta la formación de un yacimiento de crudo o de gas, ha sido englobada
bajo el nombre genérico de migración (Figura A1.3). La migración comprende el proceso de
transporte del petróleo, desde la roca madre, hasta su lugar de acumulación (Tissot y Welte,
1984).
La migración de hidrocarburos es un proceso que se lleva a cabo debido a la generación
térmica de líquidos, gases y CO2 creando presiones internas de restauración que producirán
microfracturas, cuando estas sean mayores que el gradiente de fractura de la roca madre, lo
cual produce un incremento de la permeabilidad.
Los factores que controlan la dirección del movimiento de los fluidos fuera de la roca
madre son la existencia o desarrollo de patrones de fracturas, más los cambios químicos que
influyen en la permeabilidad (presión en solución, disolución, recristalización y cementación),
creando caminos y sellos. La migración primaria es impulsada principalmente por la generación
de petróleo (Hunt, 1996).

Figura A1.3. Migración del petróleo. (Tomada de Tissot y Welte, 1984)

El proceso de migración fuera de la roca madre está relacionado con la porosidad y


permeabilidad de la roca madre, Hall et al. (1986) encontraron que en lutitas con una porosidad
de 5% hasta 10% en la ventana de generación de petróleo, el diámetro medio de poro es mayor
de 5 nm. Sin embargo, una evaluación de las medidas por diferentes técnicas indicaron que una
cantidad importante de la porosidad total esta constituida por microporos y ultramicroporos
(diámetro < 2 nm), los cuales están por debajo del intervalo de medición de las técnicas.

La permeabilidad promedio de las rocas madres varía entre 10 -3 y 10-11 darcys, siendo
estas condiciones muy drásticas como para que migren los hidrocarburos generados, pero las
microfracturas creadas son lo suficientemente permeables (permeabilidad = (ancho de la
fractura)3) para permitir el flujo hacia la roca yacimiento, pero a su vez la baja porosidad que
rodea la microfractura actúa como un colador molecular, es decir, las moléculas más grandes se
quedan atrapadas en el espacio poral. En la Tabla A1.3 se muestra el diámetro molecular de
algunas moléculas en el yacimiento, a fines de su comparación con las permeabilidades posibles
en rocas madres. (Hunt, 1996).

Tabla A1.3 Diámetro Efectivo de las Moléculas de los Fluidos del Yacimiento.
(Tomado de Tissot y Welte, 1972)
Molécula Diámetro (nm)
Agua ~0,3
Metano 0,38
n-alcanos 0,47
Ciclohexano 0,48
Estructuras complejas de anillos 1-3
Moléculas de asfaltenos 5 - 10

1..21 Migración Primaria

La migración primaria es el proceso mediante el cual el bitumen (materia orgánica


soluble en solventes orgánicos) abandona la roca madre hasta alcanzar conductos más
permeables
La migración primaria del petróleo en una roca madre con un contenido de Carbono
Orgánico Total (COT) de 2% o más ocurre inicialmente en forma de un bitumen que absorbe
agua y se expande hacia los microporos y entre la separación de los planos de los estratos para
formar un bitumen saturado con agua, luego, el bitumen se mezcla con gas (CH 4 + CO2) del
kerógeno y migra hacia la roca almacén como una mezcla de petróleo y gas. Esto puede ocurrir
como una fase simple o separada, dependiendo de las condiciones de presión y temperatura
(Hunt, 1996).
Los mecanismos de migración primaria han sido englobados dentro de dos tipos
principales. Uno de ellos depende del agua para mover el petróleo en la roca madre, mientras
que el otro mueve al petróleo en una fase orgánica independiente de cualquier movimiento del
agua asociada (Jones, 1981). El primer tipo incluye la disolución molecular del crudo o gas en
agua, la disolución micelar o coloidal, la formación de emulsiones y la difusión. El segundo tipo
comprende una fase orgánica separada de crudo o de gas, así como la disolución de crudo en
gas, o de gas en crudo. Actualmente se piensa que los mecanismos más probables para explicar
la migración primaria, son aquellos que involucran una fase orgánica continua (Tissot y Welte,
1984; Hunt, 1996). Dentro de las razones propuestas para justificar tal aseveración, puede
mencionarse que la formación del petróleo tiene lugar esencialmente a profundidades en las
que la mayor parte del agua presente originalmente en los sedimentos, ya ha sido expulsada.

1..22 Migración Secundaria

Se ha definido como el movimiento de los componentes del petróleo a través de rocas


yacimiento permeables y rocosas cuyos poros están originalmente saturados con agua. La
presencia de fracturas en estas, conocidas bajo el nombre genérico de fallas o diaclasas, puede
en algunos casos facilitar este proceso (Tissot y Welte, 1984; Schowalter, 1979).
Bajo condición hidrostática, la migración secundaria depende básicamente de un
compromiso entre dos fuerzas; la propiedad de los hidrocarburos de flotar en un medio acuoso,
debido a su menor densidad (flotación), y la presión capilar. Esta ha sido definida, para el caso
de un fluido atravesando un poro, como la diferencia de presión entre las dos fases petróleo-
agua. Depende de la tensión interfacial entre las fases (petróleo-agua), el radio del orificio del
poro de la roca, y la humectabilidad. Este último termino se define como el trabajo necesario
para separar un fluido de un sólido, lo cual es función de la energía interfacial combinada de los
sistemas petróleo-agua, petróleo-roca y agua- roca (Schowalter, 1979).

En general, el proceso de migración promueve una serie de cambios en la composición


de los fluidos orgánicos móviles, cambios promovidos por segregación gravitacional
(Silverman, 1965 en Escobar, 1988), ya que las moléculas pesadas viajan con mayor lentitud, o
por geocromatografía (Seifert y Moldowan, 1981) o cromatografía natural (Chakhmakhchev et
al., 1983; Leythaeuser et al., 1982; Vanderbroucke et al., 1983 en Escobar, 1988), por retención
selectiva de moléculas heteroatómicas con grupos funcionales polares, los cuales interactúan
con la superficie de las arcillas. La parte no polar del crudo también puede ser alterada. Con el
aumento en la distancia de migración, el máximo en la curva de distribución de n-alcanos por
cromatografía de gases, es desplazado hacia parafinas con menor número de átomos de
carbono (Waples, 1981). Además, las relaciones saturados/aromáticos y alcanos
normales/cicloalcanos pueden aumentar con el incremento en la distancia de migración
(Vanderbroucke, 1983).
La migración secundaria culmina con la formación de campos petroleros, pero eventos
tectónicos tales como fallamiento, plegamiento o levantamiento, pueden producir
redistribuciones de llenado de petróleo y gas, iniciando una fase adicional de migración
secundaria. Cuando este fenómeno produce una nueva acumulación, se llama remigración o
migración terciaria (Tissot y Welte, 1984).

ACUMULACIÓN DEL PETROLEO

Los requisitos geológicos para la acumulación del petróleo son: un cuerpo de roca
porosa y permeable (roca yacimiento) y una roca impermeable, denominada sello. En conjunto
constituyen una trampa que permite que el petróleo se acumule en el espacio intergranular
(poros) de la roca yacimiento la originalmente tienen agua intersticial (Cohem, 1998).
Una trampa constituye una barrera geológica a la migración del petróleo, y está
representada por un estrato de roca impermeable (y geometría apropiada), o alguna falla
sellada, los cuales impiden el movimiento del petróleo en ese punto.
La formación de una trampa se debe a movimientos terrestres tectónicos los cuales
producen plegamiento, fracturas, en una misma o varias etapas, o por transformaciones
estratigráficas (cambio de facies). También se puede encontrar petróleo en lutitas fracturadas,
pero este caso no es muy común. Ocasionalmente las rocas ígneas y metamórficas son
almacenadoras de cantidades comerciales de petróleo, sólo si se localizan próximas a una
secuencia sedimentaria de petróleo (Tissot y Welte, 1984).
En el curso de la migración, el petróleo se acumula en la primera trampa encontrada,
donde el gas, crudo y agua se separan atendiendo a sus densidades relativas. La acumulación
progresiva de crudo y gas, desplaza al agua originalmente presente en los poros de las rocas
que constituyen la trampa. Cuando la trampa está llena de hidrocarburos, y la superficie de
contacto agua-crudo sobrepasa el punto de saturación, el crudo sigue su camino ascendente y
alcanza una segunda trampa. Pero el gas situado en la primera trampa por encima del crudo,
continua acumulándose en esta, por lo que eventualmente expulsará todo el crudo, y el gas
que alcance posteriormente a la primera trampa (gas sobrante) proseguirá su ruta hacia la
segunda trampa, repitiéndose el proceso. Esto implica que, en una región donde existan varias
estructuras sucesivas, desde el centro de la cuenca (más profundas) hacia los márgenes (cada
vez menos profundas), y donde los desplazamientos del petróleo no están impedidos por
movimientos de aguas subterráneas, se tendrá que las trampas más profundas serán gasíferas,
las más alejadas, productoras de petróleo, y las más altas, en las proximidades del borde de la
cuenca, únicamente acuíferas (Gussow, 1954).
La mayoría de las acumulaciones de petróleo se encuentran en rocas clásticas o
detríticas, incluyendo areniscas y limolitas (altamente silíceas, conteniendo principalmente
cuarzo), arcosas (arenisca derivada de granito, principalmente conteniendo cuarzo, feldespato y
mica) y grauvacas (arenisca con partículas oscuras en forma de matriz, derivadas de rocas
ígneas de grano fino). Las trampas en rocas elásticas, probablemente comprenden más del 60%
de todas las acumulaciones de petróleo, y un adicional 30% se encuentra en yacimientos
carbonáticos. El 10% restante se encuentran en yacimientos de lutitas fracturadas, rocas ígneas
y metamórficas, etc. Sin embargo, más del 40% de los llamados yacimientos gigantes de
petróleo y gas se encuentran en rocas carbonáticas (Tissot y Welte, 1984).

PROCESOS DE ALTERACIÓN DEL PETRÓLEO

Después de la migración y entrampamiento del petróleo, pueden ocurrir varios procesos


que tienden a modificar drásticamente las características físicas y químicas de los
hidrocarburos en el yacimiento (Tissot y Welte, 1984; Hunt, 1996). En la Figura A1.4, se pueden
apreciar los principales procesos de alteración.
La posible alteración del petróleo acumulado en el yacimiento, dificulta los estudios de
correlación entre crudos para determinar génesis (correlación crudo-crudo), medio ambiente
de depositación (marino o terrestre) y tiempo de generación (maduración térmica de la roca
fuente al momento de generación y expulsión de los hidrocarburos), debido a los cambios que
sufren algunos constituyentes del petróleo en su deposito determinado.
Figura A1.4. Procesos de alteración del crudo en el yacimiento (Tomada de Escobar, 2003)

La Tabla A1.4, resume el efecto de estos procesos de alteración sobre la composición de


los crudos. A continuación serán descritos cada uno de los procesos que pueden ocurrir en el
crudo luego de su acumulación.

1..23 Biodegradación

El proceso de biodegradación consiste en el ataque de microorganismos a los


hidrocarburos, en aquellos yacimientos donde las condiciones son favorables para el desarrollo
de dichos microorganismos, por lo general este proceso se lleva a cabo en menes y en
yacimientos poco profundos, como los del Campo Niger Delta a 7.000 pies (2.134 m) (Dickey et
al., 1987), Golfo de México a 6.000 pies (1.830 m) (Roadifer, 1987) y Campo Costanero Bolívar a
10.000 pies (3.048 m) en Venezuela (Bockmeulem et al., 1983). El contenido de oxígeno de
estas aguas meteóricas generalmente está en el orden de 2 a 8 ppm.
Tabla A1.4 Cambios en las propiedades de los hidrocarburos. (Modificada de Connan, 1984)

Propiedades Alteración
Gases C1-C6 Disminuye
Relación Gas-Petróleo Disminuye
Intervalo de las Gasolinas C6-C15 Disminuye
Gravedad API Disminuye
Viscosidad Aumenta
Cambios en la composición general de los
componentes C15+
Alcanos Disminuye
Aromáticos Disminuye
Componentes N, S, O Aumenta
Asfaltenos Aumenta
Contenido de azufre Aumenta
Contenido de nitrógeno Aumenta
Vanadio y níquel Aumenta
Actividad óptica de alcanos Aumenta
Punto de ebullición Disminuye
Relación de isótopos estables de carbono &13C
Todos los hidrocarburos Aumenta
Alcanos Aumenta
Aromáticos Igual o Disminuye
Asfaltenos Disminuye
Cambios en el tipo de petróleo
Parafínico Nafténico
Parafínicos o Parafínico-Nafténicos Aromáticos- Nafténicos
Condensados Parafínicos Condensados Nafténicos
Condensados Livianos
Aromáticos intermedios Aromáticos asfálticos

Los sedimentos, los suelos, las rocas sedimentarias y el agua intersticial contienen una
amplia variedad de microorganismos que pueden utilizar a los hidrocarburos como una fuente
de energía en su metabolismo. Las parafinas, naftenos y aromáticos incluyendo gases, líquidos y
sólidos, todos ellos son susceptibles a la descomposición microbial. Las poblaciones bacterianas
son altamente adaptables y alteran el proceso metabólico para poder consumir los
hidrocarburos disponibles, en la naturaleza se encuentran más de 30 géneros y 100 especies de
bacterias, hongos y levaduras que metabolizan uno o más clases de hidrocarburos, (Hunt,
1996). Estas bacterias se alimentan de hidrocarburos livianos dando como resultado la ausencia
o disminución de ellos. Mediante estudios estadísticos se ha llegado a demostrar que las
bacterias aeróbicas son los mayores agentes de degradación de hidrocarburos en comparación
a los microorganismos anaeróbicos.
El proceso de biodegradación, u oxidación orgánica, es el resultado del metabolismo
selectivo de microorganismos sobre ciertas fracciones del crudo. El organismo pseudomonas
methanica crece a expensas del metano, también oxida el etano, propano y butano
produciendo los correspondientes ácidos. El orden en el cual los hidrocarburos se oxidan
depende de una variedad de factores, pero en general, las moléculas pequeñas debajo de C20
son consumidas antes que las más largas. La biodegradación por microorganismos aeróbicos es
un resultado de la remoción parcial o total de los n-alcanos, de alcanos ligeramente ramificados
y posiblemente cicloalcanos de pocos anillos y aromáticos. Diferentes intensidades de
biodegradación y tiempo de duración permiten que el crudo presente diferentes grados de
alteración. Las bacterias introducidas dentro del yacimiento por aguas meteóricas ricas en
oxígeno, aparentemente utilizan este oxígeno disuelto y metabolizan preferencialmente ciertos
tipos de hidrocarburo. Bajo condiciones anaeróbicas, el oxigeno suministrado a las bacterias
probablemente está en forma de iones sulfato disuelto.
La remoción selectiva de los hidrocarburos por las bacterias parece ocurrir más o menos
en la siguiente secuencia: n-alcanos (debajo de n-C15), alcanos isoprenoides, ciclo alcanos de
pocos anillos y aromáticos. Recientemente se presentó evidencia que en casos de degradación
severa, aún los esteranos tricíclicos son removidos, con relación a los triterpanos pentacíclicos
(Alimi, 1977; Reed, 1977).
El proceso de biodegradación trae como consecuencia una serie de cambios sobre el
petróleo, presentados en la Tabla A1.5

Tabla A1.5. Cambios en la composición molecular del petróleo con el incremento de la


biodegradación.
(Tomada de Hunt, 1996)

Extension de la
Nivel CAMBIOS COMPOSICIONALES
biodegradacion
1 n-alcanos C1 a C15 degradado Menor
2 Sobre el 90% C1 a C35 n-alcanos Ligero
Isoalcanos. Incluye isoprenoides
3 Moderado
atacados
Alcanos isoprenoides y
4 Moderado
metilnaftalenos removidos
Extension de la
Nivel CAMBIOS COMPOSICIONALES
biodegradacion
5 C14 a C16 alcanos bicíclicos removidos Extensivo
25-norhopano puede formarse,
6 esteranos atacados (primero Fuerte
moléculas pequeñas)
7 Esteranos, diasteranos no afectados Fuerte
8 Hopanos atacados Muy Fuerte
Hopanos, Diasteranos atacados.
9 Oleanano, terpanos tricíclicos y Severo
esteroides aromáticos sobreviven
Diesteranos y terpanos tricíclicos
10 destruidos, esteroides aromáticos Extremo
atacados, sobreviven porfirinas

La transformación de los hidrocarburos en los yacimientos por ataque de las bacterias


aeróbicas, requiere de 5 condiciones principales (Philippi, 1977; Barker, 1980 en Azuaje, 2006):

1..23.1 Movimiento de Agua por Hidrodinamismo o por Compactación


Las biodegradaciones drásticas se observan generalmente en yacimientos superficiales
los cuales son inundados por aguas meteóricas de baja salinidad con sólidos disueltos,
incluyendo sulfato de sodio, bicarbonato y una salinidad menor de 100-150 ppm. Estas aguas
producen varios niveles de biodegradación dependiendo de la extensión de la invasión del
agua. Evans et al., 1971 demostraron que el grado de biodegradación de los crudos se
incrementa a medida que el agua tiende a ser menos salina o más rica en sulfato. La invasión de
agua fresca meteórica, con contenido de sulfato de sodio, se encuentra en asociación con los
crudos biológicamente más biodegradados.

1..23.2 Contacto Agua-Petróleo


Las bacterias viven en la fase acuosa porque en ella se encuentra el oxígeno necesario
para su supervivencia, provocando la biodegradación en la interfase agua-petróleo. La
presencia de iones sulfato en los yacimientos también ayuda a desarrollar bacterias sulfato
reductoras las que a su vez oxidan los hidrocarburos (Connan, 1984).
1..23.3 Nutrientes
Las aguas meteóricas de baja salinidad, y con contenido de nutrientes como el nitrato y
fosfato, además de oxígeno disuelto, son las que favorecen el desarrollo de microorganismos
(Connan, 1984).

1..23.4

1..23.5 Presencia de Microorganismos


La presencia de microorganismos se debe a las aguas meteóricas que son portadoras de
los mismos o debido a que ellos se incorporan en el proceso de sedimentación. Los
microorganismos se clasifican en aeróbicos, disaeróbicos y anaeróbicos. Los aeróbicos se
desarrollan en presencia de oxígeno, los disaeróbicos necesitan menos oxígeno y los
anaeróbicos reducen el ión sulfato para liberar el oxigeno necesario para sus procesos vitales
(Hunt, 1996).

1..23.6 Temperatura
El intervalo de la temperatura máxima de supervivencia depende del investigador
consultado y de los instrumentos de su medición, pero en general se ha llegado a establecer un
valor crítico de 80 °C (176 °F), siendo esta la temperatura máxima en la cual se pueden
desarrollar los microorganismos.
El efecto de la biodegradación bacterial tiende a ser cada vez menos importante a
medida que la temperatura y la profundidad se incrementan. (Connan, 1984).

1..24 Lavado por aguas


El lavado por agua es un fenómeno que se produce cuando existe interacción del agua
con el crudo disolviendo la fracción de los hidrocarburos aromáticos en el rango de las
gasolinas, porque estos son más solubles en agua que el resto del petróleo (McAuliffe, 1966;
Price, 1976).
Generalmente, la pérdida de benceno y tolueno es un buen indicador del lavado por
aguas ya que estos compuestos son los más solubles en agua. La pérdida del benzotiofeno
relativo al fenantreno en los crudos que no presentan alteración de las n-parafinas puede ser
un indicio de lavado por aguas. Desafortunadamente no todos los crudos contienen suficientes
cantidades de benzotiofenos para permitir el monitoreo de tales cambios. Connan (1980)
postuló que las bacterias anaeróbicas sulfato-reductoras producen la remoción preferencial de
hidrocarburos aromáticos. Por lo tanto, la pérdida de aromáticos puede deberse a casos
especiales de biodegradación en lugar de lavado por agua.

1..25 Alteración térmica


La alteración térmica del crudo es producto del incremento de temperatura, lo cual
depende de la profundidad de enterramiento y tiempo de residencia de los hidrocarburos en el
yacimiento, hasta llegar a alcanzar un valor crítico de temperatura (>150°C). Este craqueo
térmico genera un cambio en la composición de las moléculas, produciendo hidrocarburos más
livianos, tal reacción se logra a expensas de las moléculas más pesadas.
En los yacimientos, la presencia de pirobitumen más hidrocarburos livianos (fracción de
carbono menor de C15), y la ausencia de hidrocarburos intermedios, indica producción de
reacciones de desproporción durante la alteración térmica. Esta desproporción ocurre debido a
la condensación de las moléculas aromáticas que generan hidrógeno. Esto significa que
mientras las moléculas de cadena lineal se craquean e incorporan a los átomos de hidrógeno
que liberan los aromáticos, los últimos van formando anillos cada vez más grandes. Al final del
proceso las moléculas de cadena lineal se convertirán en gases y los otros en asfaltos o
pirubitumen (Hunt, 1996).

1..26 Deasfaltación
Es el proceso mediante el cual se produce precipitación de asfaltenos en crudos de
gravedad °API medios a pesados, por disolución de grandes cantidades de fluidos livianos y
gases, generados ya sea por alteración térmica en el depósito de crudo o por inyección de
moléculas de bajo peso molecular que son transportadas durante la migración secundaria y
alcanzan el depósito de crudo mas pesado (Milner et al., 1977; Tissot y Welte, 1984). Otra causa
de desasfaltación tiene que ver con alteraciones introducidas por el hombre, durante la
producción primaria o como consecuencia de planes de recuperación secundaria de petróleo.
En cualquier caso, el resultado final de este proceso es la generación de dos productos, uno
más liviano y el otro más pesado que el crudo originalmente acumulado en el depósito
(Escobar, 1987).
La deasfaltación ocurre como un proceso natural de los crudos pesados hasta medios,
siempre que esté disponible cantidades considerables de gas, el cual pudo generarse debido a
la alteración térmica o a la inyección de gas desde la superficie, sin embargo, es necesario que
el gas se encuentre disuelto en el crudo antes que precipiten los asfaltenos, porque la
liberación de las moléculas livianas producirá la decantación de las moléculas más pesadas ya
que ellas actúan como un colchón de soporte dentro de la mezcla, el proceso se torna
inefectivo cuando se forma la capa de gas antes de que ocurra la desasfaltación (Tissot y Welte,
1 984).

La desasfaltación también está asociada con la inyección de gas en campos de


recuperación secundaria. Puede distinguirse de la alteración térmica porque esta se produce a
escala regional, mientras que la desasfaltación por inyección de gas es localizada, y los
yacimientos vecinos producen crudo o condensados (Bailey et al., 1974). También mediante el
análisis isotópico se puede determinar la procedencia del asfalteno. Si la relación entre isótopos
estables de carbono es igual al del crudo inicial, entonces, la alteración del crudo se debió a
desasfaltación, mientras que los residuos formados por alteración térmica tienen relaciones
significativamente altas (Tissot y Welte, 1984).

1..27 Fraccionamiento evaporativo


El fraccionamiento evaporativo es otro fenómeno involucrado en la alteración
secundaria de los hidrocarburos. Consiste en una pérdida selectiva de moléculas livianas del
crudo por difusión, en trampas no completamente selladas.
El fraccionamiento evaporativo es un proceso que depende de la presión de vapor de
los componentes. Es decir, la habilidad que tiene un componente para entrar a la fase de vapor
depende de su presión de vapor o más estrictamente de su fugacidad. La fugacidad depende
del peso molecular, de la estructura isométrica, clase de hidrocarburo y la composición de la
mezcla de hidrocarburos. El peso molecular tiene un efecto muy grande entre los gases, por
ejemplo, la fugacidad del metano excede grandemente a la del etano, la del etano a la del
propano y así sucesivamente. No obstante en el intervalo de las gasolinas hay componentes de
similar peso molecular, donde el tipo de estructura y clase de componente predomina. Los
hidrocarburos aromáticos se comportan anormalmente con respecto a las parafinas y los
hidrocarburos saturados cíclicos, porque muchos componentes aromáticos poseen un
momento dipolar que induce polaridad a otras moléculas, esto produce un mejoramiento
momentáneo del peso molecular de la fase líquida, lo cual, limita la habilidad de los aromáticos
a escapar del líquido y ellos se acumularán en el residual. Los hidrocarburos saturados cíclicos
también se concentran en el residual, pero en menor proporción. Para cualquier número de
carbono dado los iso-alcanos tienen una mayor fugacidad que los n-alcanos y son relativamente
más abundantes en la fase vapor (Thompson, 1987).

BIOMARCARDORES

Como se señaló anteriormente, la materia orgánica presente en las cuencas


sedimentarias posee un origen eminentemente biológico. Ésta es sintetizada por los
organismos vivientes y luego acumulada junto con los sedimentos, donde sufre una serie de
alteraciones fisicoquímicas debido básicamente a la acción de cuatro factores fundamentales:
la actividad biológica, temperatura, presión y tiempo. Una parte de los compuestos presentes
en dicha materia, no sufre cambios significativos en su cadena carbonada, lo cual permite que
sean vinculados al material biogénico precursor del cual derivan, estos compuestos se
denominan marcadores biológicos o biomarcadores (Peters y Moldowan, 1993).
Los Biomarcadores constituyen una pequeña fracción dentro de las moléculas de la
materia orgánica cuyo esqueleto resiste los procesos de diagénesis y catagénesis, por lo que
han sido propuestos como trazadores para determinar grado de madurez, migración o
ambiente depositacional (Tissot y Welte, 1984).
Para algunas clases de biomarcadores se ha establecido una relación definitiva
precursor-producto, por ejemplo las vías por las cuales los esteroles son convertidos en
esteranos han sido estudiadas en gran detalle y muchas de las reacciones de conversión están
bien documentadas. En otros casos la situación no es clara y se han inferido rutas tentativas de
conversión pero se requiere la realización de más investigaciones para dilucidar las reacciones
que ocurren a los biomarcadores después de la depositación (Philp, 1985)
El estudio de los biomarcadores comenzó en 1934 cuando Treibs identificó y aisló
porfinas de crudos y sugirió que estos proceden de la clorofila de las plantas; posteriormente,
se han realizado gran cantidad de estudios que han conducido a la identificación de numerosos
compuestos orgánicos que son utilizados en la caracterización de muestras geológicas.
Debido a que los marcadores biológicos pueden ser medidos tanto en crudos como en
bitúmenes de rocas madre, estos proveen un método para correlacionar y pueden ser usados
para interpretar las características de la roca madre de petróleo cuando solo se dispone del
crudo. Los biomarcadores son también útiles para proveer información de la materia orgánica
en la roca madre, de las condiciones ambientales durante su depositación y su soterramiento
(diagénesis), de la madurez térmica de la roca o el crudo (catagénesis), del grado de
biodegradación, de algunos aspectos de la mineralogía de la roca madre (litología) y de la edad,
así como caminos de migración de petróleo y posibles áreas de exploración.
El establecimiento de correlaciones crudo-crudo y crudo-roca madre, hace de la
geoquímica orgánica una herramienta de prospección geoquímica fundamental en la
evaluación del potencial petrolero de una cuenca sedimentaria. Uno de los problemas
principales es el conocer si una serie de yacimientos en una cuenca bajo exploración han sido
llenados con crudos procedentes de una o varias rocas fuentes. Esta información, acoplada con
un buen conocimiento de la geología del área en cuestión (estratigrafía, estructuras favorables
para una acumulación, etc.) y con estudios geoquímicos sobre intervalos con características de
roca madre, que permitan reconocer el origen de los crudos, es de mucha importancia en la
definición de nuevos objetivos exploratorios (Escobar, 1988).
Los biomarcadores y otros parámetros geoquímicos tienen mayor utilidad cuando son
combinados para generar interpretaciones geológicas más confiables. Antes de realizar un
análisis de biomarcadores, la roca y el crudo suele ser comparada usando análisis
convencionales (Peters y Moldowan, 1993). Es importante recalcar el hecho de que un estudio
de correlaciones geoquímicas confiable debe estar soportado como mínimo por tres o cuatro
parámetros independientes de correlación de tal manera de minimizar, en lo posible, el efecto
homogeneizador de los diversos procesos que puede sufrir la muestra (Escobar, 1988).
Técnicas analíticas, tales como la cromatografía de gases-espectrometría de masas,
permiten identificar y cuantificar de manera precisa los biomarcadores presentes en crudos aún
cuando se encuentren en baja concentración.
Los biomarcadores presentes en las muestras geológicas incluyen los hidrocarburos
saturados: n-alcanos o parafinas, isoprenoides, terpanos, y esteranos; así como los
hidrocarburos aromáticos. A continuación serán considerados en mayor detalle los
biomarcadores de especial interés para la presente investigación.
1..28 n-alcanos o parafinas

Los alcanos son hidrocarburos saturados que poseen la fórmula general CnH2n+2,
dispuestos en cadenas lineales o ramificadas (Figura A1.5). Su uso difundido como
biomarcadores se debe a que se encuentran ampliamente distribuidos en la mayoría de las
muestras geológicas, pueden ser fácilmente detectables a través de cromatografía de gases y
proveen información sobre la fuente de materia orgánica y la madurez del sedimento. (Philp,
1985)

CH3
H3C
CH3

n-butano CH3
H3C
CH3
H3C

n-decano 2-metildecano

Parafinas normales Parafinas ramificadas

Figura A1.5. Tipos de parafinas.

La distribución de n-parafinas ha sido generalmente utilizada como un indicador del


ambiente depositacional de la roca madre (Leythaeuser y Welte, 1969; Tissot y Welte, 1984).
Estudios de correlación han permitido establecer que una distribución de alcanos con un
marcado predominio de parafinas en la región del cromatograma de C 25 a C35, que exhibe un
máximo frecuente en C27 y C29, corresponde a la materia orgánica de tipo continental derivada
de plantas superiores (principalmente de restos de plantas superiores como raíces, tallos y
hojas), donde el aporte terrestre es considerable. (Eglinton y Hamilton, 1963 en Philp, 1985).

Por otra parte, un predominio de parafinas en el intervalo C 12-C20, con un máximo en C15
y C17 ha sido vinculado a la materia orgánica marina, del tipo de cianobacteria, con presencia de
fitoplancton y algas marrones, entre otros. (Han y Calvin, 1969 en Philp, 1985). La
Tabla A1.6 muestra la distribución de n-alcanos en diversos organismos. Los organismos
marinos son menos evolucionados y complejos que los de origen continental y poseen,
generalmente, moléculas de menor peso molecular, lo cual se refleja en el patrón mencionado
de parafinas.

Tabla A1.6. Distribución de n-alcanos en bacterias, algas y plantas superiores. Tomada de


Esteves, 1997

N° de carbono Intervalo de átomos de


Organismo Ambiente IPC
máximo dominante carbono
Bacteria
Marino (pelágico) C17, C26 Bajo 14-29
fotosintética
Bacteria no
Marino (béntico) C17, C20 Bajo 15-28
fotosintética
Hongo …………. C29 ………….. 25-29
Cianobacteria Marino (béntico) C17 Alto 14-19
Algas Marino (pelágico) C17 Alto 15-21
Algas marrones Marino (béntico) C15 Bajo 13-26
Algas rojas Marino (béntico) C17 Bajo 15-24
Zooplancton Marino (pelágico) C18, C24 Bajo 18-34
Plantas superiores Terrestre C17-C31 Alto 15-37

A medida que aumenta la madurez, la distribución de n-alcanos y muchas de las


características mencionadas se pierden, además la posición de los n-alcanos máximos tienden a
cambiar hacia alcanos de más bajo número de carbono, hasta el punto en que solo se producen
condensados de hidrocarburos ligeros y/o metano.
Un parámetro importante derivado de la distribución de n-parafinas y que permite
reconocer el nivel de madurez térmica de la roca madre que dio origen al crudo es el Índice
Preferencial de Carbonos (IPC) (Bray y Evans, 1961 en Tissot y Welte, 1984). Este parámetro
está basado en el hecho de que se espera un marcado predominio de parafinas con número
impar de átomos de carbono, sobre las parafinas con un número par de átomos de carbono en
muestras de baja madurez. Por lo tanto, crudos provenientes de rocas madres inmaduras,
presentaran valores de IPC generalmente mayores que la unidad, aunque bitúmenes asociados
a secuencias de carbonatos, podrán tener valores inferiores a este valor. Sin embargo, para
ambos casos, los petróleos maduros estarán caracterizados por resultados de IPC cercanos a
1,0.
Existen varias formas matemáticas de calcular éste índice:
En el intervalo C24-C33:

1  C25  C27  C29  C31  C33 C25  C27  C29  C31  C33 
IPC    
2  C24  C26  C28  C30  C32 C26  C28  C30  C32  C34 
Bray y Evans, 1961 en Tissot y Welte, 1984.
En el intervalo C28-C30:
2C 29
IPC 
C 28  C 30
Philippi, 1965 en Tissot y Welte, 1984.

El mecanismo por el cual varía la distribución de los alcanos ha sido sujeto de muchos
estudios. Cooper y Bray, 1963 en Philp, 1985 postularon que los alcanos impares se formaban
por decarboxilación de los ácidos grasos pares. Kvenvolden 1967 en Philp, 1985 también sugirió
que los ácidos grasos normales pueden ser precursores de muchos alcanos normales de peso
molecular intermedio y alto (Henderson et al. 1968 en Philp, 1985) realizaron experimentos de
pirolisis en n-octacosanos (C28H58) con presencia de minerales de arcilla, mostrando que los n-
alcanos degradan térmicamente a una serie homóloga completa de n-alcanos y n-alquenos.
Cada n-alcano generado de esta manera puede sobrellevar una degradación adicional y por
tanto remover todo el predominio de los pares/impares.
Además de la fuente y madurez, la biodegradación puede también influenciar la
distribución de n-alcanos en combustibles fósiles. Las etapas iniciales de la degradación
bacterial están caracterizadas por la remoción de los alcanos de bajo peso molecular, seguidas
por los alcanos en el intervalo n-C16 a n-C25 y finalmente los superiores a n-C25. La
biodegradación puede estar acompañada de lavado por aguas, observándose un efecto similar
en la distribución de hidrocarburos. La remoción de los n-alcanos en esta forma reduce su
utilidad como herramienta de correlación (Philp, 1985). La figura A1.6 muestra cromatogramas
obtenidos en un experimento de laboratorio donde se observa el efecto de la biodegradación
como desaparición de los picos de n-parafinas, primero en el intervalo C12-C25 y luego en el
intervalo completo (Jhonson et al., 1972 en Nakasone, 1999).
Otro factor que puede afectar la distribución de n-alcanos es la migración. Mackenzie et
al. (1983 en Philp, 1985) investigaron acerca de la remoción preferencial de n-C15 a n-C19 en
Noruega, encontrando que las secuencias finas de lutitas tienden a expulsar los alcanos n-C15 a
n-C19 más rápidamente que aquellas gruesas como resultado de la compactación y expulsión.
En base a esto se concluyó que más del 90% de los n-alcanos de bajo número de carbonos
pueden ser expulsados en condiciones favorables aunque solo el 10% del total es realmente
expulsado.
Powell y McKirdy (1975 en Philp, 1985) caracterizaron crudos australianos a través de n-
alcanos, encontrando que estos son de origen terrestre y de diferente madurez. A Powell (1975
en Philp, 1985) la distribución de n-alcanos le permitió diferenciar los crudos del oeste de
Australia en dos grupos: uno de tipo parafínico-nafténico y otro nafténico, y posteriormente el
uso de GC-MS mostró que la diferencia radicaba en el grado de biodegradación (Alexander et
al., 1983 en Philp, 1985).

Figura A1.6. Efecto de la biodegradación en la distribución de parafinas.

La distribución de n-alcanos en muestras de roca madre es utilizada como indicador de


madurez pero con el descubrimiento de nuevos parámetros como la distribución de esteranos y
triterpanos se ha dejado de utilizar por su falta de especificidad.
CH3

CH2
H2C

C5 Isopreno
Figura A1.7. Estructura del isopreno

1..29 H3C CH3

CH3 CH3 CH3 CH3

1..30 Pristano

1..31
CH3
H3C

1..32 CH3 CH3 CH3 CH3

Fitano
1..33
Figura A1.8. Diterpanos acíclicos.

1..34 Isoprenoides e hidrocarburos ramificados

Los isoprenoides están formados por combinaciones de unidades de isopreno C5 (Tabla


A1.7) y se han descubierto tres tipos de arreglos fundamentales:
 Cabeza-Cola (Head to Tail): son los más abundantes, incluyen pristano, fitano y otros de la
serie homóloga superior a C40 y tentativamente identificada por encima de C45.
 Cola-Cola (Tail to Tail): incluye escualano, perhidro-β-carotano y licopano, teniendo todos
precursores insaturados de ocurrencia natural.
 Cabeza-Cabeza (Head to Head): han sido encontrados en crudos producto de la
degradación del kerógeno y membranas y paredes celulares de bacterias termo-
acidofílicas de la serie Calderiella.
Los isoprenoides regulares C3 a C20 están presentes en altas concentraciones en los
crudos y carbones. Comúnmente se asume que la mayor fuente de estos compuestos es la
cadena fitol de la clorofila.
Los isoprenoides pristano y fitano (Figura A1.8) han sido utilizados en numeroso
estudios de correlación de crudos y extractos de roca madre, la relación pristano/fitano ha sido
empleada como indicador del ambiente depositacional (Brooks et al. 1969 en Philp, 1985).
Sugieren que en ambientes reductores (tipo deltaico o marino), el fitol es hidrogenado para
producir dihidrofitol y luego es sometido a un proceso de reducción a partir del cual se obtiene
el compuesto fitano (C20). En ambientes más oxidantes (pantanos), el fitol es oxidado a ácido
pristénico, el cual luego sufre una descarboxilación oxidativa, eliminando C0 2, para producir el
isoprenoide pristano (C19) (Figura A1.9). Powell y Mckirdy (1973), consideran que el pristano y el
fitano se han formado por reacciones químicas sufridas por la cadena lateral del fitol
encontrado en la clorofila. Sin embargo, la degradación de la clorofila y el fitol es
extremadamente compleja y muchos procesos intermedios están involucrados.
FITOL
CH3 CH3 H3C H3C

CH 2OH
H3C

R
Agua con O2 disuelto

H3C
Sedimentos oxigenados
+O2
R CH2OH
Fitol Fitol Ácido fiténico
+O2
H3C

R COOH Ácido Fiténico Sedimentos pobremente


-CO2
H3C
-CO2 oxigenados
Pristeno
R Pristeno
CH2 +H2
CH3
+H2
Kerógeno
R Pristano Pristano
CH3

Agua con O2 disuelto

H3C

R CH2OH Fitol Agua con H2S


CH3
+H2
Tope de las capas de sedimento
R CH2OH Dihidrofitol
-H2O Fitol reductoras, sin oxígeno
CH3
+H2 +H2
R CH3 Fitano
Dihidrofitol

-H2O +H2
Kerógeno
Fitano

Figura A1.9. Proceso de transformación del fitol a isoprenoides C19 y C20 en medios reductores y oxidantes (Modificada Tissot y
Welte, 1984)
Powell et al. (1973 en Philp, 1985) determinaron que las variaciones en la relación
pristano/fitano (Pr/Fi) pueden ser usadas para identificar tipos de ambiente. La relación
pristano/fitano ha sido empleada para inferir las condiciones fisicoquímicas de acumulación del
material biogénico precursor de combustibles fósiles, debido a que el pristano representa un
producto de un proceso oxidativo (descarboxilación). La relación pristano/fitano tiende a ser
alta en ambientes de acumulación de materia orgánica relativamente oxidantes, como por
ejemplo pantanos de turba. En ambientes anóxicos, los procesos reductores prevalecen
sobre la descarboxilación, observándose valores bajos para esta relación (< 0,6) (Powell et al.,
1975 en Philp, 1985). El cociente pristano/fitano tiende a ser alto (> 3) en medios oxidantes y lo
inverso en medios reductores (Connan, 1974). Esta relación es menor que uno para ambientes
marinos, y menor que dos para secuencias carbonáticas anóxicas ricas en materia orgánica
mientras que en rocas madres formadas en medios lacustres, fluviales y deltaicos formarán
condensados y petróleos con relaciones mayores de tres (Powell, 1975 en Philp, 1985).

Figura A1.10. Gráfico de pristano/n-C17 vs. fitano/n-C18 para clasificación de crudos. Tomada
de Hunt, 1996
Para muestras con valores de la realción Pr/Fi en el intervalo de 0,8 a 2,5 no se
recomienda el uso de este parámetro como indicador de paleoambiente (Peters y Moldowan,
1993).
Las relaciones Pr/Fi en combinación con las Pr/n-C17 y Fi/n-C18 han sido usados en
numerosos estudios para obtener información del ambiente depositacional y como parámetros
de correlación en estudios de crudos y rocas madres (Volgler, 1981; Alexander, 1981; Rashid,
1979; Gubert, 1975 en Philp, 1985). Variaciones de estas relaciones, en combinación con otros
biomarcadores, han sido empleadas para obtener información acerca de la madurez relativa de
las muestras (Mackenzie et al., 1980). Un aumento en la relación Pr/Fi ha sido interpretado
como aumento de madurez (Ten Haven, 1987 en Peters y Moldowan, 1993). Las relaciones
Pr/n-C17 y Fi/n-C18 disminuyen con el incremento en la madurez térmica del crudo, debido a la
tendencia creciente de generación de n-parafinas a partir del kerógeno, como resultado del
incremento en su maduración con la temperatura. Estas relaciones aumentan con el progresivo
incremento en la biodegradación (sirven como indicadores de biodegradación incipiente),
debido a la pérdida de n-alcanos por acción de las bacterias. Hunt, (1996) elaboró un gráfico de
Pristano/n-C17 vs. Fitano/n-C18 (Figura A1.10), la cual permite clasificar crudos y extractos de
rocas de acuerdo a su origen, incluyendo el nivel de oxido-reducción de su paleoambiente
depositacional. Crudos parafinosos continentales de Australia (Gippsland), derivados
posiblemente de carbones (kerógeno tipo III) se ubican en la parte superior del gráfico. En
contraposición, crudos marinos generados de las formaciones La Luna y Querecual de
Venezuela, constituidas por rocas madres depositadas en paleoambientes reductores, se
agrupan en la parte inferior del mismo.

1..35 Terpanos
La mayoría de los terpanos encontrados en el petróleo a partir de lípidos de membrana
bacterial, incluyen muchas series homologas que serán descritas en lo sucesivo. La distribución
de los terpanos es mostrada usando GC-MS con el ión m/z=191, y puede usarse para fines de
correlación, debido a que los terpanos están presentes en casi todos los crudos y rocas madres
depositadas en condiciones similares presentan distribución de terpanos similar (Peters y
Moldowan, 1993).

CH3

1..36 CH3 CH3


R

H3C CH3

Terpanos tricíclicos
Figura A1.11. Estructura de los terpanos tricíclicos.

CH3
CH3 CH3

CH3

H3C CH3
Terpanos tetracíclicos

Figura A1.12. Estructura de los terpanos tetracíclicos.


Intensidad
relativa

Figura A1.13. Cromatograma


Tiempo
correspondiente a los terpanos, m/z
191.

1..37 Terpanos tricíclicos

Simoneit (1980, 1982 en Philp, 1985) sugirió que los terpanos tricíclicos extendidos (
Figura A1.11), a diferencia de los diterpenoides C19 y C20, no están derivados de materia
continental sino marina. La serie extendida de los terpanos tricíclicos aparece en el intervalo C 19
a C30 (Figura A1.13). Aquino et al. (1982 en Philp, 1985) identificó los miembros C19 y C20 de las
series tricíclicas mayores en sedimentos y petróleo. Ellos propusieron un precursor C 30 para
estas series que podría ser el triciclohexaprenol formado anaeróbicamente de un compuesto
celular universal conocido como hexaprenol. La fracción saturada de hexaprenol ha sido
reportada en petróleo y en los lípidos de Archaebacteria. La serie de hidrocarburos tricíclicos ha
sido extendida desde el intervalo C19-C30 al C19-C45, haciéndose esto para explicar el origen
biogénico de los terpanos tricíclicos a partir de la ciclización de los poliprenoles regulares en las
membranas bacteriales (Moldowan et al., 1983 en Philp, 1985).
Alteración térmica de las fracciones polares de crudos, tales como resinas y asfaltenos,
produce terpanos tricíclicos y condujo a Aquino et al. (1982 en Philp, 1985) a sugerir que los
precursores de los terpanos tricíclicos estaban presentes en las fracciones de resinas y
asfaltenos. Variaciones en la distribución de los miembros individuales de esta serie homóloga
relacionada a ubicuos hopanos hace de los terpanos tricíclicos un importante parámetro de
correlación de origen.

1..38 Terpanos tetracíclicos

Los terpanos tetracíclicos (Figura A1.12) se detectan en muestras de combustibles


fósiles usando GC-MS con el ión m/z 191. Scholefield y Whitehurst (1980 en Philp, 1985)
encontraron estructuras similares en esponjas lo cual los llevó a concluir que un posible origen
de los hidrocarburos tetracíclicos puede ser la diagénesis de los terpanos contenidos en
esponjas contemporáneas con la depositación de los sedimentos. Peters y Moldowan (1993)
sugieren que una gran concentración del terpano tetracíclico C 24 puede ser interpretada como
ambiente carbonático y/o evaporítico, aunque su uso en muy impreciso.
Cuatro terpanos tetracíclicos en el intervalo C24-C27 fueron sintetizados por Trendel et al.
(1982 en Philp, 1985). Las teorías desarrolladas para el origen de esos compuestos incluyen
degradación termocatalítica de los hopanos precursores, apertura microbial del anillo E de los
hopanoides, o ciclización del escualano precursor deteniéndose en el anillo D para producir
precursores tetracíclicos los cuales pueden ser posteriormente reducidos por procesos
geoquímicos. La co-ocurrencia de los terpanos tetracíclicos en el mismo intervalo de los
hopanos y su ausencia en sedimentos recientes o inmaduros se inclina a favor de una de las dos
primeras hipótesis para su origen. Los terpanos tetracíclicos no han sido muy reportados en
crudos o rocas madre pero se ha propuesto su origen por evolución térmica de los triterpanos
pentacíclicos lo cual puede sugerir un papel en el estudio de este como indicador de madurez
térmica.

1..39 Triterpanos pentacíclicos

Los triterpanos pentacíclicos son un grupo de compuestos del tipo isoprenoides cíclicos,
formados por seis unidades de isopreno polimerizadas de acuerdo al arreglo cola-cola. Estos
compuestos de alta complejidad molecular han sido usados como indicadores de origen,
madurez, migración y biodegradación.
Con la finalidad de profundizar en el análisis de los triterpanos se han dividido en dos
grupos: los hopanos pentacíclicos y los estructuralmente relacionados moretanos que
representan el grupo más usados en los estudios de combustibles fósiles, mientras que un
segundo grupo conformado por los triterpanos que no tienen una estructura tipo hopano pero
son encontrados en combustibles fósiles han sido usados principalmente como indicador de
origen.

1..40 Triterpanos pentacíclicos basados en el esqueleto del hopano:

Los triterpanos tipo hopano (Figura A1.14) son marcadores biológicos encontrados en
los combustibles fósiles, y sus precursores están ampliamente distribuidos en bacterias y
cianobacterias (algas verdiazules) (Ourisson et al., 1979; 1982 en Philp, 1985). También han sido
encontrados en árboles tropicales, algunas gramas, líquenes y helechos. Dos precursores
comúnmente aceptados para los hidrocarburos son el diplopteno, presente en numerosos
organismos contemporáneos, y el C25 tetrahidroxihopano, el cual ha sido encontrado en
microorganismos y sedimentos recientes. El descubrimiento de los hopanos extendidos C 40+
introduce la posibilidad de encontrar precursores para los hopanos presentes en combustibles
fósiles (Rullkötter y Philp, 1981 en Philp, 1985).

H
m/z 191 R
CH3
CH3 CH3

CH3

m/z 148 + R
H3C CH3
Triterpanos pentacíclicos

Figura A1.14. Estructura de los triterpanos pentacíclicos tipo hopano.


Los hopanos saturados son relativamente fáciles de detectar en crudos y extractos de
roca usando GC-MS con el ión m/z 191. La Figura A1.13 muestra un ejemplo de la distribución
típica de los mismos en crudos.
Los compuestos precursores que ocurren naturalmente tienen la estereoquímica
17β(H), 21 β(H) la cual es termodinámicamente menos estable que la estereoquímica 17α(H),
21β(H) (Ourisson, 1982 en Philp, 1985). La diagénesis y la maduración del material orgánico que
contienen los precursores conduce a una desfuncionalización y formación de hopanos
saturados con la configuración más estable 17β(H), 21β(H) encontrada en la mayoría de los
hopanos de crudos y rocas madre. Al mismo tiempo, ocurre la formación de otra serie análoga a
la de los hopanos, conocida como moretanos, la cual presenta la configuración 17α(H), 21α(H).
La distribución de hopanos cambia con el incremento en la madurez. La Figura A1.15
muestra un cromatograma m/z 191 para dos muestras a diferentes niveles de madurez. La
muestra menos madura contiene concentraciones relativamente altas de los hopanos 17β(H),
21β(H) (es decir, la estereoquímica que ocurre naturalmente) y, a medida que el nivel de
madurez incrementa, el isómero predominante y el moretano 17β(H), 21α(H) aparecen
también se forman el C31 y sus homólogos superiores, los epímeros 22S y 22R, los compuestos
precursores que ocurren naturalmente tienen la configuración 22R, pero un incremento en la
madurez conduce a una mezcla de los epímeros 22R y 22S cuyo relación de equilibrio es 60:40
(Philp, 1985).
Kimble et al. (1974 en Philp, 1985) encontraron que las lutitas bituminosas
generalmente poseen bajos niveles de madurez y, como resultado, los hopanos encontrados en
las lutitas tienen la configuración 17β(H), 21 β(H). Adicionalmente, propusieron que la relación
17β(H)/ 17α(H) puede ser usada como un indicador de madurez relativa o la historia térmica de
las lutitas.
Cambios en la distribución de hopanos como resultado del incremento en la madurez
han sido usados para indicar si una roca madre es lo suficientemente madura para generar
petróleo. Para que un crudo haya sido generado de una roca, la distribución de hopanos
necesita ser similar a aquella que presenta el crudo. En otras palabras, si los extractos de roca
contienen grandes cantidades de 17β(H) hopano y cantidades excesivas del epímero 22R, es
improbable que la roca haya alcanzado suficiente madurez para haber generado petróleo
(Seifert y Moldowan, 1978).
Figura A1.15 Cromatograma m/z 191 para dos muestras a diferentes niveles de madurez.
Tomada de Philp, 1985.

Como ya se mencionó, el primer efecto de la biodegradación de un crudo es la remoción


de n-alcanos. Biodegradaciones más intensas también afectaran los hopanos y conducen a la
formación de hopanos desmetilados. Seifert y Moldowan (1978) propusieron que bajo ciertas
circunstancias el grupo metil es removido del anillo A o B del sistema hopano, y el ión de m/z
177, en vez del m/z 191, puede ser usado para monitorear la presencia de hopano desmetilado.
En crudos severamente degradados, se ha propuesto que los hopanos desmetilados
pueden ser usados como parámetros de madurez de la misma manera como los hopanos
regulares son usados en crudos no degradados (Volkman et al., 1983). Goodwin et al. (1981 en
Philp, 1985) encontraron en muestras de crudo que los cambios en la distribución de esteranos
y triterpanos incluyen reducción en la concentración relativa de C 27 regular y rearreglo de los
esteranos adicionalmente a la reducción del hopano C35-αβ. Goodwin et al. (1981 en Philp,
1985) también sugieren que la ocurrencia natural en los hopanos extendidos son degradados
más rápidamente que el epímero 22S.
La aromatización de los hopanos también puede ocurrir en crudos y sedimentos, y la
presencia de hopanos aromáticos en sedimentos sugiere que ellos se pueden formar por
reacciones microbiales o por madurez (Schmitter et al., 1981; Griener et al., 1976, 1977 en
Philp, 1985).
Algunas de las relaciones basadas en este tipo de compuesto y las cuales se usan con el
fin de caracterizar muestras de crudo y de roca madre son presentadas por Peters y Moldowan
(1993). Entre estas se encuentran:

1..41 Índice de Homohopano


La distribución relativa de C31 a C35 de 17α(H), 21β(H) 22S y 22R homohopano en
petróleos marinos es usada como indicador del potencial Redox (Eh) durante e inmediatamente
después de la depositación de los sedimentos de la roca madre. El índice de homohopano es la
relación C35/(C31 a C35) homohopanos y usualmente se expresa en porcentaje. Petróleos y
bitúmenes de madurez similar que muestran alta concentración de homohopanos C 33, C34 o C35,
comparado con sus homólogos más bajos indican ambientes marinos altamente reductores
(bajo Eh) con poco oxígeno libre disponible. Se debe tomar en cuenta que este índice puede
verse afectado por cambios en la madurez.

1..42 Isomerización de Homohopanos (22S/(22S+22R))

Los hopanos precursores poseen una configuración 22R que se convierte gradualmente
a una mezcla de 22R y 22S. Las proporciones de 22R y 22S pueden ser para todos los
compuestos C31 a C35 o para alguno especifico. Esta relación incrementa desde 0 hasta 0,6
durante la maduración por la mayor estabilidad térmica del isómero 22S en comparación con el
22R (Farrimond et al., 1998). El valor de equilibrio de la isomerización está entre 0,57 y 0,62 y
se alcanza en una etapa temprana de generación de petróleo, por tal motivo este parámetro no
puede ser usado en muestras maduras a sobremaduras (Peters y Moldowan, 1993).
OH HO
H
H

CH3
CH3 CH3 CH3 OH OH

CH3

H3C CH3
Tetrahidroxibacteriohopano

H H H
H H
CH3
CH3 CH3 CH3
CH3 CH3 CH3 CH3 CH3 CH3 CH3
CH3
CH3 CH3 CH3

H3C CH3 H3C CH3 H3C CH3

17(H)-22,29,30-Trisnorhopano (Tm) 17(H),21(H)-Hopano 17(H),21(H)-30-Norhopano

H H
H H
CH3 CH3
CH3 CH3
CH3 CH3 CH3 CH3
CH3 CH3

CH3 CH3

H3C CH3 H3C CH3


17(H),21(H)-Hopano 17(H),21(H)-Hopano
(Moretano)

CH3

CH3 CH3

CH3

H3C CH3

18(H)-22,29,30-Trisnorhopano (Ts)

Figura A1.16. Transformación del hopano en sedimentos. (Chiron, 1997).

1..43 Terpanos tricíclicos/17α(H)-hopanos

Esta relación se incrementa sistemáticamente con el aumento de la madurez térmica


(Seifert y Moldowan, 1978) debido a que a altos niveles de madurez se libera del kerógeno
mayor cantidad de terpanos tricíclicos que hopanos, probablemente porque los primeros
migran más rápido y/o los 17α(H)-hopanos tienen mayor afinidad con la matriz de roca.

1..44 Ts/(Ts+Tm)

Seifert y Moldowan (1978) proponen el uso de dos triterpanos trisnorpentacíclicos como


indicador de madurez, considerando que uno de los dos, el 17 α(H)-22,29,30-trisnorhopano
(Tm), se madura con más facilidad que el 18α(H)-22,29,30-trisnorhopano (Ts), suponen que la
relación Tm/Ts debe aumentar con el incremento de la madurez. Esta diferencia es adjudicada
al hecho de que la formación de Tm ocurre durante la diagénesis temprana y por tanto resulta
menos resistente a la degradación que Ts. Un esquema de la transformación de Tm a Ts en los
sedimentos y de su posible precursor biológico se muestra en la figura A1.16 (Chiron, 1997).
Peters y Moldowan (1993) proponen la utilización de esta misma relación normalizada
(Ts/(Ts+Tm)), aunque su aplicación puede estar restringida por el hecho de que puede variar
con las facies orgánicas (fuente dependiente).

1..45 Ts/C3017α(H)-hopano (figura A1.17)

Volkman et al. (1983) proponen esta relación como parámetro de madurez para crudos
muy maduros. Se cree que la ruptura de la cadena lateral de C29 y los hopanoides de alto
número de carbono produce los precursores del hopano C 27 (Ts) por mecanismos de rearreglo.
De manera que la relación aumenta al aumentar la madurez térmica.

1..46 Triterpanos pentacíclicos diferentes a los hopanos

H
H
CH3

CH3
CH3 CH3 CH3

CH3

H3C CH3

17(H),21(H)-Hopano

Figura A1.17. Estructura de C30 17α(H),21β(H)-Hopano.

La distribución de triterpanos en angioespermas, gymnoespermas, algas, bacterias y hongos


ha sido revisada por Whitehead (1974, 1982 en Philp, 1985). Aunque un gran número de
compuestos fue citado, solo un pequeño número de los análogos a los hidrocarburos fue
identificado en combustibles fósiles. Los mayores grupos que han sido detectados y de algún
uso como marcadores son los lupanos, oleananos, fernanos y ursanos. En la mayoría de los
informes se ha enfatizado su uso como indicador de origen. A diferencia de los hopanos,
ninguno de estos ha sido usado frecuentemente para correlación o madurez. Además, estos
compuestos se encuentran en carbones y crudos de origen continental, debido a que sus
precursores están ampliamente distribuidos en plantas superiores (Philp, 1985).
El 18α(H)Oleanano (Figura A1.18) es usado como marcador de origen continental debido
a que solo está presente en plantas superiores (angioespermas) del Cretáceo Tardío, o más
jóvenes.

H3C CH3

CH3

CH3 CH3

CH3

H3C CH3
18(H)-Oleanano

Figura A1.18. Estructura del 18α(H)Oleanano.

1..47 Esteranos

Los esteranos son compuestos derivados de esteroles que están ampliamente distribuidos
en plantas y microorganismos, con el esterol C27 y C28 abundantes en organismos marinos y el
esterol C29 en plantas superiores. Sin embargo, Cassani (1988) menciona que en algunos crudos
marinos el predominio del C29 puede atribuirse a la contribución de algas marrones o verdes u
otros organismos marinos. Variaciones en el patrón sustituyente de la cadena lateral y en la
estereoquímica de los esteroles pueden ser usados como un indicativo más específico de los
organismos precursores. Los cambios estereoquímicos que pueden ocurrir en la molécula
después de la formación del esterol precursor se resumen en el esquema de la Figura A1.19.
Los esteroles generalmente contienen un enlace doble Δ5,6 y ocurren naturalmente como el
epímero 20R con la configuración 14α(H), 17α(H). A medida que la diagénesis comienza, el
doble enlace es hidrogenado y se forma un nuevo centro epimérico con una mezcla de la
estereoquímica de 5α(H) y 5β(H) con predominio de 5α(H). Con el incremento de la madurez los
isómeros 14(H) y 17(H) (los cuales predominan en los petróleos maduros (Seifert y
Moldowan, 1981 en Philp, 1985), se forman como una mezcla de epímeros 20R y 20S. Debido a
su mayor estabilidad térmica la estereoquímica del 5α(H) predomina. Los epímeros 5β(H) están
presentes en menores cantidades y generalmente están enmascarados por los 5α(H) que son
más abundantes.
CH3

H
H3C CH3

CH3 H
CH3 CH3

CH3
Esterol- compuesto presente H
H3C CH3
en los organismos vivientes
H CH3 H
CH3
HO
CH3

14,17 (20S)
CH3
Configuración geológica
H
H3C CH3

CH3 H Calor CH3


CH3

CH3
+ H
H3C CH3
Catálisis
CH3 H
H CH3

CH3

H
14,17 (20R)
Configuración biológica 14,17 (20R)
Configuración geológica

Figura A1.19. Cambios estereoquímicos que pueden ocurrir en la molécula después de la formación del esterol precursor.

Un ejemplo de la distribución de esteranos en crudos determinada por GC-MS con m/z 217
se muestra en la Figura A1.20.
Se ha demostrado que la biodegradación tiene efectos sobre la distribución de esteranos y
puede complicar la determinación de madurez basada en relaciones de ciertos esteranos. El
primer epímero que es removido es el C29-20R y a medida que avanza la biodegradación se van
removiendo los esteranos regulares dejando sólo los esteranos reacomodados. Esto fue
probado por Curiale et al. (1983 en Philp, 1985) en bitúmenes de Oklahoma y por Rullkötter y
Wendisch (1982 en Philp, 1985) en asfaltos de Madagascar.
Peters y Moldowan (1993) proponen el uso de algunas relaciones de esteranos para
caracterización de crudos, los mismos son descritos a continuación:

1..48 Relación esteranos/triterpanos

Se usa como un indicador de tipo de materia orgánica, asumiendo que los esteranos se
derivan de algas y plantas superiores, mientras que los triterpanos se originan principalmente
de bacterias (Connan et al., 1986 en Peters y Moldowan, 1993). Sin embargo, el uso de esta
relación está limitado debido a que existe una variedad de organismos que pueden contribuir al
origen de los triterpanos.
Intensidad relativa

Tiempo

Figura A1.20. Distribución de esteranos, m/z 217.

1..49 Relación esteranos regulares/17α(H)-hopanos

Refleja la naturaleza eucariótica (principalmente algas y plantas superiores) o


procariótica (bacterias) de la roca madre. Además, relaciona crudos de diferente madurez
térmica. En esta relación, los esteranos regulares están conformados por los compuestos C27,
C28, y C29 (20S+20R) y  (20S+20R) y el término 17(H)-hopano consiste de los pseudo
homólogos en el intervalo C29-C33 incluyendo los epímeros 22S y 22R para C31 a C33.
En general se observa que altas concentraciones de esteranos combinadas con una alta
relación esteranos/hopanos (≥ 1) tipifican materia orgánica marina con una contribución mayor
de algas planctónicas y/o bénticas (Moldowan et al., 1985). Por el contrario, una baja
concentración de esteranos y valores bajos de la relación esteranos/hopanos indican materia
orgánica retrabajada terrígena y/o microbacterial (Tissot y Welte, 1984).
1..50 Isomerización de esteranos

1..50.1 Relación ααα20S/(ααα20S+ααα20R) ó %20S

El proceso de isomerización en esteranos causa el incremento de la relación


20S/(20S+20R) desde 0 hasta 0,5 con el aumento de la madurez. Los esteroides precursores
solo presentan la configuración R pero progresivamente se va convirtiendo en una mezcla de R
y S. Frecuentemente se utilizan los compuestos del αααC29 debido a la facilidad para su
identificación con GC-MS con el ión m/z 217. Esta relación puede ser afectada por factores
diferentes a la madurez, como por ejemplo la facies (Seifert y Moldowan, 1986) y la
biodegradación, esta última reflejada como un aumento de la relación por encima de 0,55 por
una probable remoción selectiva por bacterias del epímero ααα20R.

1..50.2 Relación /(+) ó 

La isomerización en las posiciones 14 y 17 en los esteranos regulares C 29-20S y 20R causa


el incremento de la relación /(+) hasta alrededor de 0,7, debido a la mayor estabilidad
térmica de los isómeros  en comparación con los isómeros derivados biológicamente 
(Farrimond et al., 1998). Este relación parece ser independiente del tipo de materia orgánica y
alcanza el equilibrio más lento que la relación 20S/(20S+20R) por tanto, es
efectivo a niveles más altos de madurez.
El gráfico de /(+) vs. 20S/(20S+20R) para esteranos C29 es
particularmente efectivo para describir la madurez termal tanto de rocas como de crudos
(Seifert y Moldowan, 1986).

Tabla A1.7. Muestra un resumen de los parámetros medidos con esteranos y triterpanos.
(Tomada de Philp, 1985).

Biomarcador Aplicación
Terpano Tricíclico (%) Fuente
Cambio en la concentración de parafinas + incremento en las Migración y/o Madurez si
concentraciones de esteranos y triterpanos se establece una fuente
común
Biomarcador Aplicación
C 29  C30terpanos _ primarios
C 27  C 28terpanos _ sec undarios Fuente y Madurez

17 ( H ) _ 22,29,30 _ trisnorhopano(Tm )


18 ( H ) _ 22,29,30 _ trisnorhopano(Ts ) Fuente y Madurez

5 ( H )esterano
Migración si se establece
17 ( H )hopano una fuente común

17  ( H ),21 ( H )
hopano
17  ( H ),21 ( H )  17  ( H ),21 ( H )  17 ( H ),21 ( H ) Madurez

22 R
17 ( H ),21 ( H ) _ hom ohopanos
22 R  22S Madurez

20S
13 ( H ),17 ( H ) _ diacoles tan o
20 R  20S Madurez

24S
(20 R) _ 24 _ metil _  _ coles tan o
24 R  24S Madurez

20 R
_ 24 _ etil _  _ coles tan o
20 R  20S Madurez


(20 R  20S ) _ 24 _ etilcoles tan o
   Madurez

 _ C 28esteranos
 _ C 29esteranos Fuente

 _ C 27esteranos
 _ C 29esteranos Fuente

 (20 R)   (20 R)


C 29esteranos
 (20 R) Migración

13 ( H ),17 ( H )(20S )


C 27  C 28  C 29esteranos
 (20 R) Migración

 (20 R) _ C 28   (20R  20S ) _ C 28   (20 R  20S ) _ C 29


esteranos
 (20 R) _ C 28 Fuente
Biomarcador Aplicación
C 27 _ triaromati cos
esteranos
C 27 _ triaromati cos  C 28 _ monoaromati cos Madurez y Aromatización

C 21 _ monoaromati cos
esteranos Madurez y ruptura de
C 21 _ triaromati cos  C 28 _ monoaromati cos enlaces

C 26 _ triaromati cos
esteranos Madurez y ruptura de
C 20 _ triaromati cos  C 27 _ triaromati cos enlaces

Remoción preferencial de C27_20S_Diasterano con respecto a


Biodegradación
su epímero 20R
Remoción preferencial de esteranos regulares con respecto a
Biodegradación
Diasteranos
17 ( H ) _ C30 hopano
Diferenciación de roca
17  ( H ) _(C 29  C30 )more ta nos
madre por pirolisis

17 ( H )
trisnorhopano Diferenciación de roca
17  ( H ) madre por pirolisis

1..51 Hidrocarburos Aromáticos

Los hidrocarburos aromáticos, caracterizados por tener en su estructura uno o más


anillos de benceno, han sido ampliamente estudiados por su importancia en sedimentos
antiguos y en crudos de diferentes tipos. Los compuestos aromáticos que pueden ser
relacionados a esteroides y triterpenoides de material biológico son particularmente útiles
debido a que la comparación estructural con sus precursores es posible.
Los primeros hidrocarburos poliaromáticos fueron reportados por Meinschein (1959) en
sedimentos marinos del Golfo de México. Thomas y Blumer (1964) identificaron pireno y
fluoranteno en nódulos de manganeso, luego Tissier y Oudin (1973) identificaron fluoranteno,
criseno y trifenileno, entre otros, por medio de espectrometría de masa en sedimentos de la
bahía de Veys, en Francia. (Tissot y Welte, 1984. P. 126).
Los hidrocarburos aromáticos más estudiados por cromatografía de gases pertenecen a
las series de los naftalenos (Radke et al., 1986), fenantrenos mono y disustituidos (Radke et al,
1982) y benzo más dibenzotiofenos (Hudges, 1985). Se ha demostrado que en la zona
correspondiente a la ventana del petróleo, las relaciones entre diversos homólogos de estas
familias de compuestos aromáticos, cambian en una forma regular con el incremento en la
madurez térmica de la materia orgánica.

1..52 Metil-fenantreno

Budzinski et al. (1995) proponen que los metil-fenantrenos permiten agrupar crudos de
acuerdo al ambiente donde se depositó la roca madre, aunque también son sensibles a su
madurez térmica. La abundancia de 9-metilfenantreno se relaciona con crudos de origen
marino, mientras que los crudos de origen terrestres presentan abundancia de 1-
metilfenantreno.

1..53 Índice de metil-fenantreno (MPI)

Radke et al. (1982) usaron fenantrenos derivados de esteroides y triterpenoides y los


isómeros del fenantreno producidos por metilación para formular el índice de metil-fenantreno
(MPI) que refleja el incremento de la madurez térmica de la materia orgánica y exhibe buena
correlación con la reflectancia de la vitrinita para casi cualquier temperatura. Este parámetro se
fundamenta en la distribución del hidrocarburo aromático metilfenantreno y de sus homólogos
metilados, la cual muestra un cambio progresivo durante la maduración térmica de la roca
madre (Radke et al., 1982). Los fenantrenos metilados pueden derivarse de esteroides y
triterpenoides originalmente presentes en el material biológico de partida, o pueden originarse
a partir de reacciones de metilación del fenantreno. En cualquier caso, los isómeros
termodinámicamente más estables, son los 2- y 3-metilfenantrenos, frente a los isómeros 1- y
9-metilados. La expresión para el MPI 1 (Methylphenanthrene Index 1) se define como:

1,5(2  metilfenan treno  3  metilfenan treno)


MPI 1 
fenantreno  1  metilfenan treno  9  metilfenan treno
Por otra parte, Radke et al. (1982) observan que el predominio de 9-metilfenantreno
sobre 1-metilfenantreno, que presentan las muestras utilizadas en su estudio en el intervalo de
reflectancia de vitrinita entre 0,63 y 0,76 %, se va reduciendo hasta desaparecer por encima de
este intervalo. Así mismo, estos autores señalan que los parámetros basados en fenantrenos y
sus homólogos metilados presentan buena correlación con la reflectancia de vitrinita en crudos
derivados de kerógeno tipo III, pero no sucede igual para otros tipos de kerógenos por lo que
recomiendan su uso limitado.
Una expresión similar a MPI1, utilizada como control (aunque su valor es ligeramente
superior, debido a una ligera predominancia de 2- sobre 3-metil en el petróleo) es (Radke et al.,
1982):

3(2  metilfenan treno)


MPI 2 
fenantreno  1  metilfenan treno  9  metilfenan treno

Se ha encontrado una correlación lineal bastante alta entre los valores de MPI 1 y la
reflectancia de vitrinita, en estudios realizados en Canadá y Alemania, lo cual permitió a Radke
y Welte (1983) la postulación de ecuaciones para calcular valores de Rm a partir de datos de
MPI 1:

Rm = 0,60 MPI 1 + 0,40 (0,65 . Rm . 1,35)


Rm = - 0,60 MPI 1 + 2,30 (1,35 . Rm . 2,00)

La idea es que el valor de MPI 1 determinado sobre una muestra de bitumen permita
conocer la reflectancia de vitrinita para la correspondiente roca madre, a menos que este
extracto de roca haya recibido un aporte de hidrocarburos aromáticos no indígenos, por
migración. En adición, el MPI es particularmente útil para conocer la madurez de la materia
orgánica en margas y calizas donde las partículas de vitrinita son escasas, tal es el caso de
kerógenos tipo I y algunos del tipo II (Tissot y Welte, 1984).
1..54 Distribución de dibenzotiofeno

La distribución de dibenzotiofenos puede usarse como indicador de la litología de la


roca madre tal como lo propone Hughes (1984), para rocas siliciclásticas la distribución
esperada es 4-metil- > 2,3-metil- >1-metil-; mientras que una distribución 4-metil- > 2,3-metil- <
1-metil- sería para una roca ricas en carbonatos.

1..55 Relación dibenzotiofeno/fenantreno

La relación de dibenzotiofeno con fenantreno es propuesto por Hughes et al. (1995)


como excelente indicador de la litología de la roca madre, teniendo en cuenta que valores
mayores a la unidad indican roca carbonática y los valores menores, lutitas.
La relación de dibenzotiofeno con fenantreno graficado en función de la relación Pr/Fi ha sido
propuesta como un indicador muy efectivo de litología y ambiente depositacional de roca
madre (Hughes et al., 1995), al permitir clasificar muestras en cuatro grupos: marino
carbonático, marino carbonático mezclado con lacustrino rico en sulfato, lacustrino pobre en
sulfato, lutítico marino o lacustrino y lutítico carbonáceo fluvio-deltaico o carbón (Figura A1.21 )
Tal clasificación se hace posible debido a que estas relaciones reflejan los regímenes de Eh-pH
que resultan de los procesos microbiológicos y químicos que ocurren durante la depositación y
la diagénesis de los sedimentos.
Zona 1A Marino Carbonático
Zona 1B Marino Carbonático o lacustrino
rico en sulfato
Zona 2 Lacustrino pobre en sulfato
Zona 3 Marino lutítico o lacustrino
Zona 4 Fluvio-deltaico

Zona 1A
DBT / F

Zona 1B

Zona 2

Zona 3 Zona 4

Pr/F

Figura A1.21. Gráfico de la relación dibenzotiofeno/fenantreno (DBT/F) vs. pristano/fitano


(Pr/F). Tomada de Hughes et al. (1995).

A continuación, se presentan las ecuaciones utilizadas en el cálculo de las


relaciones de compuestos utilizadas en la interpretación geoquímica de CG-EM,
para las fracciones de hidrocarburos saturados y aromáticos del crudo.

Isomerización S-R de los hópanos expresado como %22S en la fracción de hidrocarburos


saturados; ecuación 1.

 ,21ß(H) - bishomohopano - (22S)


%22S   100 (1)
17 ,21ß(H) - bishomohopano - (22S)  17 ,21ß(H) - bishomohopano - (22R)

Isomerización S-R de los esteranos expresado como %20S en la fracción de


hidrocarburos saturados; ecuación 2.

5 (H),14 (H),17 (H) - etilcolest ano - (20S)


%20S   100 (2)
5 (H),14 (H),17 (H) - etilcolest ano - (20S)  5 (H),14 (H),17 (H) - etilcolest ano - (20R)
Porcentaje de trisnorneohopano (Ts) en la fracción de hidrocarburos saturados; ecuación 3.

18α - 22,29,30 - trisnorneohopano


%Ts  100 (3)
18α - 22,29,30 - trisnorneohopano  17α - 22,29,30 - trinorhopano

Porcentaje de isomerización  en el carbono 29 de los estéranos en la fracción de


hidrocarburos saturados; ecuación 4.

C 29ßß(20S)  C29ßß (20R)


%   100 (4)
C 29ßß(20S)  C 29 ßß (20R)  C 29ßß(20R)  C 29 (20S)  C 29 (20R)

Porcentaje de los esteranos totales C27, C28, C29 en la fracción de hidrocarburos


saturados; ecuación 5, 6 y 7.

C27ßß(20S) C27ßß (20R)


%C27   100 (5)
C27ßß(20S) C27 ßß (20R) C28 ßß(20R) C28ßß(20S)  C29ßß(20R)  C29ßß(20R)

C28ßß(20S) C28ßß (20R)


%C28   100 (6)
C27ßß(20S) C27 ßß (20R)  C28ßß(20R) C28ßß(20S)  C29ßß(20R)  C29ßß(20R)

C29ßß(20S) C29ßß (20R) (7)


%C29   100
C27ßß(20S) C27 ßß (20R)  C28ßß(20R) C28ßß(20S)  C29ßß(20R)  C29ßß(20R)

Porcentajes de los isómeros del 1-metildibenzotiofeno (1-MDBT), 2-


metildibenzotiofeno+3-metildibenzotiofeno (2+3-MDBT) y 4-metildibenzotiofeno (4-MDBT) en
la fracción de aromáticos, ecuaciones 8, 9, 10.

1- MDBT
%1- MDBT   100 (8)
1- MDBT  2  MDBT  3 - MDBT  4  MDBT

2  3 - MDBT
%2  3 - MDBT  100 (9)
1- MDBT  2  MDBT  3 - MDBT  4  MDBT

4 - MDBT
%4 - MDBT   100 (10)
1 - MDBT  2  MDBT  3 - MDBT  4  MDBT

Porcentaje de aromatización de esteroides (monoaromaticos a triaromaticos) %TA(1),


en la fracción de hidrocarburos aromáticos, ecuación 11.

C 20 TA  C 21TA
%TA(1)   100
(11)
C 20 TA  C 21TA  C26TA(20S)  C26TA(20R)  C27TA(20S)  C27TA(20R)  C28TA(20S)C 28TA(20R)
TABLAS DE DATOS Y RESULTADOS A1

Tabla A1.8. Listado de Pozos con algunas caracteristicas básicas.


INTERVALO PROFUNDIDAD TOTAL
POZO OPERADOR EDAD DEL YACIMIENTO
PIES (TD)
ALP0003 DZO / PETROPERIJA 15960-16359 16446
ALP0004 DZO / PETROPERIJA 15588-16756 16910
ALP0005 DZO / PETROPERIJA 16152-16360 16840
ALP0006 DZO / PETROPERIJA 16121-16212 16932
ALP0007 DZO / PETROPERIJA 16418-16714 17069
ALP0008A DZO / PETROPERIJA 15784-15837 17039
ALP0009 DZO / PETROPERIJA 13313-13370 17005
ALP0010 DZO / PETROPERIJA 15396-16321 16805
ALT0009 DZO / PETROPERIJA 16420-17140 18132 CRETÁCICO
ALT0015 DZO / PETROPERIJA 16600-17000 17893 CRETÁCICO
ALT0016 DZO / PETROPERIJA 12204-12428 12965 CRETÁCICO
ALT0017 DZO / PETROPERIJA 16689-17521 18547
ALT0018 DZO / PETROPERIJA 18503 CRETÁCICO
ALT0019 DZO / PETROPERIJA 16660-17000 17960 CRETÁCICO
ARI0002 U.N. PRODUCCION 16296-16495 18021 CRETÁCICO
BN 0215 PETROBOSCAN 15912-15948 16002
C 0151 LA CONCEPCIÓN 9975-10886 10886 CRETÁCICO
C 0227 LA CONCEPCIÓN 9107-11724 11900 CRETÁCICO
CL 0087 U.N. PRODUCCION 16098 CRETÁCICO
CL 0099 U.N. PRODUCCION 16352-16333 16333 CRETÁCICO
CLA0096 U.N. PRODUCCION 16020 CRETÁCICO
CLD0046 U.N. PRODUCCION 15830 CRETÁCICO
CLD0053 U.N. PRODUCCION 16049 CRETÁCICO
CLD0054 U.N. PRODUCCION 16242 CRETÁCICO
CLD0055 U.N. PRODUCCION 16170 CRETÁCICO
CLD0060 U.N. PRODUCCION 16172 CRETÁCICO
CR 0004 COLON / BARIPETROL 14141-14237 14680 CRETÁCICO
DM 0001 U.N. PRODUCCION 9078-9497 6000 CRETÁCICO
DM 0008 U.N. PRODUCCION 8338-9494 10010
DM 0043 U.N. PRODUCCION 3701
DM 0054 U.N. PRODUCCION 2795
DM 0116 U.N. PRODUCCION 5531-6590 8552 CRETÁCICO
DM 0120 U.N. PRODUCCION 4727-6495 6495
DM 0132 U.N. PRODUCCION 7240-8535 8535
DMM0002 U.N. PRODUCCION 8738-10400 10654
EPU0002 U.N. PRODUCCION 1000-3067 3233 MACO-PERON
GAR0017 U.N. PRODUCCION 16390-16551 17100
MCH0002 PETROPERIJA 16715-17738 18390
MCH0003 PETROPERIJA 17561-17780 18764
P 0106 U.N. PRODUCCION 8005-9757 9725 CRETÁCICO
P 0156 U.N. PRODUCCION 8658-10656 10680
P 0167 U.N. PRODUCCION 5389-9888 10010 BASAMENTO
P 0180 U.N. PRODUCCION 6152-10432 10512 CRETÁCICO
INTERVALO PROFUNDIDAD TOTAL
POZO OPERADOR EDAD DEL YACIMIENTO
PIES (TD)
P 0194 U.N. PRODUCCION 9750-10685 10685 CRETÁCICO
SJ 0002 DZO / PETROPERIJA 15393-15769 16237
SJL0002 DZO / PETROPERIJA 16748-16806 18636
SOL0002 U,N, PRODUCCION 15862-16870 12988 CRETÁCICO
T 0230 BARIPETROL / COLON 11939 CRETÁCICO
TOT0001 DZO / PETROPERIJA 11644-12051 13138
TOT0002 DZO / PETROPERIJA 13790-13914 14352
TOT0003 DZO / PETROPERIJA 14189-14218 14672
TOT0004 DZO / PETROPERIJA 12758-12910 13335
UD 0097 U.N. PRODUCCION 13562 14515 CRETÁCICO
PETROWUARAO
UD 0112 15134 16359 CRETÁCICO
AMBROSIO
PETROWUARAO
UD 0116 15918 16702 CRETÁCICO
AMBROSIO
PETROWUARAO
UD 0119 15220 15564 CRETÁCICO
AMBROSIO
PETROWUARAO
UD 0148 15930 16885 CRETÁCICO
AMBROSIO
PETROLERA_RGNL_LAGO
UD 0153 16827 16940 CRETÁCICO
URDANETA OESTE
UD 0154 U.N. PRODUCCION 15960-16125 16400 CRETÁCICO
UD 0168 U.N. PRODUCCION 13716 14770 CRETÁCICO
PETROLERA_RGNL_LAGO
UD 0170 16475-16527 16632 CRETÁCICO
URDANETA OESTE
PETROLERA_RGNL_LAGO
UD 0185 16816 16971 CRETÁCICO
URDANETA OESTE
PETROLERA_RGNL_LAGO
UD 0198 16915 CRETÁCICO
URDANETA OESTE
PETROLERA_RGNL_LAGO
UD 0209 17044 17185 CRETÁCICO
URDANETA OESTE
UD0779 U.N. PRODUCCION 14707 CRETÁCICO
URD0006 U.N. PRODUCCION 16430-16727 17090
URD0007 U.N. PRODUCCION 15242-16672 16926 CRETÁCICO
VLA0710 U.N. PRODUCCION 13038-14850 14850 CRETÁCICO
VLA0711 U.N. PRODUCCION 13780-15424 15424 CRETÁCICO
VLA0808 U.N. PRODUCCION 14820-18000 16000 CRETÁCICO
VLA0810 U.N. PRODUCCION 14650 CRETÁCICO
VLA1402 U.N. PRODUCCION 14225 CRETÁCICO
VLE0686 U.N. PRODUCCION 15270-16190 16194 CRETÁCICO
VLF3020 U.N. PRODUCCION 16466-16764 17210 CRETÁCICO
WT 0002 COLON / BARIPETROL 6802-6882 9173 CRETÁCICO
WT 0055 COLON / BARIPETROL 7814-8462 9346 CRETÁCICO

Tabla A1.9. Listado de Pozos y elementos organometalicos (V, Ni, S, Pristano, Fitano y sus n-
parafinas).
V Ni S
POZO V/Ni V/(V+Ni) Prist/Fit Prist/n-C17 Fitano/n-C18
(ppm) (ppm) (%)
ALP0003 136 24 5,7 0,85 1,6 0,83 0,6 0,8
V Ni S
POZO V/Ni V/(V+Ni) Prist/Fit Prist/n-C17 Fitano/n-C18
(ppm) (ppm) (%)
ALP0004 272 28 9,7 0,91 2 0,71 0,4 0,8
ALP0005 88 24 3,7 0,79 1,6 0,91 0,7 0,8
ALP0006 194 20 9,7 0,91 1,8 0,83 0,5 0,6
ALP0007 670 67 10,0 0,91 3,8 0,67 0,7 1,1
ALP0008A 17 6 2,8 0,74 0,8 0,91 0,7 0,8
ALP0009 484 50 9,7 0,91 3,7 0,71 0,5 0,7
ALP0010 184 22 8,4 0,89 1,5 0,77 0,5 0,7
ALT0009 34,3 6,7 5,0 0,84 0,6 0,80 0,4 0,6
ALT0015 9,0 0,6 0,50
ALT0016 356 29,1 12,0 0,92 1,8 0,50 0,5 0,9
ALT0017 37 11 3,4 0,77 0,8 0,91 0,6 0,7
ALT0018 16,0 1,3 1,00 0,6 0,7
ALT0019 40 4,5 9,0 0,90 0,6
ARI0002 354,8 36 10,0 0,91 2,1 0,70 0,4 0,7
BN 0215 154 8 19,3 0,95 2,1 0,71 0,4 0,6
C 0151 29,4 2,3 13,0 0,93 1,1 0,60 0,3 0,5
C 0227 19 8 2,4 0,70 1,1 0,77 0,5 0,7
CL 0087 10 2 5,0 0,83 0,4 0,90 0,29 0,33
CL 0099 0,2 0,12 1,7 0,63 0,2
CLA0096 0,99 0,277 0,312
CLD0046 1,00 0,282 0,327
CLD0053 1,00 0,309 0,355
CLD0054 0,90 0,294 0,368
CLD0055 0,93 0,28 0,35
CLD0060 0,99 0,301 0,351
CR 0004 0,2 0,12 1,7 0,63 0,2 1,00 0,4 0,4
DM 0001 214,1 17,4 12,0 0,92 2,3 0,50 0,2 0,4
DM 0008 0,77 0,4 0,6
DM 0043 224 29 7,7 0,89 3,7
DM 0054 225 31 7,3 0,88 3,7
DM 0116 913,6 80,3 11,0 0,92 4,8 0,80 0,4 0,7
DM 0120 1150 100 11,5 0,92 5,7
DM 0132 175 12 14,6 0,94 2,2 0,77 0,5 0,6
DMM0002 160 19 8,4 0,89 2,4 0,77 0,5 0,6
EPU0002 583 69 8,4 0,89 4 0,83 0,2 0,3
GAR0017 617 54 11,4 0,92 2,5 0,71 0,5 0,7
MCH0002 27 9 3,0 0,75 0,6 1,00 0,7 0,7
MCH0003 20 5 4,0 0,80 0,4 1,00 0,6 0,7
P 0106 154,3 10 15,0 0,94 1,6 0,50 0,3 0,5
P 0156 186 20 9,3 0,90 2 0,77 0,5 0,6
P 0167 148 19 7,8 0,89 1,7 0,77 0,5 0,6
P 0180 194,9 13 12,0 0,94 1,8 0,70 0,3 0,5
P 0194 223,2 13 17,0 0,94 2,4 1,00 0,5 0,6
SJ 0002 124 12 10,3 0,91 1,4 0,83 0,5 0,7
SJL0002 102 14 7,3 0,88 1,2 0,91 0,6 0,7
SOL0002 452,4 46,1 10,0 0,91 1,6 0,60 0,5 0,8
T 0230 b,i,d 0,2 1,00
TOT0001 1074 99 10,8 0,92 5,2 0,56 0,9 1,4
TOT0002 127 18 7,1 0,88 1,6 0,77 0,6 0,8
TOT0003 170 25 6,8 0,87 1,6 0,77 0,6 0,8
TOT0004 139 23 6,0 0,86 1,9 0,91 0,6 0,8
V Ni S
POZO V/Ni V/(V+Ni) Prist/Fit Prist/n-C17 Fitano/n-C18
(ppm) (ppm) (%)
UD 0097 12,0 1,2 1,00
UD 0112 13,0 1,3 0,70
UD 0116 12,0 1,2 0,80
UD 0119 12,0 1,2 0,90
UD 0148 12,0 1,3 0,60
UD 0153 12,0 2,2 0,90
UD 0154 150,5 11,4 13,0 0,93 1,3 0,80 0,3 0,5
UD 0168 12,0 1,4 0,90
UD 0170 417 27,7 15,0 0,94 1,8
UD 0185 12,0 1,4 0,80
UD 0198 12,0 2,1 0,50
UD 0209 11,0 1,4 0,90
UD0779 0,68 0,342 0,569
URD0006 465 53 8,8 0,90 3,2 0,77 0,5 0,7
URD0007 700 63,6 11,0 0,92 2,7 0,40 0,23 0,47
VLA0710 196 12 16,0 0,94 1,3 0,50 0,4 0,6
VLA0711 176 11,7 15,0 0,94 1,3 0,70 0,5 0,6
VLA0808 184 12 15,0 0,94 1,4 0,80 0,5 0,6
VLA0810 0,69 0,345 0,559
VLA1402 0,69 0,349 0,576
VLE0686 0,8 0,3 3,0 0,73 0,4 1,00 0,3 0,3
VLF3020 0,2 0,12 1,7 0,63 0,2 1,10 0,3 0,3
WT 0002 0,2 0,12 1,7 0,63 0,03 1,40 0,4 0,4
WT 0055 0,2 0,12 1,7 0,63 0,1 1,10 0,4 0,4
V: Vanadio, Ni: Niquel, V/Ni: Relación de Vanadio sobre Niquel, S(%): Porcentaje de Azufre, Pris/Fit: Relación de
Pristano sobre Fitano, Prist/n-C17: Relación de Pristano sobre su n-parafina n-C17, Prist/n-C18: Relación de Fitano
sobre su n-parafina n-C18.

Tabla A1.10. Listado de Pozos con Parámetros Moleculares de biomarcadores hallados (%ββ,
%20S, % Esteranos y % Esteroides).

POZO (%)ββ (%)20S %C27 %C28 %C29 %T/T+M

ALP0003 49 62 37 32 31
ALP0005 47 61 41 26 32
ALP0007 36 54 33 28 39
ALP0008A 45 63 36 29 36
ALT0016 51,3 43,1 33 30 37 76
ARI0002 58 58 35 31 34 90
C 0227 54,7 51,7 34 32 34 100
CLD0046 56,4 58,9 41,8 33,4 24,8 64,4
CLD0053 60,5 51,6 41,5 32,6 25,8 68,6
CLD0054 57,9 58,4 40,1 34,6 25,3 65,2
CLD0055 42,1 32,5 25,4 62,5
CLD0060 58,7 50,6 41,4 33,7 24,9 66,1
CR 0004 67 41 28 40 32 100
DM 0001 54,4 46,1 33 31 36 84
DM 0116 50,4 43,5 35 29 36 51
DM 0120 59 44 33 30 37
POZO (%)ββ (%)20S %C27 %C28 %C29 %T/T+M

EPU0002 63 43 31 30 39
GAR0017 61 43 37 31 32 90
P 0180 54,2 49,7 33 30 37 87
SJ 0002 66 43 36 27 37
SOL0002 60 55 36 29 34 39
TOT0002 62 47 47 21 32
UD 0119 57 56 37 33 30 100
UD 0154 58,7 54,6 33 34 34 86
UD 0170 53,2 51,7 34 31 35 90
UD 0198 55 53 39 32 28 100
UD0779 56,6 58,8 37,4 33,6 29 34,1
URD0007 55 41 35 32 33 82
VLA0808 55,5 47,3 33 32 35 66
VLA0810 61,4 52,7 39,6 32,9 27,5 37,9
VLA1402 58 65,3 35,9 34,2 29,9
VLF3020 60 57 35 39 26 100
WT 0055 69 73 34 36 30 100
(%)ββ: La isomerización de los átomos de carbono en estéranos regulares, (%)20S:
isomerización en estéranos, (%C27 , %C28 , %C29): Estéranos, %T/T+M ó
TA/(MA+TA): Porcentaje de aromatización de esteroides (monoaromáticos a
triaromáticos)

Tabla A1.11. Listado de Pozos y valores de Dibezotiofenos (1,2+3,4 MDBT).

POZO % 1-MDBT % 2+3-MDBT % 4-MDBT DBT/F

CLA0096 4,3 35 60,7


CLD0046 4,2 35 60,8 0,46
CLD0053 5 35,2 59,8 0,57
CLD0054 4,7 34,6 60,7 0,52
CLD0055 4,3 31,4 64,3 0,38
CLD0060 4,7 34,9 60,4 0,53
CLA0096 4,3 35 60,7
UD0779 20,1 32,7 47,2 1,24
VLA0810 20,1 32,9 47 1,27
VLA1402 19,9 32,8 47,3 1,27
MDBT= Metildibenzotiofeno, DBT=Dibenzotiofeno, F= Fenantreno

-
Tabla A1.12. Relaciones de compuestos identificados en la fracción de C15 con mayor desviacion estandar, utilzados en los
diagramas polares, para los Bloques VIII y Centro Lago

COCIENTES CLD0046 CLA0096 CLD0053 CLD0054 CLD0055 CLD0060 DS

2 32,89 32,87 37,91 35,65 40,74 21,58 6,622


19 57,68 57,68 64,65 57,93 60,23 73,84 6,391
55 31,01 18,56 25,08 31,14 24,72 0,88 11,309
57 144,79 85,08 113,61 139,19 113,77 38,4 39,324
58 3,89 20,79 6,99 3,96 6,2 0,63 7,075
59 5,37 91,13 10,4 5,44 9,49 53,07 35,438
COCIENTES CLD0046 CLA0096 CLD0053 CLD0054 CLD0055 CLD0060 DS

63 22,43 12,61 16,75 22,09 17,84 0,71 8,069


65 104,72 57,79 75,84 98,74 82,08 31,15 27,264
67 3,88 61,91 6,94 3,86 6,84 43,05 25,079
72 4,67 4,58 4,53 4,47 4,6 43,61 15,938
74 0,17 4,91 0,41 0,17 0,38 60,27 24,183
76 51,75 5,65 22,3 48,88 25,16 31,32 17,336
78 1,92 6,05 2,04 1,91 2,1 43,28 16,604
83 1,38 4,38 1,49 1,37 1,53 84,73 33,783
97 1,18 2,26 1,18 1,17 1,18 33,75 13,216
Significado de los Cociente o Relaciones; 2: n-pentano/2,2-dimetilbutano, 19: n-hexano/2,2-dimetilpentano,
55: n-heptano/2,5-dimetilhexano, 57: n-heptano/3,3-dimetilhexano, 58: n-heptano/1-cis,2trans,3-trimetilciclopentano,
59: n-heptano/2,3,4-trimetilpentano, 63: metilciclohexano/2,3,4-trimetilhexano, 65: metilciclohexano/3,3-dimetilhexano,
67: metilciclohexano/2,3,4-trimetilpentano, 72: 2,5-dimetilhexano/3,3-dimetilhexano, 74: 2,5-dimetilhexano/2,3,4-
trimetilhexano, 76: 1-cis,2-trans,3-trimetilciclopentano/3,3-trimetilhexano, 78: 1-cis,2-trans,3-trimetilciclopentano/2,3,4-
trimetilpentano, 83: 1-trans, 2-cis,3-trimetilciclopentano/2,3,4-trimetilpentano, 97: 1,1-demetilciclohexano/3-cis-
etilmetilciclopentano, DS= Desviación Estandar

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Tabla A1.13. Relaciones de compuestos identificados en la fracción de C15 con mayor desviacion estandar, utilzados en los
diagramas polares, para los Bloques VIII y Centro Lago

COCIENTES UD0779 VLA0810 VLA1402 DS

2 55,15 76,08 4,5 36,8039


19 72,54 113,1 183,44 56,1124
55 72,99 0,85 0,98 41,6126
57 251,02 59 103,36 100,5344
59 3,16 46,95 90,47 43,6551
63 50,89 0,46 0,46 29,1158
65 175,02 32,03 48,23 78,2989
72 3,44 69,29 105,72 51,8404
74 0,04 55,13 92,54 46,5308
76 143,37 49,27 75,16 48,6102
78 1,81 39,2 65,79 32,1416
83 1,3 78,72 131,69 65,5759
97 1,13 43,61 54,62 28,2458
120 50,53 85,24 22,51 31,4244
146 22,95 78,93 18,66 33,6270
Significado de los Cociente o Relaciones; 2: n-pentano/2,2-dimetilbutano,
19: n-hexano/2,2-dimetilpentano, 55: n-heptano/2,5-dimetilhexano,
57: n-heptano/3,3-dimetilhexano, 59: n-heptano/2,3,4-trimetilpentano,
63: metilciclohexano/2,3,4-trimetilhexano,
65: metilciclohexano/3,3-dimetilhexano,
72: 2,5-dimetilhexano/3,3-dimetilhexano,
74:2,5-dimetilhexano/2,3,4-trimetilhexano,
76: 1-cis,2-trans,3-trimetilciclopentano/3,3-trimetilhexano,
78: 1-cis,2-trans,3-trimetilciclopentano/2,3,4-trimetilpentano,
83: 1-trans, 2-cis,3-trimetilciclopentano/2,3,4-trimetilpentano,
97: 1,1-demetilciclohexano/3-cis-etilmetilciclopentano,
120: n-octano/3-etilheptano, 146: 2-metiloxctano/3-etilheptano
DS= Desviación Estandar

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